Imagina un Madrid en bicicleta

El ‘Festibal con B de bici’ celebra su sexta edición en Matadero Madrid: música, exhibiciones y gastronomía por una ciudad más sostenible

Mercado de bicicletas del ‘Festibal con B de bici’. Eduardo B. Muñoz

Lo inimaginable. Lo impensable. Casi, lo imposible. Ese es el concepto que subyace en la sexta edición del Festibal con B de bici, que se celebra el sábado 6 de junio en Matadero Madrid (de 11.00 a 21.00). La cita, gratuita, reivindica la cultura ciclista a golpe de conciertos, paseos y debates con pedales.

La presente edición tiene como subtítulo Lo inimaginable: “Aún resuena en nuestros oídos esa frase tan negativa y rotunda que ahogaba cualquier...

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Lo inimaginable. Lo impensable. Casi, lo imposible. Ese es el concepto que subyace en la sexta edición del Festibal con B de bici, que se celebra el sábado 6 de junio en Matadero Madrid (de 11.00 a 21.00). La cita, gratuita, reivindica la cultura ciclista a golpe de conciertos, paseos y debates con pedales.

La presente edición tiene como subtítulo Lo inimaginable: “Aún resuena en nuestros oídos esa frase tan negativa y rotunda que ahogaba cualquier posibilidad de fomentar el uso de la bicicleta en esta ciudad: ‘Madrid no es para las bicis’”, dice Nacho Padilla, creativo publicitario de Viernes, en cuyas oficinas nació el Festibal. “Todo el mundo lo veía muy complicado y bueno, aquí estamos; Madrid ya es una ciudad para bicis”, opina el creativo.

Y el Festibal, con un presupuesto de unos 15.000 euros por edición, ha contribuido un poco a ello: “La jornada invita a reflexionar, de manera lúdica, sobre cómo nos movemos con la finalidad de promover una ciudad más sostenible”, resume la organización.

Para disfrutar del evento —que se divide en dos convocatorias (la del 6 de junio y otra el 19 de septiembre) y que el año pasado atrajo a más de 7.000 personas en cada cita— hay que acercarse a Matadero, mejor en bici, y dejarse llevar por los conciertos de La Bien Querida, Victor Coyote o Trajano!; por la feria de bicicletas y accesorios; por la comida, con varios foodtrucks (camiones gastronómicos) o por los espectáculos sobre dos ruedas en el minidrome.

“Meter las bicicletas en la capital no era tan inimaginable”, añade Padilla. En los últimos cuatro años, el uso de la bici en Madrid ha crecido un 50%; en 2014 arrancó el servicio público BiciMad y se han construido más de 70 kilómetros de ciclocalles que se unen a los 316 kilómetros de vías ciclistas de la ciudad. “Ahora hay que seguir pensando en la ciudad que queremos”, anima Padrilla. “Imaginarla es el primer paso. Todavía queda lo mejor por delante”.

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