El campus de la UPC asoma por fin junto al Besòs

Los primeros tres edificios del complejo albergarán alumnos en 2016

Uno de los esqueletos del futuro campus, desde la zona del Fòrummassimiliano minoccri

En 2009 hubo ceremonia de colocación de la primera piedra, discursos y autoridades prometiendo que el campus de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC) en la zona del Fòrum, entre Barcelona y Sant Adrià, estaría operativo en 2012. Pero la crisis también enterró este proyecto y la torre Spiralling de la arquitecta iraquí Zaha Hadid quedó aparcada. Reanudadas precisamente en 2012, las obras de los primeros tres de un total de 12 edificios dedicados a la docencia y la investigación, alcanzan más de 10 alturas. El curso que viene deberían albergar a los estudiantes de la Escuela Industrial de la calle de Urgell y los grupos de química e industrial de la ETSEIB, según fuentes de la UPC.

En total, el complejo suma casi 150.000 metros cuadrados de techo edificable y las cifras que baraja la universidad hablan de 6.000 usuarios, entre estudiantes y personal docente y de administración. De los 12 edificios, siete serán de uso universitario y cinco de instituciones o empresas vinculadas a la investigación. De los tres edificios en marcha, el que tienen las obras más avanzadas es el que acogerá a los alumnos de la Escuela Industrial.

Las obras, que solo en estos tres edificios ascienden a 100 millones de euros, las costean la Generalitat y los Ayuntamientos de Barcelona y Sant Adrià. La UPC atraviesa una situación económica complicada. Con un déficit acumulado de 113,5 millones de euros, el presupuesto de 2014, 263 millones, supuso una reducción del 5,6% respecto al año anterior. Pero desde que empezaron los recortes, las cuentas de la UPC se han encogido en 159 millones, un 37,7%, lo que la convierte en el campus español que más ha adelgazado desde el inicio de los recortes. El consejo de gobierno del campus dio en junio del año pasado luz verde al plan de venta de una docena de edificios que permitirá, según los cálculos más optimistas de entonces, ingresar 50 millones de euros. La joya de la Corona de este paquete es el edificio de la facultad de Náutica, en Pla de Palau.

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