España puede con todo: victoria ante Finlandia y a semifinales del Eurobasket contra Alemania
La selección, liderada por los 27 puntos de Willy y la entrega de Rudy, bate al equipo de Markkanen (100-90) y luchará por las medallas por 11º Europeo consecutivo
Ni las torres de Lituania ni los velocistas de Finlandia. Nada puede de momento con España, que remontó 15 puntos de desventaja contra el revoltoso equipo nórdico (100-90) y jugará las semifinales del Eurobasket por 11ª ocasión seguida, todas desde 1999. En su habitual camino hacia las medallas se enfrentará el viernes a las 20.30 a Alemania, que derrotó a Grecia en un espectacular partido por 107-96. Giannis Antetokounmpo fue descalificado por sumar dos personales antideportivas cuando...
Ni las torres de Lituania ni los velocistas de Finlandia. Nada puede de momento con España, que remontó 15 puntos de desventaja contra el revoltoso equipo nórdico (100-90) y jugará las semifinales del Eurobasket por 11ª ocasión seguida, todas desde 1999. En su habitual camino hacia las medallas se enfrentará el viernes a las 20.30 a Alemania, que derrotó a Grecia en un espectacular partido por 107-96. Giannis Antetokounmpo fue descalificado por sumar dos personales antideportivas cuando faltaban algo más de cuatro minutos y después de firmar 31 puntos, siete rebotes y ocho asistencias. Eslovenia-Polonia y Francia-Italia cierran este miércoles los cuartos.
La selección que reinó en 2009, 2011 y 2015, la vigente campeona del mundo, continúa atornillada en la élite aunque el cambio generacional sea una evidente realidad. En el duelo entre gigantes en Berlín, Markkanen emergió con 28 puntos y 11 rebotes, pero Finlandia acabó rendida al poderío de Willy Hernangómez (27 y 5) y a la inagotable fe de Rudy Fernández, el ancla con la España del pasado, el capitán del presente.
Scariolo varió de plan desde el inicio a la espera del vendaval que temía. Joel Parra, uno de los jugadores menos utilizados, partió de salida para ejercer de carcelero del terremoto Markkanen pese a ser 13 centímetros más bajo. Pero la tormenta nórdica llegó por todos lados. Con la estrella sujeta en ese arranque en el que España tomó cierta ventaja (8-2), Finlandia activó al resto de liebres. El conjunto finlandés es mucho más que su astro de la NBA. Markkanen es una pieza de lujo en un mecanismo muy bien engrasado y que sabe perfectamente a lo que juega: una movilidad altísima de piernas y brazos, con y sin balón, el juego a mil revoluciones, contragolpes, penetraciones y el cañón siempre caliente desde el triple. El equipo con una estatura media más baja de los 24 que arrancaron el Eurobasket (1,97m) es una delicia para el espectador y una tortura para el rival.
Con esa receta de correr, manosear poco la pelota, compartir la posesión (16 asistencias en la primera parte, 25 al final) y lanzar a la mínima, Finlandia dio la vuelta al resultado (9-11) y comenzó un correcalles que puso patas arribas al conjunto de Scariolo. El técnico cambiaba continuamente las piezas y variaba los sistemas (de defensa individual a la zona), pero los chicos que dirige Lassi Tuovi (35 años, dos menos que Rudy) siempre encontraban una rendija por la que colarse a toda mecha. La pesadilla era real para España. Ya había avisado Scariolo de que enfrente aparecía un rival difícil de descifrar, al que apenas tenían en el radar, con un juego original, atípico pero muy efectivo. El duelo confirmó sus temores. España corría como pollo sin cabeza, perdía el balón y no acertaba desde el perímetro (13-22, 19-30, 31-44). Finlandia volaba sin necesidad de la versión extraterrestre de Markkanen (10 puntos en la primera parte), coleccionando dardos desde el triple. Willy y Juancho Hernangómez sostenían a los suyos bajo la pintura en medio de los sudores fríos y unas cuantas defensas con los dientes apretados dejaron viva a la selección al llegar al descanso: 43-52. España había sido más inferior en el juego que en el marcador.
La bronca de Rudy en el intermedio impresionó incluso a Scariolo. De la sacudida emocional del capitán y de la pizarra del técnico salió una España más solidaria, rápida para mover el balón y encontrar al hombre libre. Y claro, con los brazos en alto en defensa, el sí o sí de este conjunto de pico y pala. Para la selección no había otro aliento que cerrar el grifo y jugar con un punto más de intensidad. Un parcial de 8-1 confirmó esa tendencia que ya había apuntado el grupo al final del tercer cuarto (51-53). Willy percutiendo en la zona, Parra con las esposas sobre Markkanen y el mismo voltaje en defensa que el rival en ataque. Finlandia había acelerado la cita y ahora se encomendaba más que nunca a su veloz genio de 2,13m para anotar o pasar. Un triple de Parra subió el 60-57 a la pantalla del Mercedes Benz Arena.
Willy contra Markkanen. El pívot español recibió el aplauso del banquillo cuando Garuba le dio el relevo al final del tercer cuarto con el partido arriba y abajo (57-64). Era la hora de los mayores y ahí dio un paso al frente Rudy con dos robos seguidos (cinco en total, igual que todo el rival junto). El capitán es un defensor de acero. Alberto Díaz, un alumno aventajado. Las faltas en ataque que ha provocado en el Eurobasket el base malagueño valen oro. Un tapón del esforzado Garuba y dos punzadas de Rudy y Brizuela desde el perímetro mandaron a España un paso arriba (73-67). Finlandia ya era Markkanen o Markkanen, que no es poca cosa.
Con Joel Parra de cuatro y Garuba de cinco, la selección arrancó el tramo decisivo con un quinteto bajito. Darío Brizuela encendió la mecha de la dinamita con ese juego de polvorilla que tanto agradece la selección en momentos de atasco. Que la fe había regresado lo demostró un triple de Garuba. Las zapatillas finlandesas ya no corrían a tanta velocidad (84-82) y el acierto en los tiros de campo bajó del 66% en el intermedio al 55% final. También el reparto de asistencias simbolizó el cambio a favor de la selección de Scariolo: de ocho en los dos primeros cuartos para España a 17 en los dos siguientes (11 en general de Brown). Para Finlandia, al revés: 16-9.
Willy taponó a Markkanen y Rudy estiró su exhibición de entrega: robo y asistencia, triple de Brizuela. Dos misiles seguidos del capitán desde la distancia lanzaron al grupo un cuerpo por delante: 95-84 a falta de 1m 48s y el triunfo en la mano. En ataque y en defensa, el profesor Rudy Fernández, el mejor broche posible para que la selección vuelva a pisar las semifinales de un Europeo. Con muchas caras nuevas y siete debutantes en una gran cita, pero también con el ADN competitivo intacto y Scariolo en el banquillo y Rudy en la pista y el vestuario como hilo conductor con la generación de oro. Esta España del cambio también luchará por las medallas.
España (19+24+30+27): Brown (10), López-Arostegui (2), Parra (5), Pradilla (3), Willy Hernangómez (27) ―cinco inicial―, Rudy Fernández (11), Jaime Fernández (-), Brizuela (14), Alberto Díaz (6), Garuba (7), Juancho Hernangómez (15).
Finlandia (30+22+15+23): Maxhuni (2), Salin (11), Jantunen (18), Huff (5), Markkanen (28) ―cinco inicial― Little (6), Koponen (3) Kantonen (-), Valtonen (4), Madsen (13).
Árbitros: Yonah Rosso (Francia), Martin Horzov y Kerem Baki (Turquía). Eliminados: Madsen (m. 38).
Mercedes Benz Arena: 7.975 espectadores.
Cruces de la fase final en Berlín.
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