Verstappen se lleva en Abu Dabi la pole más decisiva del año
El holandés arrancará justo delante de Hamilton en la prueba que decidirá el Mundial, gracias al plan coral de Red Bull
Ha tenido que pasar prácticamente una década y el ciclo de dominio más aplastante de la historia de la Fórmula 1 para que dos equipos vuelvan a jugarse el Mundial en el último gran premio del curso, en este caso en Abu Dabi (14:00 horas, Movistar Fórmula 1 y DAZN), donde Max Verstappen y Lewis Hamilton se disputan este domingo mucho más que la corona de 2021. El relato es el que los promotores del gran circo, los patrocinadores y también los aficionados habían diseñado en sus mejores sueños. ...
Ha tenido que pasar prácticamente una década y el ciclo de dominio más aplastante de la historia de la Fórmula 1 para que dos equipos vuelvan a jugarse el Mundial en el último gran premio del curso, en este caso en Abu Dabi (14:00 horas, Movistar Fórmula 1 y DAZN), donde Max Verstappen y Lewis Hamilton se disputan este domingo mucho más que la corona de 2021. El relato es el que los promotores del gran circo, los patrocinadores y también los aficionados habían diseñado en sus mejores sueños. La beligerancia entre los dos rincones ha ido subiendo de voltaje en la misma medida que los dos protagonistas se emparejaban. Los diversos encontronazos entre el joven aspirante holandés y el omnipotente británico han activado a sus respectivos equipos, dos gigantes como Mercedes y Red Bull, que son tan buenos proyectando bólidos como lo son articulando campañas para generar una corriente de opinión favorable, ya sea en los despachos de la Federación Internacional del Automóvil (FIA), en las gradas de los circuitos o en aquellos que se dan cita frente al televisor.
Después de años de incertidumbre, la curva de popularidad del certamen ha seguido una trayectoria ascendente que seguramente llegará a su punto más alto este domingo, donde la hinchada se frota las manos ante el duelo a media tarde que se avecina. No hay indicativo que mejor refleje la igualdad entre Verstappen y Hamilton que los 369,5 puntos que ambos poseen en sus casilleros, y que simplifica hasta el extremo los posibles desenlaces: quien termine por delante del otro se lleva el premio gordo, por más que si ninguno de los dos puntúa sería Red Bull quien cantaría el alirón, por el mayor número de victorias de su piloto.
Nueve triunfos acumula Mad Max por los ocho de su oponente, que llega más embalado al último asalto tras haberse adjudicado las tres últimas pruebas. La mayor distancia entre ambos fueron los 32 puntos que les separaron tras la novena parada del calendario (Austria). Desde entonces, el actual campeón fue reduciendo ese margen, respaldado por la velocidad del motor Mercedes de su monoplaza, aunque la paridad en la segunda parte de ejercicio fue tremenda. En las últimas ocho citas, el diferencial entre los puntos que ha sumado el uno y el otro es de solo tres puntos a favor de Hamilton (148 puntos por 145 de Verstappen).
El objetivo en sí es colosal, y de allí el nivel de agresividad de unos y otros, especialmente a medida que se ha ido acercando el cierre del telón. A la espera de este último acto, el enfrentamiento entre los dos candidatos y sus escuderías llegó al rojo la semana pasada, en Arabia Saudí, donde se pudo ver a un Verstappen totalmente desencadenado, que solo pudo ser contenido por los comisarios, a golpe de sanción, una medida que dio pie al victimismo de Red Bull.
Es imposible fijarse en el chico de Hasselt y no ver en él trazos de aquel Hamilton que también se reveló, en su caso contra Fernando Alonso, en 2007 y cuando ambos compartían el garaje de McLaren. La tropa del búfalo rojo se encuentra ante una oportunidad única de asestarle a Mercedes un hachazo brutal que ponga en relieve su músculo y autoconfianza. Nadie se imaginó que la estructura energética fuera capaz de optar al título llevando al límite al fabricante de la estrella, dominador absoluto de la era híbrida (siete dobletes consecutivos desde 2014). Ferrari y McLaren se vieron tan lejos que se borraron prácticamente antes de comenzar, para centrarse en el coche de 2022. Red Bull vio una posibilidad y se lanzó a por ella. Pase lo que pase en el Yas Marina, eso ya es una victoria.
Como siempre, la arrancada será clave, por más que las estrategias de Verstappen y de Hamilton sean opuestas. El primero, que saldrá desde la pole position deberá afrontar la primera tanda de vueltas con las gomas más blandas. El segundo lo hará con la especificación media, cosa que le permitirá parar más tarde. En la cronometrada más decisiva de todas, Red Bull clavó a la perfección un plan de rebufos perfecto, en el que Checo Pérez sacrificó su primer intento de vuelta rápida para tirar de su compañero, que se situó medio segundo por delante de Hamilton, que comenzará el segundo. Carlos Sainz lo hará el quinto y Fernando Alonso, el undécimo en una jornada que se avecina antológica.
Verstappen y Hamilton se han pasado las últimas carreras centrados en no perder el Mundial, en Abu Dabi solo pueden salir a ganarlo.
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