El Mallorca pesca en Mendizorroza sus primeros tres puntos

De vuelta en Primera División dos años después, el Mallorca presenta su candidatura como un duro rival por la permanencia con cuatro de seis puntos en este arranque de Liga. El conjunto balear consiguió su primera victoria ante el Alavés en Mendizorroza en un encuentro que se rompió por la expulsión de Duarte en la segunda parte. Hasta entonces, todo parecía indicar que el reparto de puntos satisfacía a los dos equipos, sin demasiadas ocasiones y ...

De vuelta en Primera División dos años después, el Mallorca presenta su candidatura como un duro rival por la permanencia con cuatro de seis puntos en este arranque de Liga. El conjunto balear consiguió su primera victoria ante el Alavés en Mendizorroza en un encuentro que se rompió por la expulsión de Duarte en la segunda parte. Hasta entonces, todo parecía indicar que el reparto de puntos satisfacía a los dos equipos, sin demasiadas ocasiones y un juego muy trabado en el centro del campo. Sin embargo, la ventaja numérica despertó la ambición de los de Luis García Plaza.

El protagonista de la victoria fue Fer Niño, cedido por el Villarreal, que marcó el gol de la victoria a diez minutos del final, rindiendo el mejor homenaje a su padre. El delantero de 20 años nació en la isla balear cuando su padre, Fernando Niño Bejarano, jugaba en el club bermellón con el dorsal 26 a la espalda. Con ese mismo número se estrenó saliendo desde el banquillo y su impacto fue inmediato. En la primera pelota que controló, provocó la segunda amarilla para Duarte y, unos minutos después, firmó uno de los mejores goles de su carrera. Salva Sevilla buscó el desmarque del delantero a la espalda de la defensa con un preciso pase en largo que le dejó solo ante Pacheco. El portero se quedó a media salida y Niño no dudó en picar el balón por encima de él a modo de autopase. Laguardia trató de agarrar al delantero para que no rematase la faena, pero el balón ya estaba destinado a entrar y se coló sin necesidad de un segundo remate.

El Alavés no fue superior ni siquiera antes de quedarse con uno menos, sin tener un plan claro de ataque más allá de los balones en largo para que los peleara Joselu. Sus mejores minutos fueron en el arranque del partido, obligando a Reina a sacar un par de buenas manos. Pero, con el paso de los minutos, las subidas de Rioja por la banda y los pases filtrados de Manu García comenzaron a escasear.

La falta de empuje del Alavés animaba al Mallorca a echarse para adelante. Al comienzo de la segunda parte, Abdón Prats estuvo a punto de abrir el marcador con un buen remate entre los dos centrales babazorros, pero el balón se estrelló en el larguero y después en el palo. La superioridad numérica fue el empuje necesario para que se decidieran a ir a por el partido, aunque a punto estuvieron de echarlo todo por tierra. En la jugada siguiente al gol de Fer Niño, se desconectaron en defensa por un momento y, de no ser por el muslo de Battaglia, Guidetti hubiera marcado el empate.

Los cuatro puntos colocan al Mallorca en la zona noble de la tabla, líder momentáneo de LaLiga. El Alavés sigue sin sumar y baja hasta la última posición. Aún falta mucho campeonato pero son de estos partidos de los que se acuerdan los equipos cuando llega el momento de sacar la calculadora.

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