Los mineros de Gales contra el pacto salarial
Los mineros del sur de Gales, han rechazado oír la propuesta gubernamental sobre el control de los aumentos de sueldo a partir de agosto.Hace unos días, los representantes de los mineros de lodo el país habían acordado recomendar a sus compañeros que favorecieran la idea gubernamental para continuar así la política antiinflacionaria.
La decisión de los galeses es un desafío que demuestra que la votación en que se debatirá este tema el próximo mes no va a resultar ni mucho menos, unánimemente favorable al acuerdo conseguido ya por el Gobierno y los líderes sindicales más importantes del ...
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Los mineros del sur de Gales, han rechazado oír la propuesta gubernamental sobre el control de los aumentos de sueldo a partir de agosto.Hace unos días, los representantes de los mineros de lodo el país habían acordado recomendar a sus compañeros que favorecieran la idea gubernamental para continuar así la política antiinflacionaria.
La decisión de los galeses es un desafío que demuestra que la votación en que se debatirá este tema el próximo mes no va a resultar ni mucho menos, unánimemente favorable al acuerdo conseguido ya por el Gobierno y los líderes sindicales más importantes del Reino Unido.
El secretario general del sindicato de mecánicos británicos dijo ayer para apoyar la tesis gubernamental, que esta clase de actitudes « irresponsables» podrían acabar con el Gobierno laborista y traer consigo la vuelta «a los horrores» de la Administración conservadora.
En otro orden de cosas, hubo ayer por fin una buena noticia para British Leyland, la compañía automovilística que depende fundamentalmente del Gobierno. Por una vez, British Leyland ha tenido un balance positivo: durante los pasados meses de este año tuvo 14 millones de libras de beneficios. Sin embargo, la producción de la compañía sigue debilitada: la razón para que se haya producido ese beneficio reside únicamente en la continua caída de la libra en el mercado exterior. Ayer, por ejemplo, la esterlina volvió a bajar de forma alarmante, sobre todo por culpa de la fortaleza alcanzada por el dólar.