Arturo Coello, el pucelano que pone cara a la nueva era del pádel

El número 1 del World Padel Tour vuelve a su ciudad, Valladolid, como emblema de la nueva generación de este deporte que ha triplicado el número de federados en 10 años

Arturo Coello golpea la bola durante un partido del World Padel Tour en Dubai (Emiratos Árabes Unidos), este mes de junio.ALI HAIDER (EFE)

El nuevo icono del pádel tiene ganas de comer en casa de la abuela. Arturo Coello (Mojados, Valladolid; 21 años) ha vuelto a casa como número 1 del mundo en el World Padel Tour (WPT), la principal competición del deporte de la pala y los muros de metacrilato. El circuito ha recalado esta semana en la plaza Mayor de Valladolid y allí, donde tantas veces jugó de niño o disfrutó de conciertos en las fiestas patronales, Coello ha afrontado el desafío de mantenerse en lo alto. El chaval sigue invicto en 2023 y junto a su pa...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El nuevo icono del pádel tiene ganas de comer en casa de la abuela. Arturo Coello (Mojados, Valladolid; 21 años) ha vuelto a casa como número 1 del mundo en el World Padel Tour (WPT), la principal competición del deporte de la pala y los muros de metacrilato. El circuito ha recalado esta semana en la plaza Mayor de Valladolid y allí, donde tantas veces jugó de niño o disfrutó de conciertos en las fiestas patronales, Coello ha afrontado el desafío de mantenerse en lo alto. El chaval sigue invicto en 2023 y junto a su pareja, el argentino Agustín Tapia, ha revolucionado un deporte joven y en constante crecimiento; cada año aumentan los jugadores y el juego se expande entre aficionados y profesionales. El castellano representa a una nueva generación tras esos años de popularización padelera, con patrocinadores y empresas peleando por administrar y rentabilizar la fiebre por el juego.

El pucelano, ya en la final, ha revolucionado la ciudad con su presencia y con una racha difícil de encontrar tanto en el pádel como en cualquier deporte: 42 victorias seguidas. Nadie puede con ellos y el WPT refleja en sus estadísticas sus éxitos. Lo mismo da Chile, La Rioja o Bruselas: ambos han arrasado este año y han desbancado a históricos como Juan Lebrón o Alejandro Galán, emblemas de las pistas junto a nombres como Paquito Navarro. A estos habituales protagonistas de jugadas seguidas por un millón de seguidores en la cuenta de Instagram del WPT, buen baremo para medir la explosión del pádel, los ha adelantado el joven Coello, representante de esa generación que los vio jugar antes de soñar con alcanzar estas cotas.

Partido entre Alex Galán y Jon Sanz en Valladolid. World Padel Tour.

“El pádel lo conocí con siete años y a los ocho o nueve jugaba como cualquier extraescolar, hacía todos los deportes, como un niño cualquiera”, recuerda el jugador junto a la pista vallisoletana, donde participar “es un premio” y le trae “muchos recuerdos” de su infancia. Coello se rinde a Juan y Ale [Alejandro Galán] como primeros número 1 españoles en un deporte dominado por argentinos. “Cambiaron el pádel cuando se unieron, revolucionaron la forma de jugar. Hemos adaptado lo que ellos impusieron, van apareciendo jugadas y movimientos, es un deporte joven y quedan muchas formas por desarrollar. En unos años vendrán chavales que no saben jugar al pádel ahora y me ganarán”, asume el zurdo junto a la también vallisoletana Beatriz Caldera, la 33 del campeonato femenino.

La fama acecha y los 200.000 seguidores del Instagram de Coello acreditan que ese “chico humilde y tranquilo”, con ganas de que su abuela pueda verlo competir en casa y de dormir con los suyos como paréntesis entre tanto hotel, pronto puede perder la tranquilidad por la calle. “Sería la cosa que menos me gustaría, puede darse, pero si esa fama les llega a los jóvenes cuando yo ya me haya retirado no pasa nada, yo prefiero la vida discreta”, reconoce el rey Arturo, como se le conoce, ovacionado esta semana con sus remates y devoluciones.

El fervor por el pádel ha revolucionado Valladolid, detalla Juan Méndez, director de comunicación de Madison, organizadora del torneo junto a WPT. “Los hoteles están llenos, hemos vendido casi todas las entradas y esperamos un retorno directo de tres millones de euros para la ciudad”, asevera Méndez, cuyo evento cuenta con el 48% del público procedente de otras comunidades o países. En 2022 hubo más de 30.000 espectadores, cifra probablemente superada en esta edición según sus cálculos, y cuatro millones de visualizaciones virtuales. “La gente está como loca, España necesitaba unos números 1 españoles como Rafael Nadal en el tenis o Fernando Alonso en la Fórmula 1″, compara Méndez.

El circuito principal, privado y coordinado por WPT y el grupo Damm, se ha abierto en los últimos años a nuevos socios y al músculo financiero catarí, responsable del circuito Premier mediante QSI, nacido en 2021, y apoyado por la Federación Internacional de Pádel. Ambos han mantenido pugnas, pues WPT exigía exclusividad a los inscritos en sus torneos, pero durante este año algunos saltaron a Premier, con las consiguientes denuncias por incumplir esa exigencia y la creación de un calendario rígido para impedir estas fugas a la competencia. Hasta ahora.

El circuito catarí

La disputa se ha saldado con QSI invirtiendo con fuerza para entrar en el WPT y fusionar así ambos circuitos tras meses de torneos independientes. El presidente de la Federación Española de Pádel (FEP), Ramón Morcillo, celebra esa unificación “para atraer a grandes marcas y disponer de un calendario ordenado” tras abrir WPT “al espectáculo” y propiciar la entrada de nuevos inversores; además, explica, estarán en Polonia para presentar este deporte en el campeonato de juegos europeos de 2023, una vía más de visibilidad.

El pádel, que en 2012 contaba 39.600 federados, computa hoy casi 100.000 federados en España, por encima del tenis, histórico líder en materia de raquetas, pelotas y redes. Morcillo aplaude el “momento álgido” de este deporte y estima cuatro millones de jugadores regulares, impulsados por el tirón de 2020 a 2021, cuando ganaron 20.000 licencias. “Se puede jugar desde temprana edad, pero también juegan personas mayores; permite socializar y tiene una alta participación de mujeres, eso le da mucho despegue”, destaca. Morcillo considera “divertida” esta disciplina y no demasiado exigente para los meros aficionados aparte de los preparadísimos profesionales. Esa es, seguramente, la clave del éxito.

Puedes seguir a EL PAÍS Deportes en Facebook y Twitter, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.

Sobre la firma

Más información

Archivado En