Luis Enrique: “No tengo un once fijo, esta es la idea”
El seleccionador español cree que la clave de la goleada fue que los alemanes no rotaron en los dos partidos anteriores
En cada gol de España, Luis Enrique sorbía un trago de agua y chocaba la mano con sus ayudantes. Durante esta semana no había cesado de insistir en que la idea funcionaba, que el juego estaba por encima de los resultados. Ni siquiera parecía inquietarle la falta de gol. A la rueda de prensa, el seleccionador se presentó exultante. Más por el espaldarazo que supone para el grupo, con muchos jugadores faltos de vuelo internacional, que por él mismo. “Alemania ha sacado a su mejor once, salvo la baja de Kimmich. Nosotros hemos metido seis jugadores nuevos. En defensa, hemos presionado muy bien, l...
En cada gol de España, Luis Enrique sorbía un trago de agua y chocaba la mano con sus ayudantes. Durante esta semana no había cesado de insistir en que la idea funcionaba, que el juego estaba por encima de los resultados. Ni siquiera parecía inquietarle la falta de gol. A la rueda de prensa, el seleccionador se presentó exultante. Más por el espaldarazo que supone para el grupo, con muchos jugadores faltos de vuelo internacional, que por él mismo. “Alemania ha sacado a su mejor once, salvo la baja de Kimmich. Nosotros hemos metido seis jugadores nuevos. En defensa, hemos presionado muy bien, les hemos obligado a jugar en largo, que a ellos no les gusta demasiado. Y en ataque, en la elaboración, hemos estado perfectos. El triunfo nos viene en el mejor momento porque cuando eres mejor que el rival y no se traduce en el resultado pueden empezar las dudas. Nos viene bien que los jugadores se lleven ese refuerzo”, explicó el seleccionador. La goleada tuvo cotas históricas. Desde 1958, Alemania no encajaba tres goles en el primer tiempo. La avalancha española sobre la portería de Neuer, que con 96 partidos bajo palos superó a Sepp Maier como el portero alemán con más internacionalidades, registró 21 ocasiones de gol.
Para esa tormenta perfecta que desató España sobre el área alemana, Luis Enrique hizo hincapié en la frescura de piernas. Fue una manera de reivindicar sus numerosas rotaciones. “Creo que una de las claves es que ellos, salvo Kroos, repitieron el mismo once. Nosotros no, yo no tengo un once fijo”, advirtió el técnico asturiano. “No destaco a un jugador, a los once, a los cinco cambios, a los 26 que han estado en esta convocatoria. Esta es la idea, personalizar sería injusto. Para poder presionar y poder minimizar a un equipo como Alemania necesitas de todos en ataque y en defensa. Con la defensa hemos conseguido que no aparecieran sus jugadores de ataque. Con nuestro juego ofensivo logramos que sufrieran y que corrieran. No ha cambiado nada y esa es otra cosa que me hace sentir orgulloso, no especulamos, seguimos con nuestra línea independientemente de que salga mejor o peor. En esta fase de grupos, nunca he sentido que fuéramos inferiores en alguno de los partidos”.
Sobre la explosión goleadora de un equipo que se había mostrado chato en los últimos partidos, el técnico español dijo: “Los delanteros tienen muchísima calidad. Creíamos que íbamos a llegar al gol de manera elaborada, con muchas llegadas. Ojalá tuviéramos un jugador que hace muchos goles. Nuestro objetivo, es llevar los partidos a las facetas en las que somos mejores que los rivales, pero ni antes éramos tan malos, ni ahora tan buenos”.
Si Luis Enrique no pasó factura por las críticas recibidas estos días, sí lo hizo Morata. El delantero de la Juventus abrió el marcador con un cabezazo en el segundo palo. Su contribución al juego del equipo también fue decisiva cuando recibió de espaldas para atraer a los centrales y abrir el juego a las bandas. “Tenemos que hacer nuestro trabajo. El otro día contra Suiza lo hicimos. Tuvimos los penaltis, un buen juego... Me gustaría ver qué dice ahora la gente. Ante una selección campeona de Europa, del mundo, dirán que no estaba a su nivel. No se nos puede poner ningún pero. Tengo ganas de llegar a casa y ver qué dicen de nosotros”, dijo con rabia el delantero de la Juventus, que suma 18 goles en 35 encuentros con la selección, en la que llevaba casi un año sin anotar.
“Esto es lo que tiene el fútbol. Desde dentro reclamamos paciencia con el grupo, las cosas se están haciendo bien. Nosotros somos los únicos que vivimos día a día. Hoy hemos visto al equipo en plenitud. Esta es España, un equipo que puede ganar 6-0 a Alemania”, relató orgulloso Rodrigo Hernández, que logró su primer tanto como internacional: “Trabajamos mucho la estrategia”. Frente a la euforia española, el seleccionador alemán Joachim Löw era un hombre apocado que aún digería la paliza: “No hemos ganado un solo duelo individual, no hemos estado organizados. Estuvimos mal en todo desde el inicio. Hemos hecho muchas cosas mal”.
Kroos: “España nos dio una lección en todo”
″España nos dio una lección en todo", resumió sin remilgos Toni Kroos tras salir apabullado de La Cartuja. “Probablemente no sea la derrota más amarga de mi carrera, pero sí una de las más grandes. Me dolió. No conseguimos controlarlos en ningún momento. España nos dio una lección de cómo atacar”, explicó el centrocampista alemán del Real Madrid. “El problema no fue la táctica. No nos salió ni lo que preparamos para la primera parte ni lo que preparamos para la segunda. Fue una lección de España jugando con y sin la pelota. No logramos entrar en el partido”, completó Kroos. España abrumó a Alemania en juego, goles y posesión (70% a 30%) y le infligió su mayor derrota en un partido oficial. Kroos fue el centrocampista alemán que más pases dio (43), todos acertados y todos intrascendentes, perdidos en la marabunta que lideraron Rodri, Koke y Fabián.