Adrián Grant: “Los impuestos son pura ideología”
Debuta en la novela con un 'thriller' fiscal, 'Nada ilegal, nada inmoral', en el que vuelca su experiencia como asesor tributario internacional
Adrián Grant (Madrid, 1988) combina dos ocupaciones aparentemente opuestas: la fiscalidad internacional y la escritura de novelas. Vive entre Ámsterdam y Luxemburgo y acaba de publicar su primer libro, Nada ilegal, nada inmoral (Caballo de Troya).
¿Cómo llega un asesor fiscal a escribir una novela? Levantándose pronto para escribir y creando una rutina de oficina antes de ir a la oficina.
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Adrián Grant (Madrid, 1988) combina dos ocupaciones aparentemente opuestas: la fiscalidad internacional y la escritura de novelas. Vive entre Ámsterdam y Luxemburgo y acaba de publicar su primer libro, Nada ilegal, nada inmoral (Caballo de Troya).
¿Cómo llega un asesor fiscal a escribir una novela? Levantándose pronto para escribir y creando una rutina de oficina antes de ir a la oficina.
El libro, de hecho, se basa en su experiencia en ese campo y es una especie de thriller fiscal. ¿Es más trepidante de lo que parece ese mundo de impuestos y números? Sin duda: los impuestos son pura ideología y las intrigas financieras pueden llegar a ser fascinantes. Pero claro, qué va a decir un fiscalista.
Los protagonistas son unos jóvenes españoles emigrados en Luxemburgo por la crisis económica. ¿Es la marca de su generación? Ya van varias generaciones de españoles emigrados por algún tipo de crisis, pero por alguna razón nos creemos muy especiales: esta es nuestra marca.
¿La pandemia será aún peor que la crisis para los jóvenes? De una crisis o de un mal Gobierno se puede escapar, pero no de una pandemia global. Como en este caso además se van a juntar las tres cosas, probablemente será peor.
¿Qué libro le ha gustado más últimamente? Torquemada en el purgatorio, de Galdós. Claro, va de dinero.
¿Y uno que le marcara? En la orilla, de Rafael Chirbes.
¿Qué libro ajeno le habría gustado firmar? Por pedir, si algún día fuese capaz de escribir algo tan perfecto como El reino de este mundo, de Alejo Carpentier, podría morirme contento. Pero elijo Harry Potter, porque entonces sería millonario.
¿Uno que no pudiera terminar? Los reconocimientos, de William Gaddis. Seguiré intentándolo.
¿Qué película ha visto más veces en su vida? Probablemente, Parque Jurásico o la trilogía de Agárralo como puedas.
¿Qué canción o tema musical elegiría como autorretrato? Rhododendrons, de Bloc Party.
¿Qué está socialmente sobrevalorado? Ser de izquierdas.
¿A quién le daría el Premio Nacional de Literatura? A Carles Puigdemont: su nuevo libro promete un sinfín de delirantes fantasías y españolísimos esperpentos.