El PSPV propone suspender a los diputados procesados por corrupción

El secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig, ha presentado hoy 25 propuestas para la reforma de las Cortes, entre ellas, la prohibición de los sobresueldos, la incompatibilidad de cargos remunerados o la suspensión de empleo y sueldo a los parlamentarios procesados por corrupción.

En un acto protocolario ante sus compañeros de partido con motivo del 25 d'Abril, Puig ha insistido en la necesidad de revitalizar el parlamento autonómico, para que sea "esp...

El secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig, ha presentado hoy 25 propuestas para la reforma de las Cortes, entre ellas, la prohibición de los sobresueldos, la incompatibilidad de cargos remunerados o la suspensión de empleo y sueldo a los parlamentarios procesados por corrupción.

En un acto protocolario ante sus compañeros de partido con motivo del 25 d'Abril, Puig ha insistido en la necesidad de revitalizar el parlamento autonómico, para que sea "espejo de la ciudadanía".

Sus propuestas no contemplan, como propuso el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, ninguna reducción del número de diputados y no son, según ha asegurado, ningún documento para la negociación. "El recorte de diputados no es la solución, se trata de que sean más útiles. Por reducirse se podrían reducir más incluso -de los 79 propuestos por Fabra-. El propio presidente de las Cortes ha tomado este camino para plantar caquis", ha afirmado en referencia a la decisión de Juan Cotino de dedicar más tiempo a la agricultura.

"Con voluntad política, nuestras propuestas se podrían aplicar mañana. El hecho de que haya dos meses extra de vacaciones, en julio y en enero, o la publicación de las declaraciones de patrimonio de los diputados, todo esto son cuestiones de voluntad", ha añadido Puig.

El listado de propuestas contempla la suspensión temporal de responsabilidades para los imputados por corrupción a partir del momento del procesamiento y sin que sean sustituidos por otros compañeros de partido, así como la "reformulación del aforamiento", que a juicio del líder socialista "no tiene sentido más allá de garantizar la libertad de expresión".

"La suspensión de los diputados imputados sería similar a la que ya se ha aprobado en Cataluña, como las suspensiones de empleo y sueldo que se aplican a los funcionarios", ha explicado Puig.

Así, se propone la obligatoriedad de las declaraciones de renta y patrimonio, la renuncia a obsequios o donaciones, propiciar la celeridad de los procesos judiciales por corrupción y una Ley Valenciana de Transparencia que cree un comisionado parlamentario anticorrupción.

También un nuevo reglamento de las Cortes que evite el abuso del decreto ley, la supresión de la pregunta de control parlamentario al presidente por parte del grupo en el Gobierno, la ampliación del calendario para equipararlo al resto de trabajadores o que un tercio de los diputados puedan proponer una comisión de estudio o investigación.

Asimismo, se reclama la creación de una comisión de estrategias de futuro, una oficina de control del presupuesto presidida por la oposición y se reivindica la publicidad de documentos y contratos públicos y la presencia de representantes de la sociedad civil en la tramitación de leyes a través de un "escaño ciudadano".

Con el nuevo reglamento, el Gobierno debería someter obligatoriamente a aprobación plenaria  modificaciones presupuestarias que superen cierto límite, se propiciaría la iniciativa legislativa popular a partir de 30.000 firmas y se declararía la incompatibilidad de los diputados y miembros del Gobierno para materias relacionadas con el cargo durante dos años.

"La sociedad no puede percibir que los diputados somos unos privilegiados, esto no es un espacio temporal de residencia para algunos", ha dicho.

Asimismo, ha criticado los casos de corrupción que afectan al PP: "La foto finish tras 20 años de Gobierno del PP es desastrosa. Las Cortes están sepultadas bajo la sombra de la corrupción, que en el 99% de los casos afecta al PP, aunque los ciudadanos nos pasan a todos la factura".

"Las líneas rojas de Fabra son las curvas de la Vallivana para llegar a Morella. El problema es que el PP no tiene líneas rectas, sino adaptadas a su conveniencia. Esa es la desgracia para todos los valencianos: la incapacidad de su presidente", ha concluido sobre las propuestas de reforma.

Encuesta

Puig también se ha pronunciado sobre la encuesta de su partido que le da la mayoría en el Parlamento valenciano si se celebraran ahora elecciones autonómicas. El secretario general del PSPV ha asegurado que en los próximos comicios "se producirá un cambio, habrá un gobierno fuerte" y los socialistas aspiran "a ser un gobierno mayoritario de amplio espectro social".

El sondeo es "una foto del momento y de una tendencia" que marca de forma "clara" que los ciudadanos "quieren un cambio, pero que cómo se producirá no se puede decir en estos momentos". Por tanto, ha destacado que el PSPV tiene "una propuesta que hacer a los ciudadanos", pero que "serán los ciudadanos los que digan finalmente cómo será ese cambio" y ha señalado que cada día que pasa es "más necesario y urgente" que haya un cambio en la Comunidad Valenciana.

Puig ha recordado que cuando accedió a la secretaria general del PSPV el partido estaba sobre el 17% y ahora han subido al 27%, según las últimas encuestas, lo que "no es para tirar cohetes" pero demuestra que están "en una mejora sustancial".

"Hasta tal punto que esta encuesta marca por primera vez desde 1991 que los socialistas pasamos por delante del PP", ha recalcado Puig, quien, no obstante, ha aclarado que no quiere "autosatisfacción ni autobombo" porque "hay que poner los pies bien en tierra y saber que falta mucho tiempo".

Por ello, ha recalcado que los socialistas en este año que queda para las próximas elecciones autonómicas tendrán que "dejarse la piel para que haya ese cambio fuerte que necesita la Comunidad". Las últimas encuestas apuntan a "un desmoronamiento claro del PP", algo "normal y lógico" por la situación económica que ha dejado, por "haber dilapidado el sistema bancario valenciano" y "el hedor enorme en corrupción", en opinión de Puig. Pero, ha recalcado, los socialistas valencianos deben hacerse "destinatarios de la confianza de los ciudadanos y hacer un sobreesfuerzo" para conseguirlo.

Sondeo 'cocinado', según el PP

El vicepresidente y portavoz del Consell, José Ciscar, ha opinado este viernes que la encuesta realizada por el PSPV "es una nueva edición de Masterchef" y "no se la cree nadie, ni Ximo Puig".

Según Ciscar, "la batalla del PSPV no es por la primera plaza, que ya está adjudicada", en referencia al PP valenciano, sino por "no perder la segunda" y "no pasar a ser la tercera fuerza de la Comunidad".

"Aquí hay una cuestión que es verdad y es que ya se está produciendo la recuperación económica", ha incidido el vicepresidente del Consell, que ha recordado que el crecimiento nacional en el primer trimestre ha sido del 0,4% y se podría cerrar el año en el entorno del 1%, un dato que, según Ciscar, "pone nerviosos" a los socialistas porque "para ellos cuanto peor, mejor".