Laporta, en manos de Messi
El presidente del Barça se muestra optimista sobre la renovación del 10, pese a que las pérdidas obligan a que sea a la baja, pero es ambiguo con la continuidad de Koeman
El Barcelona ganó su última Champions en 2015. Messi, Neymar y Luis Suárez mandaban en el campo; Luis Enrique, en el banquillo. Desde entonces, el Barça salta en Europa de la frustración a la humillación. La Roma lo despidió con un 3-0 en 2018, la goleada del Liverpool en 2019 fue memorable (4-0) y ni hablar de la tremenda cachetada del Bayern en 2020: 2-8. La pasada campaña nada cambió: un global de 5-2 ante el PSG en octavos. Y ...
El Barcelona ganó su última Champions en 2015. Messi, Neymar y Luis Suárez mandaban en el campo; Luis Enrique, en el banquillo. Desde entonces, el Barça salta en Europa de la frustración a la humillación. La Roma lo despidió con un 3-0 en 2018, la goleada del Liverpool en 2019 fue memorable (4-0) y ni hablar de la tremenda cachetada del Bayern en 2020: 2-8. La pasada campaña nada cambió: un global de 5-2 ante el PSG en octavos. Y Joan Laporta, en esencia un ganador (o, al menos, así lo considera él), se cansó. “Basta de ciertas actitudes de que no pasa nada si perdemos. Sí que pasa”, dijo este viernes el presidente azulgrana en su primera comparecencia oficial desde que ganó las elecciones en marzo. Tenía ganas de hablar. Fundamentalmente, buscaba pedir calma. Quiere paciencia en el entorno y tiempo en la nueva junta directiva, que necesita saber qué tiene en la caja para después analizar cómo lo distribuye.
Aunque optimista, Laporta no deja de recordar el pasado reciente del Barcelona. “Hemos llegado a media temporada y tenemos que terminar un proyecto que no funcionaba y, al mismo tiempo, crear el nuestro. Un proyecto que dará muchas alegrías al barcelonismo y que dará la vuelta a la situación económica que nos hemos encontrado”, expuso, de entrada. Y, mientras espera por el cierre de cierre la auditoria —”acabará en julio”, aclaró—, las finanzas del Barça son la piedra angular del plan de Laporta, que tiene como principal objetivo renovar a Lionel Messi y lavarle la cara a la plantilla. El presidente, sin embargo, se muestra ambiguo con el futuro de Ronald Koeman.
Reflexión sobre el técnico
Esquiva, a su estilo, con bromas y frases eternas, cuando se le pregunta por Pep Guardiola y por Xavi Hernández, pero en cambio se muestra directo cuando aparece el nombre de Ronald Koeman: “Es un entrenador que nos hemos encontrado y tiene contrato”, aclaró. No escondió, de entrada, su recelo con lo que heredó en el banquillo. Después, reculó: “No descartéis a Koeman. Ronald responde al perfil”. Laporta necesita tiempo. Tiempo para que la presión disminuya, mientras él y su equipo encuentran (si es que pueden) la mejor opción para tomar las riendas del primer equipo. “Con Koeman la relación es muy buena, de respeto y de hablar claro. Se trata de compartir objetivos y criterios. Él quiere continuar y nosotros estamos en un periodo de reflexión para encontrar una situación satisfactoria para todos. Si compartimos todo, claro que puede continuar”, concluyó el presidente.
Pero Laporta no es el único que recela de Koeman en el Barcelona. Aunque la relación con los pesos pesados es buena —”solo habla con ocho jugadores”, se quejan en el vestuario—, la plantilla también duda de la capacidad del neerlandés para solucionar sus problemas en el campo.
Y mientras se debate el futuro de Koeman, el contrato de Messi sigue en el aire. “El nuevo contrato con Leo va bien, pero no está hecho todavía. Desde la presidencia estamos trabajando en una propuesta que dentro de las posibilidades del club pueda agradar al jugador”, contó Laporta. El 10 se marchó el martes a Argentina para disputar los dos primeros partidos de las eliminatorias sudamericanas rumbo a Qatar 2022 (Chile y Colombia) y después participará en la Copa América, que comienza el 12 de junio y finaliza el 11 de julio. En ese momento, el contrato de Messi con el Barça ya habrá expirado. Lo hace el 30 de junio. El padre y representante de rosarino todavía está en Barcelona. Y no es casual.
Cariño presidencial
Jorge Messi, atento a la aparición pública del presidente del Barça, está negociando el nuevo contrato de su hijo. ”Leo pide cariño y sentirse cómodo. Estar a gusto y sonreír, pero para ello debe ganar. Por lo tanto, debe ver que puede ganar. Eso le tiene en un proceso de reflexión, pero está poniendo mucho de su parte. Creo que está valorando mucho el esfuerzo que ha hecho y pienso que le hace mucha ilusión continuar”, contó Laporta, que fue cuidadoso en no aclarar si la oferta del club había sido oficialmente presentada a la familia del rosarino.
Laporta conoce a los Messi. “¿Qué cambió en Messi de cuando envió el burofax [en agosto de 2020 pidió marcharse del club] al momento actual?”, le preguntaron al máximo directivo azulgrana. “Antes había otro presidente y ahora estoy yo. Y eso le gusta. Con el otro presidente quedó decepcionado y ahora tiene a un presidente que lo quiere y se lo dice. Messi quiere que el Barça piense en grande y esto se tiene que demostrar. Quiere éxito contrastado, motivación y exigencia. Conmigo, la tiene. Y por eso nos está ayudando”, sacó pecho Laporta.
Expuso un argumento, en cualquier caso, en el que sí fue claro respecto al futuro de Messi: “No es un tema de dinero, es un tema de proyecto de equipo. Estamos con un moderado optimismo”.
El problema para el Barcelona es que si el futuro del rosarino se tuviese que resolver con billetes, no podría retenerlo. “Tenemos la masa salarial a un 110% de los ingresos previstos. Eso se tendrá que ajustar. Ahora no cumplimos el fair play financiero. Debemos reducir gastos y ampliar ingresos”, expuso Laporta, que reveló que está negociando con Rakuten para renovar su contrato, que busca un acuerdo sobre los derechos del nombre para el estadio y otras fuentes de ingresos que le permiten “ser optimista”. Y detalló la situación económica: “Tenemos 1.200 millones de deuda y 350 millones de pérdidas. Estamos luchando para revertir la situación financiera y estamos seguros de que lo conseguiremos”. Laporta está convencido de que conseguirá dinero, cree que puede renovar a Messi, pero, en cambio, duda con Koeman. Mientras tanto, gana tiempo.
"Le dije a Ceferin que no tengo previsto pedir perdón por pensar”
Joan Laporta llegó el último a la Superliga, pero nunca se fue. En el proyecto liderado por el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, que en un principio contaba con la participación de 12 equipos (seis ingleses, tres italianos y tres españoles), solo quedaron el Real Madrid, el Barcelona y la Juventus. “Cuando llegamos estaba muy avanzado. Había 11 clubes y el Barça. Era un proyecto importante. Nunca le daremos la espalda a movimientos donde estén los grandes del fútbol. Nuestra posición es de diálogo: con la UEFA, con la FIFA, con la federación y con LaLiga. Tengo comunicación con Rubiales, Tebas y recientemente hablé con Ceferin”, dijo ayer Laporta.
Esta semana, la UEFA abrió un expediente al Barça, además de al Madrid y a la Juve, por considerar que pudieron violar el marco legal del organismo rector del fútbol europeo. “Le dije a Ceferin que no tenía previsto pedir perdón por pensar, y que no tenemos intención de pagar una sanción sin justificación. Y si eso pasa, iremos al TAS y seguro que nos dará la razón. El formato de Superliga ya no existe”, reveló el presidente azulgrana.
“Tenemos que hacer una reflexión de cómo ven los jóvenes el fútbol. Lo ven de manera distinta y afecta a la manera de entender el fútbol. Buscan otra cosa distinta de la que buscábamos antes. Pide innovación, cambios”, analizó Laporta. Y no se escondió. “Que los que regulen el fútbol se enroquen... Tenemos contacto con todos los equipos de la Superliga. Pero a algunos no les interesa, como a los clubes-Estado, que hacen una llamada y pueden tener más ingresos. También se han hecho cosas mal por parte de los grandes clubes. Vamos a luchar para defender los intereses del Barça. Y para que el fútbol sea sostenible, con criterios lógicos para desarrollar esta industria. Todos los clubes están con pérdidas y otros agentes se están enriqueciendo. Cuando los que pagamos la fiesta somos nosotros”, dijo.
Puedes seguir a EL PAÍS DEPORTES en Facebook y Twitter, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.