"Está bien que en las películas de terror haya sangre”

Es una estrella del terror, pero viste como un gentleman. Bruce Campbell (Michingan, 1958) ha dejado en casa el brazo/motosierra con el que interpreta a Ash Williams, el protagonista de la serie de culto 'Evil Dead', para recoger el premio Máquina del Tiempo del Festival de Cine Fantástico de Sitges. El actor, director y productor bromea con los periodistas, amaga puñetazos para dar sustos y sonríe con dientes...

Es una estrella del terror, pero viste como un gentleman. Bruce Campbell (Michingan, 1958) ha dejado en casa el brazo/motosierra con el que interpreta a Ash Williams, el protagonista de la serie de culto 'Evil Dead', para recoger el premio Máquina del Tiempo del Festival de Cine Fantástico de Sitges. El actor, director y productor bromea con los periodistas, amaga puñetazos para dar sustos y sonríe con dientes blanquecinos. Admite que teme a “las malas preguntas” y que no echa de menos su aterrador brazo mecánico para enfrentarse a una horda de humanos poseídos que pretenden destruir la humanidad. “Es muy incómodo trabajar con él, pero son cosas del guion”, dice Campbell, quien revela su secreto para ser un buen actor: “Lo más importante es llegar a tiempo y estar sobrio”. Además de 'Evil Dead', Campbell ha participado en cintas de éxito como ‘Crimewave’ (1985), ‘Maniac Cop’ (1988), ‘Darkman’ (1990), ‘Bubba Ho-Tep’ (2002) y ‘Cars 2’ (2011).

Pregunta. ¿Cómo es tener una sierra mecánica por brazo?

Respuesta. Pues la verdad que muy incómodo. Es complicado trabajar con cables y hierros en el brazo. Procuro llevarla el menor tiempo posible, pero son cosas del guion y me he tenido que acostumbrar.

P. ¿Qué es lo fundamental para ser actor?

R. Levantarse pronto por la mañana, llegar a tiempo y no estar borracho.

P. En una entrevista admitió haber fumado marihuana para interpretar una escena en la película Evil Dead (1983) ¿Ha repetido la experiencia?

R. Lo hice porque la escena lo requería. También porque Jack Nicholson ya lo había hecho en Easy Rider (1969), y me dije a mí mismo que yo también sería capaz de hacerlo. Pero resultó ser un auténtico fracaso… Ees muy difícil trabajar bajo los efectos de las drogas. Hay que estar muy concentrado. Aunque cuando acabo de rodar sí fumo marihuana, ayuda a relajarme.

P. Cómo ve la industria del cine de terror actual?

R. Necesitamos películas de terror con suspense, que conmuevan. Me gustaría que volvieran a hacer películas que den verdadero miedo y no de terror con tortura. Para dar miedo no es imprescindible que haya sangre, aunque la sangre en las películas está bien, y eso que es pegajosa.

P. ¿Hay algún director en especial que haya sido capaz de volver a hacer este cine de terror?

R. Fedérico Alvárez. Acaba de rodar Don’t Breathe, un thriller de terror buenísimo. Es un director que dará mucho que hablar. Pronto veremos muchas películas suyas en pantalla.

P. ¿Qué película de terror le ha conmovido más?

R. El inquilino, de Roman Polanksi. Por momentos te hace pensar que te has vuelto loco. En esta película Polanski consiguió manipular mis pensamientos. Me trastornó durante varias semanas. Esto es el verdadero terror, el éxito.

P. ¿Cómo es trabajar con Sam Raimi?

R. Un placer, Sam Raimi es un director brillante. El mejor con el que he trabajado. Aunque trabajar con directores tan buenos puede llegar a ser frustrante, Sam Raimi tiene esa capacidad para que todo el mundo trabaje mucho y bien.

P. ¿Un buen director tiene que luchar siempre con la frustración?

R. La mayoría de directores buenos están frustrados. Y esa frustración la transmiten a los actores, que aprendemos a tolelarla. Un buen director es el capaz de manipular al espectador, de sorprenderlo, de engañarlo.