La eterna frustración de México

La selección tricolor busca exprimir a una buena generación de jugadores para superar la barrera de los cuartos de final en Rusia

La selección de México en el estadio de Luzhniki.ZURAB KURTSIKIDZE (EFE)

Ya no resulta extraño escuchar hablar en castellano por el centro de Moscú. La capital rusa está invadida por argentinos, peruanos y muchos mexicanos. Y cuando el centro de entrenamiento de Novogorsk, casa del Dinamo de Moscú hoy de la selección de Juan Carlos Osorio, abre sus puertas, el estadio principal revienta. “Ay, ay, ay, ay, canta y no llores, porque cantando se alegran cielito lindo los corazones”, suena en la tribuna. El hit de siempre, la ilusión de siempre, de la hinchada de la tricolor. Sin embargo, cada vez que comienza a girar el balón, México se frustra en los mundiales.
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Ya no resulta extraño escuchar hablar en castellano por el centro de Moscú. La capital rusa está invadida por argentinos, peruanos y muchos mexicanos. Y cuando el centro de entrenamiento de Novogorsk, casa del Dinamo de Moscú hoy de la selección de Juan Carlos Osorio, abre sus puertas, el estadio principal revienta. “Ay, ay, ay, ay, canta y no llores, porque cantando se alegran cielito lindo los corazones”, suena en la tribuna. El hit de siempre, la ilusión de siempre, de la hinchada de la tricolor. Sin embargo, cada vez que comienza a girar el balón, México se frustra en los mundiales.

“La expectativa que se genera alrededor de México siempre es superior a la realidad. Para nosotros, un país necesitado de una alegría, un mundial es un evento en el que depositar toda nuestra ilusión. Y el técnico de la selección no puede frenar eso”, apunta Javier Aguirre, entrenador de México en Corea y Japón 2002 y Sudáfrica 2010. “Llevamos mucho tiempo preparándonos y estamos convencidos de nuestras posibilidades”, suma Memo Ochoa, el portero del equipo de Juan Carlos Osorio.

“A México le cuesta mucho pasar de ese cuarto partido ¿Por qué no soñar?”, completa Marc Crosas, excompañero de Messi en el Barcelona, hoy radicado en México suma 16 participaciones en mundiales, solo por detrás de las grandes: Brasil (20), Alemania (19), Italia (19) y Argentina (17). “Siempre pensamos que en el próximo mundial nos toca pasar los cuartos de final y siempre nos quedamos ahí”, apunta Aguirre. México solo ha llegado al quinto partido en una Copa del Mundo siempre que jugó en su casa: en 1970 y en 1986. Y ya acumula seis mundiales consecutivos en los que ha caído en los octavos de final.

Hoy México renueva la ilusión contra la defensora del título. “A México le cuesta mucho pasar de ese cuarto partido ¿Por qué no soñar? Hay mucho talento individual. La mayoría de los jugadores ha hecho una temporada espectacular en Europa”, vuelve Crosas. “Nunca nos había pasado. Hoy tenemos a 12 jugadores compitiendo en Europa. Esta generación que ha sido campeona del mundo sub-17 y Oro Olímpico ha demostrado que puede conseguir grandes cosas”, remata Aguirre. México desafía a su eterna frustración en Rusia.

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