Xavi: “La primera ocasión entró y cambió el partido”
El técnico del Barcelona reconoce que no fue fácil derrotar al Sevilla y Lopetegui lamenta las ocasiones perdidas antes del 0-1
El Barcelona se impuso con autoridad (0-3) en uno de los campos, el Sánchez Pizjuán, donde antes solía pasar por dificultades. “El balance es muy positivo. No empezamos bien y luego nos recuperamos con goles y buen juego”, afirmó Xavi, que gesticuló una barbaridad en la banda en el inicio de un partido que acabó con la tercera victoria consecutiva del conjunto catalán. “Hemos visto cosas muy positivas y no todo el mundo va a ganar aquí, en este c...
El Barcelona se impuso con autoridad (0-3) en uno de los campos, el Sánchez Pizjuán, donde antes solía pasar por dificultades. “El balance es muy positivo. No empezamos bien y luego nos recuperamos con goles y buen juego”, afirmó Xavi, que gesticuló una barbaridad en la banda en el inicio de un partido que acabó con la tercera victoria consecutiva del conjunto catalán. “Hemos visto cosas muy positivas y no todo el mundo va a ganar aquí, en este campo, por 0-3″, indicó el entrenador del conjunto catalán. “No me he sentido cómodo en ningún momento y para nada ha sido fácil. El tema es que hemos sido muy efectivos, mejores que el Sevilla sí, pero repito que no ha sido fácil. Eso de los partidos fáciles no existe. El 0-1 ha sido balsámico. La primera ocasión que tuvimos entró y cambió el partido”.
“Ya veremos si Koundé jugará de lateral derecho en los próximos partidos. Ha llegado Héctor (Bellerín) y Sergi Roberto ha entrado muy bien. La verdad es que Koundé, como todo el equipo, ha hecho un gran partido”, añadió el preparador catalán. “Gavi, seguramente, fue el mejor del partido. Debemos tener mucha cautela pero hay que ser humildes porque el camino es largo y queda mucho”, indicó un entrenador que siempre busca algo más en el rendimiento de su equipo.
“Si no eres contundente y a la primera sufres en tu área, pues es normal que pierdas ante un equipo tan bueno, que tiene una plantilla extraordinaria. Hemos tenido varias ocasiones antes del 0-1 y no pudimos marcar. La foto es fea, pero hay aspectos positivos. El equipo quiere y desde ahí vamos a construir un futuro mejor. Iremos construyendo después de pagar este peaje”, aclaró, por su parte, Julen Lopetegui, entrenador de un Sevilla que ha cuajado un mal inicio de Liga.
“Solución para los cortes de luz de los barrios hartos”, rezaba una gran pancarta en el Gol Norte del Sánchez Pizjuán apoyando a los diversos barrios de Sevilla que sufrieron cortes de electricidad en plena ola de calor este verano. Julen Lopetegui buscó también una solución a los problemas de un equipo que ha perdido la intensidad y la fuerza que le daban dos centrales de la talla de Diego Carlos y Koundé. Lopetegui, que tenía a Rekik lesionado, optó por colocar a Fernando de central, con Gudelj por delante de mediocentro defensivo. La idea no funcionó. Primero porque colocar a Fernando ante auténticas balas como Dembelé y Lewandowski es condenarlo al fracaso. Así, les confundieron los movimientos de Nianzou buscando al polaco hasta el centro del campo para descolocar a su propia defensa.
En realidad, la valentía acabó castigando a Lopetegui. No solo dispuso una defensa muy novedosa ante un rival de gran potencial, también diseñó un partido con una presión altísima a los jugadores del Barcelona. El choque era un continuo uno contra uno con los jugadores del Sevilla marcando al hombre a los del Barça en su campo. Y claro, cualquier error en la presión o una pérdida de balón condenaba al Sevilla, obligado a cerrar mucho espacio por detrás con jugadores como Dembélé o Lewandowski, auténticos aviones.
La afición premió el esfuerzo del equipo y la táctica de un entrenador que ante las críticas respondió con una versión muy valiente. Otra cosa es concluir si tenía los jugadores adecuados para ello o si los movimientos de Nianzou en busca de Gavi no acabaron por desquiciar a los suyos. Los golpes de Lopetegui a su propio banquillo señalaban que la cosa no iba bien. Xavi, por su parte, pasó de mostrarse muy enfadado al inicio del choque a ir moderando sus reacciones.
Lopetegui ordenó una defensa de tres centrales en el segundo tiempo con la entrada del joven Carmona. Intentó medir el riesgo, pero su equipo perdía ya por 0-2. Con tanto central, otro, Eric, le hizo el tercero. Entonces llegaron los silbidos de una grada descontenta con lo que veía. No solo porque el Barcelona castigaba la valentía del Sevilla con una tremenda efectividad. También porque resultaba casi imposible que su equipo marcara un gol. La grada la tomó entonces con En- Nesyri cuando fue cambiado. La respuesta de Lopetegui fue aplaudirle.
No hubo ni un grito pidiendo la destitución del técnico. Nervión, por ahora, no quiere sangre. Eso sí, el martes llega el Manchester City en el estreno de la Liga de Campeones para el equipo andaluz, con un punto de 12 posibles en la Liga. Rakitic, capitán del Sevilla, regresaba al once inicial del equipo andaluz. “Es un poco complicado. Empezamos a un ritmo espectacular. Ellos no sabían qué hacer, pero de la nada nos marcaron el 0-1 y después el 0-2. Ahí se marcó la diferencia”, señaló el centrocampista que regresó.
“Era un partido muy difícil. Intentamos imponer nuestra manera de jugar y eso fue lo más importante para ganar. El Barça es el equipo que siempre tiene que tener el balón. Presionamos siempre arriba y por eso marcamos goles. La Liga es un campeonato muy largo, todavía queda mucho. Estoy muy contento. Mis compañeros me ayudaron mucho para adaptarme”, afirmó Raphinha, autor del primer gol del Barcelona y que, como su equipo, fue de más a menos.
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