Godín, el cacique de la portería a cero

El defensa del Atlétic lidera la defensa de Uruguay, la única selección que no ha encajado goles

Godín,en el suelo, durante el Uruguay-Rusia celebrado en Samara.EMMANUEL DUNAND (AFP)

La transmisión de la mística de la camiseta de Uruguay a los debutantes es una vieja tradición que se ha propagado durante años con el boca a boca y con gestos simbólicos. Tras el Maracanazo, la derrota de Brasil en la final del Mundial de 1950 que Uruguay convirtió en la victoria más eterna de la historia del fútbol, se impuso la costumbre de entregarle a los novatos la prenda doblada con mucha delicadeza. Mientras el ritual se celebraba como si fuera la entrega de una reliquia única, el jugador que estaba a punto de recibir su b...

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La transmisión de la mística de la camiseta de Uruguay a los debutantes es una vieja tradición que se ha propagado durante años con el boca a boca y con gestos simbólicos. Tras el Maracanazo, la derrota de Brasil en la final del Mundial de 1950 que Uruguay convirtió en la victoria más eterna de la historia del fútbol, se impuso la costumbre de entregarle a los novatos la prenda doblada con mucha delicadeza. Mientras el ritual se celebraba como si fuera la entrega de una reliquia única, el jugador que estaba a punto de recibir su bautismo como internacional escuchaba de boca de un veterano o de los utileros las leyendas sobre los héroes del Mundial de 1930 (Nazassi, Petrone, Cea, Scarone) o los del 50 (Obdulio Varela, Míguez, Schiaffino, Gigghia...).

Diego Godín, el actual capitán de Uruguay, escuchó cientos de veces esas historias que inmortalizaron la garra charrúa, pero nada le hizo comprender tanto la dimensión de la camiseta celeste como una advertencia que recibió en su estreno en un amistoso contra México en 2005. Al término del partido, ya en el vestuario, colgó mal la camiseta y esta se precipitó al piso. “¡Nene, la celeste por el suelo nunca!”, le espetaron algunos de los entonces referentes del vestuario como Diego Lugano y Pablo García. Godín es ahora el guardián de todas la mística de su selección, y de dichos como el de “a Uruguay nunca le sobra nada”.

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Durante este Mundial, parte de su liderazgo ha estado enfocado a consolidar la solidez defensiva de Uruguay, única selección que no ha encajado un gol en lo que va de competición. En el vestuario o en los pasillos, una frase que es lema de cabecera del Atlético de Simeone no para de salir de su boca: “Portería a cero, portería a cero”, repite Godín con insistencia. “La solidez defensiva es una de las virtudes y principales características que tenemos como equipo; hacernos fuertes desde la parte defensiva, que no es sólo la línea de cuatro defensores y Fernando. Es un trabajo que empieza por delanteros y volantes. Todo el equipo hace un desgaste tremendo en esa faceta”, admite el central rojiblanco.

Cambio de estilo

“Durante los partidos siempre nos está dando indicaciones, tanto a los defensas como a los centrocampistas, sobre cómo colocarnos. No para de hablarnos dentro y fuera del campo e insiste mucho en que no debemos encajar gol. Lo de portería a cero es una frase fundamental para nosotros”, asegura Vecino, uno de los jóvenes volantes que encarnan el cambio de estilo ofensivo que el seleccionador Tabárez está tratando de combinar con la solidez defensiva. No hay una jugada de estrategia en la que Godín suba a rematar sin que antes haya comprobado que las marcas de los que se quedan a defender están bien situadas. Hoy le tocará un duelo que ya es clásico de la Liga española. Le espera Cristiano Ronaldo, que amenaza ese “portería a cero”.

Tabárez, no quiere convertir la batalla en un duelo individual: “No va a marcarle solo Godín, tiene que ser algo colectivo para limitar en todo lo posible sus acciones”, dijo ayer.

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