El Milan hace oficial el fichaje de Álvaro Morata hasta 2028
El club italiano paga la cláusula de 13 millones de euros al Atlético y firma un contrato al delantero por cuatro temporadas con opción a una más
Álvaro Morata (Madrid, 31 años) jugará en el Milan hasta 2028 tal y como se venía apuntando en los últimos días. El delantero, capitán de la selección española campeona de la Eurocopa, abandona el Atlético de Madrid, al que el club italiano ha pagado los 13 millones de euros de su cláusula de rescisión, la condición que habían impuesto los colchoneros para dejarle marchar, y ficha por los rossoneri por cuatro temporadas con opción a una más. Morata abandona así el Atlético después de cinco años, club al que llegó primero como cedido procedente del Chelsea. Esta será su tercera experiencia en Italia, después de las dos etapas que jugó en la Juventus (2014-16 y 2020-22), un país que para él es su segunda casa, pues ahí conoció a su mujer, Alice Campello, con quien tiene cuatro hijos.
El martes por la tarde, Morata se acercó a la concentración del Atlético en Los Ángeles de San Rafael para despedirse de sus compañeros. No había muchos por la ausencia por vacaciones de los que participaron en la Eurocopa y en la Copa América. Estaban Koke, Marcos Llorente, Azpilicueta y Riquelme, cuatro de sus mejores compadres, a los que anunció en persona que se marchaba. El capitán de la selección española también se despidió de Diego Pablo Simeone y de su cuerpo técnico. El preparador argentino prefería que se hubiera quedado y así se lo había comunicado al club y al propio jugador. El delantero, de hecho, contaba en un principio con quedarse, y el 2 de julio, ante una potente oferta de Arabia Saudí, difundió en sus redes sociales, en consonancia con las del club, un mensaje en que afirmaba que se quedaba. “No puedo imaginar lo que tiene que ser ganar con esta camiseta y no voy a parar hasta conseguirlo”, escribió.
El cambio de opinión se produjo con el desarrollo de la Eurocopa. Las críticas por sus errores ante el gol que le persiguen en su carrera arreciaron de nuevo. No fue el único bache emocional de este curso, pues uno grande fue el que le supuso el gol fallado en el Westfalenstadion de Dortmund en los cuartos de final de la Champions y que Simeone le sustituyera al descanso. Ahora, Morata ha preferido marcharse de España. Nunca ha entendido que, siendo un jugador que se vacía en el campo en tareas menos vistosas que el gol, pudiera contar con un voluminoso número de detractores. Menos comprendía aún que la animadversión se la mostraran algunos de ellos en presencia de sus hijos, de su mujer o de sus amigos más íntimos. Morata no quiere volver a vivir esos episodios y escuchar a sus hijos decirle que no entienden por qué le insultan. Italia es el país de su mujer, y según él, el único en el que se le ha respetado. Ayer, en sus redes sociales, ante el inicio de sus vacaciones con su familia, añadió dos corazones, uno rojo y otro negro, un claro guiño a su nuevo club. Morata continuará su carrera en el Milan.
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