La Copa de la necesidad

En un claro choque de estilos, el Valencia se juega la temporada a una carta ante un Betis que desea plasmar con un título su consolidación en la élite del fútbol español

Una aficionada se fotografía junto a la Copa del Rey, que se expone en Metropol Parasol en Sevilla.Raúl Caro (EFE)
Sevilla -

Llovió con insistencia ayer en Sevilla. La capital de Andalucía acoge la séptima final de la Copa de su historia (a las 22.00, en Telecinco). La primera fue en 1925, en el desaparecido estadio Reina Victoria, donde el Barcelona se impuso al Arenas por 2-0. La última fue el año pasado, en el mismo escenario que ahora, este estadio de La Cartuja donde el Barcelona y Messi lograron su último título tras golear al Athletic (4-0). El estadio de La Cartuja, que es una auténtica ratonera por su escas...

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Llovió con insistencia ayer en Sevilla. La capital de Andalucía acoge la séptima final de la Copa de su historia (a las 22.00, en Telecinco). La primera fue en 1925, en el desaparecido estadio Reina Victoria, donde el Barcelona se impuso al Arenas por 2-0. La última fue el año pasado, en el mismo escenario que ahora, este estadio de La Cartuja donde el Barcelona y Messi lograron su último título tras golear al Athletic (4-0). El estadio de La Cartuja, que es una auténtica ratonera por su escasa accesibilidad, acogerá por tercera vez consecutiva la gran fiesta del fútbol español, a la que acuden el Betis y el Valencia desde distintas posiciones, pero con cierta necesidad. El Valencia se juega la temporada a una carta. Décimo en la Liga con 42 puntos, el equipo que dirige José Bordalás busca el título y la clasificación para la Liga Europa para darle un indiscutible lustre a una temporada y una época algo discretas. El actual Valencia está lejos del equipo que ganó su última Copa precisamente en Sevilla, en el Benito Villamarín, al Barcelona de Messi. Un Valencia que quedó en la cuarta posición y derrotó al gigante catalán con tantos de Gameiro y Rodrigo.

Ahora, de la mano del incansable Bordalás, el Valencia usa otras armas para pasar a la historia. Es un equipo que defiende razonablemente bien y es muy duro de pelar. En cuestión de estilos, cada equipo tiene el suyo y es lícito si está amparado por el reglamento, aunque sea en el límite. “Me hace gracia que se siga hablando del estilo sin haber comenzado el partido, acusándonos de cosas que no son ciertas. Imagino que con el objetivo de condicionar. Me parecen irrespetuosas y fuera de lugar”, afirmó el propio Bordalás con relación a unas declaraciones de Manuel Pellegrini tras perder ante el Elche. Mientras, el frío y la lluvia campaban a sus anchas en una de las zonas más húmedas de Sevilla, instalada entre dos los dos brazos del río Guadalquivir a su entrada en la capital andaluza. Todo apunta a que el Valencia jugará con una línea de tres centrales y la intención de hacerle un partido muy incómodo al Betis, con Guedes como gran argumento para crear problemas a los andaluces. En Sevilla ya ganó la Copa en este mismo estadio en 1999 (3-0) al Atlético para abrir una etapa gloriosa. Otra se cerró en 2019 con el citado triunfo contra el Barcelona en el Benito Villamarín.

El Betis vive una temporada de felicidad de la mano de Manuel Pellegrini. Quinto en la Liga, a cuatro puntos del Atlético, cuarto, ha desarrollado una temporada estupenda. Juega de forma alegre al fútbol, la unión con su afición es absoluta y, sin embargo, la necesidad también le atenaza. El club, en crecimiento, necesita un título 17 años después del último en 2005 que consolide su progresión y le permita instalarse en la élite del fútbol español, donde tantos años lleva ya su gran rival de la ciudad, el Sevilla. El Betis actuará de local en La Cartuja, donde más de 20.000 aficionados de ambos equipos ocuparán las gradas mientras otros 40.000 béticos llenarán el Benito Villamarín para ver la final en una pantalla gigante. “No sé qué ha dicho Bordalás. El Valencia tiene un estilo distinto del nuestro, pero es absolutamente aceptable y válido dentro de un contexto futbolístico. Es un equipo que defiende bien y fuerte”, afirmó Manuel Pellegrini. El chileno tiene la opción de ganar su primer título en España después de haber entrenado al Villarreal, el Madrid y el Málaga. “Cada etapa es distinta, pero sin duda sería muy bonito levantar esta Copa”, finalizó el chileno.

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