La izquierda chilena trata de entender su derrota frente a José Antonio Kast
La exministra del Trabajo de Boric, Jeannette Jara, obtuvo un 41,% en la elección presidencial, un 16% menos que el abanderado de las derechas. El 17 de enero, los partidos del oficialismo tendrán su primer cónclave
El amplio triunfo este domingo del republicano José Antonio Kast, el candidato de las derechas que se ha quedado con La Moneda al obtener un 58% en el desempate, no fue una sorpresa para las izquierdas chilenas. Quienes ven el vaso medio lleno destacan que la abanderada, la comunista Jeannette Jara, quien tuvo el respaldo de nueve partidos, subiera del 26,8% que logró en la primera vuelta del 16 de noviembre, al 41,8%. Pero, aun así, la distancia con Kast fue del 16%, por lo que ha sido la peor derrota del sector desde 1990, cuando retornó la democracia.
Kast, a su vez, desde que hace tres años se repuso el voto obligatorio, se conviritó en el mandatario con más respaldo en la historia de Chile, con más de 7,2 millones de votos frente a los 5,2 millones de Jara, en la primera elección presidencial que se realiza con estas reglas.
Ahora la izquierda ha empezado un periodo de reflexión para entender las razones de sus resultados frente a Kast. El senador comunista y quien fue jefe estrátegico de la campaña de Jara, Daniel Núñez, admitió este lunes que el resultado de la candidata fue “digno” y que “lo peor era haber bajado del 40%. En algún minuto corrimos ese riesgo en la segunda vuelta, y hay que destacar que llegamos a más de 5,2 millones de votos", señaló a ADN Radio.
“Yo no creo que Chile se haya convertido en un país ideológicamente de derecha. Lo que ganó fue la habilidad que tuvo el candidato de la ultraderecha de instalar esta idea de actuar con emergencia frente a los problemas de seguridad ciudadana, asociados a la migración irregular y a la delincuencia. Ese mensaje fue el que primó”, agregó.
Este lunes, las formaciones políticas que apoyaron a la candidata de la izquierda sostuvieron una reunión con el presidente Gabriel Boric, con el comité político, en las primeras conversaciones tras la elección de Kast, quien asumirá en La Moneda el 11 de marzo de 2026.
Participó la presidenta del Partido Socialista (PS), Paulina Vodanovic, quien fue jefa de campaña de Jara para la segunda vuelta. Por la tarde, la senadora ha dicho a T13 Radio que deben hacer un mea culpa porque “es parte del desenlace”. “No tiene que ver con las cualidades o actitudes de la candidata. Esta derrota no es la derrota de Jeannette Jara, sino la del progresismo y de todo nuestro sector político y lo asumimos en forma colectiva también”.
Tras los resultados, Vodanodic dijo que hay varios factores que analizar. “Lo fácil puede ser decir que en Chile hace cinco elecciones que hay alternancia, o que la ola de ultraderecha que hay en el mundo y que ha llegado a Latinoamérica con Milei, nos llegó a nosotros. Eso es lo fácil”. Pero, agregó. “hay que escarbar un poquito más e ir más atrás, en las causas inmediatas, pero también las mediatas; en lo que ocurrió post estallido social e, incluso antes”. Y recordó que como conglomerado de la centroizquierda no fueron “capaces de defender la obra” de sus Gobiernos, “particularmente de los llamados 30 años”. “Finalmente, dejamos que se instalara una verdad que invisibilizó avances importantes de nuestro país”, señaló.
Tras el estallido social, la izquierda propuso un proyecto constitucional que resultó un fiasco y se rechazó por el 62%. En la esperanza de que se aprobara ese texto, el Gobierno de Gabriel Boric, del que Jara fue su ministra del Trabajo, había puesto sus expectativas para impulsar sus principales reformas. Pero cuando una mayoría de la ciudadanía lo impugnó, tuvo que hacer un cambio de Gabinete y girar hacia la centroizquierda.
El futuro de Jara y la oposición
En el discurso que dio la noche del domingo, luego de conocer los resultados, Jara hizo un llamado a la unidad de las izquierdas y adelantó que esperaba que fueran una oposición “propositiva y exigente para avanzar en la vida de nuestro pueblo” y que, al mismo tiempo, “sea firme” para “proteger lo logrado”. “No habrá dudas, consistentemente, con los valores democráticos. Nuestro quehacer se canalizará siempre por las vías institucionales, condenando cualquier tipo de violencia, venga de donde venga”, agregó.
Jara también destacó que “el camino de la unidad es el único que vale la pena. Construimos una alianza amplia e histórica. Tenemos una alianza política, social y cultural que debemos cuidar, consolidar y hacer crecer”, dijo. Pese a sus palabras, el día después de la elección solo se han abierto preguntas, entre ellas, si la ahora excandidata seguirá en el PC, donde ha militado 37 de sus 51 años. Durante la campaña varias veces la cúpula de su partido la complicó, al punto que ella anunció, mientras buscaba los votos de centro para ampliar su electorado que, de llegar a La Moneda, iba a renunciar o al menos congelar su adhesión.
Otra de las interrogantes que se ha abierto es si esa alianza “amplia e histórica” de la que habló Jara el domingo seguirá o se difuminará, pues solo se armó luego que la exministra del Trabajo ganara las elecciones primarias del sector, a finales de junio, frente a la socialdemócrata, Carolina Tohá, exministra del Interior.
En los análisis y recriminaciones también está sobre la mesa la gestión de Boric. Si bien el mandatario tiene un apoyo del 30%, también su rechazo promedia el 62%. Jara, en su intento para posicionarse como una abanderada de la centroizquierda, intentó desmarcarse tanto del PC como del Gobierno. Pero Kast, hábilmente, durante la campaña siempre la tildó como “la candidata de la continuidad”.
Constanza Martínez, presidenta del Frente Amplio, el partido del presidente, ha dicho que en la derrota “no hay una causal. Nosotros estamos muy conformes y contentos con el trabajo que se ha desarrollado. Entregamos un país mejor que el que encontramos”.
Pero el presidente del PPD, de la centroziquierda, Jaime Quintana, ha dicho que, en los resultados “el Gobierno tuvo alguna responsabilidad, desde luego”. Y señaló que como oficialismo no lograron “comunicar bien lo que se hizo en materia de seguridad, que es mucho, unas 70 leyes”.
La Moneda, a través de su portavoz Camila Vallejo, también se pronunció. “La alternancia política en Chile, en los últimos cinco procesos electorales, ha sido la regla”. Y recordó que en esta Administración se creó el ministerio de Seguridad Pública -la delincuencia es la principal preocupación del país- y que se reforzaron las fronteras. “Logramos, por primera vez en mucho tiempo, bajar la tasa de homicidios, aunque no hemos logrado llegar a los niveles de hace 10 años. Esas son cosas que, probablemente, pesan”, señaló.
El próximo 17 de enero, los partidos del oficialismo realizarán un cónclave con las dirigencias, los parlamentarios, los alcaldes y gobernadores, no solo para analizar el resultado de las elecciones, sino también para ver cómo proyectarse en el futuro. Según la presidenta del PS, Paulina Vodanovic, es necesaria una reflexión: “Tenemos una obligación y un compromiso con más de cinco millones de personas que votaron por Jeannette Jara y que creen en un proyecto del progresismo. Nuestro deber es seguir trabajando y volver a constituirnos en una mayoría en el futuro”.