Noche de sorpresas en Hendaya

Diez tantos seguidos y sin entrar en calor son una amenaza latente para cualquier pareja que se precie. Incluso para Xala y el recuperado Zubieta que pertenecen al grupo de favoritos en este campeonato de mano por parejas. Ha ocurrido en el frontón de Henday, en una noche abierta a las sorpresas, porque tacadas así no son frecuentes , sobre todo de entrada. Ezkurdia y Zabaleta lo han hecho posible, cuando estaban muy lejos de los...

Diez tantos seguidos y sin entrar en calor son una amenaza latente para cualquier pareja que se precie. Incluso para Xala y el recuperado Zubieta que pertenecen al grupo de favoritos en este campeonato de mano por parejas. Ha ocurrido en el frontón de Henday, en una noche abierta a las sorpresas, porque tacadas así no son frecuentes , sobre todo de entrada. Ezkurdia y Zabaleta lo han hecho posible, cuando estaban muy lejos de los pronósticos. Han perseverado tanto en el tiempo que han acabado vapuleando a los rivales con un significativo 6-22.

Los inesperados ganadores buscaban desesperadamente la victoria que se les resistía desde el primer partido y de ahí que han tratado de aprovechar la mínima oportunidad que se les presentaba. Les ha bastado una mirada de reojo a sus rivales para entender que era posible. Que había llegado el día. Así se explica que hayan apretado el acelerador sin contemplaciones. Los primeros diez tantos seguidos han surgido como una premonición porque han supuesto toda una losa para el resto de un partido extraño.

A esta diferencia, que se mantuvo durante bastantes minutos más a pesar de que Xala y Zubieta hicieron el 1-10, ha contribuido el pésimo juego de Zubieta, excesivamente fallón en la zaga. Los chavales han cargado con fuerza la pelota vista la noche aciaga del rival. Les ha valido con superar el espacio delantero de Xala para bombardear el rebote. A partir de ahí se han permitido la osadía de ensanchar el marcador.

En el público, seguirán sin soltarse la sorpresa. Jugaba Xala ante sus vecinos y le acompañaba la fama de un buen comienzo en este campeonato. Además, son una pareja compenetrada más allá de la puntual ausencia de Zubieta por lesión. Pero el desequilibrio de esta noche ha condicionado el resto del partido. Han naufragado, nunca han estado en el partido. Contemplar un 2-12, un 3-13 o 4-16 a favor de los colistas del grupo no dejaba de ser una ocasión justificaba para parpadear. Incluso cuando Xala, en el principio de su desmoralización, ha propiciado con una inesperada falta de saque que la diferencia se fuera hasta el 5-17. Luego todavía ha tenido tiempo para demostrar que no era su noche para afear una actuación que no acostumbran. Por ahí se escapaba el duelo sin remisión y Ezkurdia y Zabaleta se han agarrado con ilusión a la sorpresa de Hendaya. Ya saben qués es ganar.