“A la socialdemocracia le han temblado las piernas con la crisis”

Cuando nació Javi López (Barcelona, 1985) Raimon Obiols llevaba ya dos años como primer secretario del PSC. El 25 de mayo le relevará en la candidatura socialista a Europa tras ganar las elecciones primarias del PSC.

Pregunta. ¿No le preocupa el 9% de participación que hubo?

Respuesta. Siempre queremos más participación, pero estoy satisfecho con el paso dado. Ningún otro eurodiputado que se va a escoger en Es...

Cuando nació Javi López (Barcelona, 1985) Raimon Obiols llevaba ya dos años como primer secretario del PSC. El 25 de mayo le relevará en la candidatura socialista a Europa tras ganar las elecciones primarias del PSC.

Pregunta. ¿No le preocupa el 9% de participación que hubo?

Respuesta. Siempre queremos más participación, pero estoy satisfecho con el paso dado. Ningún otro eurodiputado que se va a escoger en España va a tener un proceso así, en el que han participado 8.000 personas y el 30% de los militantes.

P. Si se repite esa participación, las primarias de Barcelona serán un fracaso.

R. Son procesos distintos. En Barcelona serán primarias abiertas a la ciudadanía, más innovadoras y participativas. La gente pide que la política se haga de forma diferente. Valoremos los pasos que estamos dando.

P. Deberían disiparse las dudas sobre la transparencia.

R. Seguro que tenemos que aprender a hacer las cosas mejor, pero hemos movilizado a centenares de compañeros en el proceso y eso también queda encima de la mesa.

P. Le acusan de ser muy ambicioso y que eso explica que desbancara a Esther Niubó, que era la candidata oficial.

R. Lo ocurrido simboliza la renovación. Mi proyecto era colectivo, de toda una generación en el partido que quería pedir paso. Solo he sabido trabajar en equipo.

P. ¿En un parlamento como el europeo en el que la media de edad es de 54 años, no tiene miedo de acabar siendo el chico de los cafés de Elena Valenciano?

R. Para nada. La apuesta que se hace es para hacer las cosas diferentes: alguien de 28 años, con energía y voluntad combativa para cambiar las cosas. He construido un liderazgo durante cinco años en las Juventudes Socialistas a base de trabajo y esfuerzo. Nunca le he llevado el café a nadie y no lo pienso hacer ahora.

P. ¿Qué puede aportar usted?

R. Una visión crítica con las respuestas que ha dado la Unión Europea con la crisis económica. Yo digo lo que pienso y he hecho lo que digo. He luchado contra la austeridad, he combatido la directiva de las 65 horas, he participado en las plataformas contra la xenofobia y el racismo. Ahora se trata de llevar todo ese activismo a las instituciones europeas.

P. ¿La socialdemocracia tiene credibilidad para ofrecer un discurso alternativo a la vista de cómo ha gobernado en los últimos años?

R. Seguro que la socialdemocracia ha hecho cosas malas durante los últimos años. Especialmente al principio de la crisis muchas veces nos han temblado las piernas a la hora de plantear una alternativa. Pero cada vez explicamos con más contundencia nuestro proyecto porque las respuestas que se han ofrecido son ineficaces.

P. ¿El pacto del SPD con Angela Merkel no les inhabilita para teorizar esa alternativa?

R. El SPD ha dejado muy claro que su política para Europa es diferente a la de Merkel. Yo no estoy de acuerdo con las grandes coaliciones, ni en Alemania ni aquí, pero hemos de aprovechar esa situación para hacer virar las políticas europeas con una mayoría en el Parlamento y logrando la presidencia de la Comisión Europea.

P. ¿Qué será lo primero que haga como diputado?

R. Interpelar a la Unión Europea por la retirada de la tarjeta sanitaria a los inmigrantes españoles, también en la UE. Y también hablar de la deuda privada y las hipotecas en España. No puede ser que se sigan pagando los préstamos sin considerar la caída del valor de los inmuebles entre el 30 y el 40%.

P. El PSOE no pinchó la burbuja cuando gobernó.

R. Seguro que hicimos cosas mal, pero también muchos avances, como la ley del aborto. Todos los partidos aprendemos. Tengo 28 años y se me hace muy dificíl corresponsabilizarme de lo que hizo el Gobierno anterior.