Abelardo acepta el reto del Espanyol

El asturiano, que superó situaciones críticas con el Sporting y el Alavés, es el tercer técnico del colista en esta temporada

Barcelona -
Abelardo, en 2018 como técnico del Alavés.L. Rico

Aunque el área deportiva del Espanyol flirteó con varios técnicos, como Juan Antonio Pizzi, uno de los preferidos del director deportivo Rufete, o Luis García, apuesta que recordaba al ascenso de Pochettino en 2009 por su inexperiencia en la élite pero también por su total identidad con la casa, al final el escogido ha sido Abelardo, que firma hasta el final de temporada sin opción, de momento, a una extensión del contrato.

Hubo más candidatos, pues también...

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Aunque el área deportiva del Espanyol flirteó con varios técnicos, como Juan Antonio Pizzi, uno de los preferidos del director deportivo Rufete, o Luis García, apuesta que recordaba al ascenso de Pochettino en 2009 por su inexperiencia en la élite pero también por su total identidad con la casa, al final el escogido ha sido Abelardo, que firma hasta el final de temporada sin opción, de momento, a una extensión del contrato.

Hubo más candidatos, pues también se abrieron negociaciones con Francisco Rodríguez y hasta se consultó con Sampaoli y se soñó con Pochettino. Pero fue Abelardo el que más convenció y será el tercer técnico blanquiazul de este ejercicio tras las intentonas fallidas de David Gallego y Pablo Machín. Todo un enredo porque desde la temporada 2008-2009 el Espanyol no recurría a tres técnicos para evitar la hecatombe. Aquella temporada fue iniciada por Tintín Márquez, mal corregida por Mané y finalmente salvada por Pochettino.

Situación repetida en esta campaña y coyuntura que ha descolocado a la afición, que ya se había olvidado de los disgustos en los últimos años —hace 25 temporadas que se mantiene en Primera—, y que de paso ha desequilibrado a la entidad porque Óscar Perarnau pasó de director general deportivo a secretario técnico al tiempo que se despidió al director general corporativo, Roger Guasch, por discrepancias con el área deportiva. El descalabro ha dejado al equipo colista en LaLiga con solo 10 puntos, a cinco del Mallorca —último en salvarse de la quema—, pero a nueve de los siguientes (Eibar y Leganés). El Espanyol, en cualquier caso, entiende que Abelardo es un entrenador con callo en estas situaciones, por más que tampoco tenga demasiada experiencia en Primera División.

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Aunque con el Sporting, en el curso 2015-16, logró la salvación en la última jornada con un equipo de lo más modesto; y con el Alavés fue capaz de obrar el milagro al asumir el equipo en la jornada 14 con nueve puntos y lo salvó de forma holgada, pues encadenó seis triunfos y un empate en Mendizorroza que valió quedarse de pie en la categoría. Justo con lo que sueña el Espanyol.

El área deportiva, tras abrir y consultar varias vías, se decidió el miércoles por Abelardo. “Eres tú”, le confirmaron al técnico, que pidió un poco de tiempo para pensar. Pero apenas tardó un día en dar el sí cuando no hace tanto descartó al Leganés y al Celta antes de que firmaran a Javier Aguirre y Óscar García. “El proyecto le atrae porque es un gran club, con una gran historia, y porque sabe perfectamente qué significa el Espanyol en Barcelona. Además, tiene residencia habitual en la ciudad”, cuentan desde el entorno del entrenador. El club, además, le ha garantizado al menos tres fichajes —se priorizan a dos delanteros y suenan Raúl de Tomás (Benfica) y Hulk (Shanghái SIPG, donde el presidente Yansheng tiene hilos porque desde allí vino el extremo Wu Lei); y se aguarda también a un medio y quizá un central—, un sueldo generoso hasta el final del curso (algo menos de un millón) y una prima por la salvación que rondará el medio millón de euros. Dinero que sí puede gastar el Espanyol porque la regulación económica contempla que en el entrenador se puede superar el límite salarial, siempre y cuando se descuente en el próximo ejercicio. “No se habló de más años porque lo importante ahora es salvar al equipo. No había que desgastarse en negociar un contrato que igual no se da”, señalan desde la entidad blanquiazul; “y si consigue que nos quedemos en Primera, seguro que todos queremos prolongar el acuerdo”. Una fórmula que ya utilizó en el Alavés y que acabó por fructificar.

Su segundo y un analista

Con pasado azulgrana, pues jugó en el Barcelona de 1994 a 2002 como central para levantar dos Ligas, dos Copas del Rey y una Recopa, Abelardo no está preocupado por la reacción de la afición, consciente de que lo que necesita el RCDE Stadium son alegrías, un equipo competitivo y victorias. Para ello, ha decidido traerse junto a él a su segundo habitual (Iñaki Tejada) y a Tomás Hervás, analista que hasta la fecha estaba en la secretaría técnica del Sporting. “A nadie más porque considera que hay gente válida en el club”, puntualizan desde las oficinas blanquiazules.

Es la apuesta periquita, el tercer técnico que ocupa el banquillo en la temporada tras el inicio caótico de David Gallego —los jugadores no sabían ni entendían qué les pedía el entrenador para hacer cinco puntos en ocho encuentros— y la chapuza de Pablo Machín, empecinado en jugar con tres centrales en un equipo que necesita urgentemente el gol, castigado en la tabla con otros cinco puntos en diez partidos más que supusieron la peor marca histórica de un entrenador en el banquillo del Espanyol.

Abelardo —se supone que regresará al 4-4-2— será presentado el lunes, momento en el que el equipo regresará a los entrenamientos —ganan un día de asueto porque con Machín volvían el 29— para recuperar el terreno perdido en la competición liguera, también para batalla en la Liga Europa, ahora en dieciseisavos de final frente al Wolverhampton.

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