Zubimendi: “Busquets ha sido un referente, hay que intentar parecerse a él”
Antes de la semifinal de la Liga de Naciones contra Italia el mediocentro de la Real Sociedad y de la selección habla en la entrevista de su admiración por el ex del Barça y de su otro modelo, Xabi Alonso, que le entrenó en el filial
En el decepcionante primer parón de selecciones bajo el mando de Luis de la Fuente, solo hubo un futbolista de campo que no jugó ni un minuto, el mediocentro de la Real Sociedad Martín Zubimendi (San Sebastián, 24 años). Pese a que el seleccionador introdujo ocho cambios en su segunda convocatoria, ahí se ha mantenido el donostiarra, pieza esencial para De la Fuente en la sub-21, y ahora en la Real de Alguacil clasificada para ...
En el decepcionante primer parón de selecciones bajo el mando de Luis de la Fuente, solo hubo un futbolista de campo que no jugó ni un minuto, el mediocentro de la Real Sociedad Martín Zubimendi (San Sebastián, 24 años). Pese a que el seleccionador introdujo ocho cambios en su segunda convocatoria, ahí se ha mantenido el donostiarra, pieza esencial para De la Fuente en la sub-21, y ahora en la Real de Alguacil clasificada para la Champions. El futbolista, señalado en el Barcelona como el sustituto ideal de Sergio Busquets, llevará el número 5 del exbarcelonista en esta fase final de la Liga de las Naciones en cuya segunda semifinal España se enfrenta este jueves a Italia en Enschede, en Países Bajos (20.45, La1).
Pregunta. Usted ha jugado unas semifinales de un Europeo sub-21 y otras de unos Juegos con De la Fuente. ¿Cómo es antes de un partido así?
Respuesta. De la Fuente es un entrenador tranquilo, optimista, muy positivo, y que demuestra mucha confianza en nosotros.
P. Con el ruido de estos días alrededor de su figura, ¿le nota parecido a entonces, más tenso...?
R. Creo que bastante parecido, e incluso, no sé, le puedo ver más tranquilo. Espero que no haga caso al ruido.
P. Illarramendi le entregó el otro día en Anoeta, tras su último partido, el número 4. ¿Cómo siente ese traspaso de poderes?
R. Fue un detalle muy bonito por parte del club, aparte de Illarra, no me lo esperaba. El número 4, aparte de ser mi favorito, en la Real es una pieza clave dentro del equipo, por la gente que lo ha llevado en anteriores veces. Recibirlo directamente de las manos de Illarra… Fue un momento bonito, y siendo de la casa, hacerlo delante de toda la gente... Creo que el doble de bonito.
P. En la selección ha heredado el 5 de Busquets. ¿Ha sido deliberado?
R. Fue casualidad. Cogí el 4, pero al llegar Nacho [por la lesión de David García], se lo tuve que dar porque él lleva más partidos que yo. El único que quedaba libre era el 5 que había cogido David García. Y es verdad... qué casualidad. No le hago ascos, porque es el número que llevaba Busi, y aquí en la selección era un número referente. Y contento.
P. ¿Se fijaba mucho en Busquets, que jugaba en su posición?
R. Sí, sí que te fijas en él, pero sabiendo también las limitaciones de cada uno y los estilos de cada uno. Creo que es diferente a mí, con una base y con una idea de juego parecidas, pero cada uno con sus matices. Y, cómo no, ha sido un referente.
P. ¿Qué tiene usted distinto?
R. Sobre todo, fijándome en estos últimos años, otro físico a la hora de poder correr para atrás. Más velocidad, más arranque en conducción hacia adelante. Pero bueno, él lo suple con su inteligencia, con su primer toque, con su visión, con sus recortes...
P. Él parecía controlar un espacio tan grande casi andando.
R. Sí, sí. Está claro que depende mucho del equipo. Si tu equipo no presiona junto, y crea muchos espacios alrededor de ti... Yo sufro mucho si mi equipo no está junto y me rodea, porque me cogen la espalda y enseguida se te ven un poco las carencias, o esos espacios que te hacen daño.
P. Hace tiempo dijo que Busquets les había hecho mucho daño a los que juegan en su posición. ¿Por qué?
R. Es en tono irónico. Porque Busquets ha implantado aspectos que tienes que tener que antes igual no se hacían. Pero lo cojo como motivación: ha sido un referente y tenemos que intentar apuntar alto. Y si nos quedamos en el camino, por lo menos hemos intentado parecernos a él.
P. En el Barça han dicho muchas veces que le ven como el jugador ideal para relevarle. ¿Cómo le hace sentir?
R. La retirada de Busquets hace que vayan saliendo nombres en esa posición, tanto el mío como el de otros. A veces te puede desconcentrar un poco, o sacarte un poco de tu foco del día a día. Pero creo que me he mantenido firme. Tampoco he hecho mucho caso porque quería cumplir todos los objetivos con la Real. Así que, contento por cómo lo he llevado.
P. ¿Qué significa jugar la Champions con la Real para alguien que lleva ahí desde niño?
R. Ya lo viví cuando era joven, que fui a muchos partidos de recogepelotas. Y ahora, a vivirlo desde el campo y a jugarla. Creo que pocos lo han hecho en la Real Sociedad, así que lo tenemos que aprovechar.
P. ¿Estuvo en todos?
R. Te va tocando, pero recuerdo el del Manchester United en casa. Sí, sí, sí, lo recuerdo... [sonríe emocionado].
P. ¿Más nervioso que jugando?
R. Sí, sí, sí, De hecho, me pasaba que me quedaba mirando el partido y no me daba cuenta de que tenía que pasar el balón. Y me acuerdo que Claudio Bravo me lo quitó alguna vez. Si, sí, de estar mirando el partido [ríe].
P. Antes de heredar el 4, desde el filial llevaba el 3, que no le gustaba. ¿Cómo se reconcilió?
R. Me quedaban muy pocos números libres para elegir. Y me decanté por el 3, que a priori no es un número de mediocentro, que no estaba entre mis preferidos. Pero bueno, preguntando a Illarra, que también había llevado el 3 en el Europeo… y a Xabi Alonso, que me lo crucé en la cocina y me dijo: ‘Hazme caso, que el 3 está bien’. Que lo había llevado en el Bayern… Y cuando va pasando el tiempo le vas cogiendo cariño.
P. ¿Qué importancia tuvo para usted que le entrenara Xabi Alonso en el filial?
R. Creé una relación bastante fuerte, y más siendo yo de esa posición: ponía el foco en mí quizá más que en otros. Era un año clave para mí, porque venía de no jugar muchos minutos. Y llegó él con una idea muy clara en la que me veía bastante beneficiado, y sí que puso mucho énfasis y aprendí con él aspectos muy importantes de la salida de balón, de cómo salir dependiendo de cómo presionaba el rival. Creo que di un paso adelante.
P. ¿En qué le empuja Imanol ahora?
R. Seguramente, el hablar en el campo, mandar un poco más. Es un hándicap que llevo ya hace tiempo con él. Eres una pieza que tiene que estar constantemente ayudando y el hablar es muy importante. Y los duelos: creo que todavía puedo ir más fuerte de lo que voy.
P. ¿Y el tiro? Solo ha probado 13 veces en toda la Liga.
R . Sí, sí. Seguramente todas por encima del larguero [ríe]. Eso también es verdad que es un aspecto más. No está en mis prioridades, pero es verdad que cuando llego, creo que tengo que chutar más. Ahora creo que es mi tercera opción, siempre. Primero es pasar, lo siguiente es conducir y si tengo que chutar, chuto, pero creo que debería cogerlo con más confianza.
P. Usted fue campeón alevín de ajedrez de Gipuzkoa. ¿Sigue con ello? Hay futbolistas que juegan mucho, como Pulisic.
R. Aquí también hay, eh. Yo en los Juegos Olímpicos me pasaba todos los días jugando con [Unai] Simón, y ahora creo que está Dani Olmo también, que le mete duro.
P. ¿Están jugando?
R. De momento no hemos jugado, pero ya me han dicho para jugar. Pero al ser ellos mejor que yo me da un poco de…
P. ¿Le gana Unai?
R. Sí, sí. Creo que ha estado jugando toda la temporada ahí en el Athletic y yo ya no juego tanto.
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