El Barça reacciona tarde y cae ante el Armani Milán
Los de Jasikevicius recuperan 12 puntos de desventaja en el último cuarto pero pagan su falta de empuje y concentración ante el muro italiano (75-70)
El Barça llegó tarde a su duelo contra el Armani Milán y se quedó corto en su reacción postrera (75-70). Los de Jasikevicius recuperaron 12 puntos de desventaja en un trepidante último cuarto (del 61-49 al 61-63 a falta de cinco minutos), pero finalmente pagaron el esfuerzo de la persecución y permitieron que su rival recobrara la compostura a tiempo para rematar el triunfo. La solvencia de Calathes y el impulso de Davies resultaron insufi...
El Barça llegó tarde a su duelo contra el Armani Milán y se quedó corto en su reacción postrera (75-70). Los de Jasikevicius recuperaron 12 puntos de desventaja en un trepidante último cuarto (del 61-49 al 61-63 a falta de cinco minutos), pero finalmente pagaron el esfuerzo de la persecución y permitieron que su rival recobrara la compostura a tiempo para rematar el triunfo. La solvencia de Calathes y el impulso de Davies resultaron insuficientes en el Mediolanum. En un duelo muy físico, al Barça le faltó empuje y concentración (3 de 16 en triples y 9 de 16 en tiros libres) para derribar el muro italiano. Hall y Sergio Rodríguez lanzaron al Armani, Shields tensó la cuerda, y Datome enderezó a tiempo a su equipo. La reedición de la semifinal de la pasada Final Four era ésta vez el duelo por el liderato de la Euroliga y el desempate cayó del lado milanista. El conjunto de Messina se queda al frente de la clasificación en solitario. El Barça firmó su segunda derrota consecutiva a domicilio.
Los puntos de Hall (ocho en los primeros siete minutos, con dos de dos en triples), los rebotes de Melli y las asistencias de Shields lanzaron de inicio al Armani ante un Barça a contrapié (22-13, m. 8). Jasikevicius pulsó todas las teclas en busca de ritmo y conexiones productivas, pero Calathes apenas encontró respaldo en Kuric y los locales consolidaron su mando con el paso de los minutos. El contundente dominio del Milán bajo los aros (16-7 a esas alturas en la estadística reboteadora) y el manejo de los tiempos de Sergio Rodríguez subrayaron los desajustes culés. Sin embargo, el vigor de Jokubaitis y el carácter de Oriola espabilaron al Barça mediado el segundo cuarto. Aunque la reacción tuvo mucho de trampantojo.
Para entonces, al Armani le había rentado menos su superioridad que al Barça el maquillaje de su inconsistencia. Pero la sístole y diástole del juego siguió gobernada por el conjunto italiano y pronto llegaron los reajustes al marcador. Del 30-27 del minuto 15, tras los primeros puntos de Oriola, al 40-30 poco más tarde con el tercer triple de Hall. Apenas una canasta de Mirotic sobre la bocina del descanso alivió el desasosiego culé en su persecución. Los de Jasikevicius ganaron firmeza sobre la marcha y equilibraron la pelea por el rebote, pero la manta se les quedó corta y solo pudieron anotar seis canastas en el segundo cuarto ante la sólida defensa italiana (42-34, m. 20). Calathes reclamó “más y mejor defensa” a los suyos en el entreacto. Recalcó Jasikevicius la palabra “intensidad” para equilibrar los duelos en un duelo tan físico.
El que mejor mezcló músculo y fibra, contundencia y gracilidad, fue Hall, que inauguró la reanudación con su cuarto triple en cinco intentos. El Barça intento responderle tensando la cuerda y buscando alguna rendija para correr en transición. Pero Messina llamó a su metrónomo y Sergio Rodríguez volvió a destartalar el plan de Jasikevicius. El Chacho se hizo con la brújula, el timón y la batuta, activó a Mitoglou, y levantó a la parroquia del Mediolanum a base de florituras (54-41, m. 26). Durante unos instantes se gustó demasiado el Milán y lo aprovechó Calathes para agarrarse a las cuerdas cuando el Barça estaba grogui. No resultó suficiente, porque Datome devolvió el rigor a los suyos, que entraron en la recta de meta con 12 puntos de ventaja (61-49, m. 30).
Sin embargo, la autocomplacencia milanista coincidió con la rebeldía del Barça y llegó un inopinado parcial de 0-10 que cambió los biorritmos al partido (61-59, m. 33). Al plan de emergencia activado por Jokubaitis se sumaron con fuerza Davies y Smits. Y un triple de Hayes, el segundo del Barça tras una secuencia de 1 de 11, confirmó la resurrección culé. El colapso del Olimpia se prolongó sin que Messina encontrara remedio y el parcial creció hasta el 0-14 (61-63, m. 36). Fue Melli el que destapó el aro después de seis minutos de despropósito del Milán. Llegó la hora de los valientes y, después de mucho remar, el Barça se quedó corto. Un triple de Shields, un tres más uno de Datome desde el rincón de la pista, y una canasta del Chacho ante Mirotic liberaron al Armani entre los escalofríos del Mediolanum. Después de seis triunfos consecutivos, el Barça firmó su segunda derrota consecutiva a domicilio. El Milán se queda como líder en solitario.
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