Reforma integral en TVE

Las instalaciones de Torrespaña, popularmente conocidas como El Pirulí, se construyeron para dar cobertura al Mundial de Fútbol de 1982. El ente público invirtió en el complejo situado al borde de la M-30 madrileña 17.500 millones de pesetas (más de 100 millones de euros) y TVE pasó a formar parte del club de los operadores públicos europeos más avanzado tecnológicamente. Tres décadas después, llega el turno de modernizar unos equipos que con el paso del tiempo han quedado obsoletos. TVE quiere dar un lavado de la cara a Torrespaña y también a los añejos edificios de Prado del Rey y de algunos...

Las instalaciones de Torrespaña, popularmente conocidas como El Pirulí, se construyeron para dar cobertura al Mundial de Fútbol de 1982. El ente público invirtió en el complejo situado al borde de la M-30 madrileña 17.500 millones de pesetas (más de 100 millones de euros) y TVE pasó a formar parte del club de los operadores públicos europeos más avanzado tecnológicamente. Tres décadas después, llega el turno de modernizar unos equipos que con el paso del tiempo han quedado obsoletos. TVE quiere dar un lavado de la cara a Torrespaña y también a los añejos edificios de Prado del Rey y de algunos centros territoriales. Una puesta a punto que el próximo año supondrá una inversión de 56,8 millones de euros.

Si en su día Torrespaña fue la obra más costosa efectuada por la televisión estatal en toda su historia, ahora es el momento de acondicionar la sede de los Servicios Informativos y adaptarla a la era digital. TVE afronta una reforma integral para ponerse a la altura de las cadenas privadas. En algunos aspectos, como la emisión de los telediarios en formato panorámico, ha ido muy retrasada. Con las inversiones previstas se pretende profundizar en la digitalización de los contenidos y desarrollar nuevas prestaciones “que aumenten la calidad percibida por el espectador”, según la explica la corporación.

En Torrespaña, los trabajos irán destinados a adaptar los estudios A1, A2 y A3 al formato de alta definición, un sistema que ofrece imágenes más nítidas y mejor calidad de sonido. TVE dará así una segunda vida  a los equipos de los Estudios Buñuel, —un inmueble vendido a la promotora Pryconsa por 35,2 millones de euros—, que serán desmontados. En este escenario se han producido recientemente grandes programas de entretenimiento como el concurso culinario Master Chef.

De la misma manera que las instalaciones de Torrespaña se crearon para dar cobertura a un evento deportivo, ahora la redacción digital facilitará la retransmisión de los Juegos Olímpicos de Río-2016. TVE tiene los derechos de esta cita deportiva, aunque quizá sea la última vez que la televisión pública emita un acontecimiento de tal calibre. Discovery y Eurosport se han adjudicado los derechos audiovisuales para Europa de los Juegos durante el periodo 2018-2024, valorados en 1.300 millones. El paquete abarca todas las plataformas (televisión en abierto, de pago, Internet y móvil). Discovery puede optar entre emitir los Juegos a través de sus propios canales (en España tiene alquilada una frecuencia de TDT) o trocear los derechos y revenderlos a otros operadores.

Juegos Olímpicos

El equipamiento tecnológico para cubrir los Juegos de Río supera los dos millones de euros. Pero el grueso de las inversiones en infraestructuras irá a parar a Prado del Rey, donde se harán obras en los estudios 1, 2, 3 y 5 por casi ocho millones. Otros tres se destinarán a la primera fase de la construcción de los platós 6 y 7. La televisión pública se propone derruir y volver a levantar los estudios de color (el 10 y el 11), afectados por amianto. Pero esta solución no concita consenso. Tanto algunos sindicatos como miembros del Consejo de Administración apuestan por descontaminarlos. “Sería mucho menos costoso desamiantar y reutilizar los platós 10 y 11 que derribarlos y construir unos nuevos”, afirma el consejero socialista Miguel Ángel Sacaluga.

También la radio pública se beneficiará del plan de inversiones con una dotación de cuatro millones que serán destinados a renovar los transmisores de frecuencia modulada y onda media y a comprar unidades móviles más modernas.