BNG, PSOE e Independientes negocian para desbancar al PP en Ponteareas

De fondo está la asfixia económica del Ayuntamiento, sobre el que pende la amenaza de la intervención

Tras las tres décadas de José Castro, el Ayuntamiento de Ponteareas lleva otras de recurrente sucesión de mociones de censura, escisiones del PP y traiciones varias por hacerse con el bastón de mando. Desde 2011, el PP gobierna con los nueve ediles de su mayoría simple frente a la oposición de BNG, con cinco, Acip (Alternativa Ciudadana de Ponteareas, esqueje del PP) con cuatro y PSOE con tres. Las tres formaciones negocian desde hace meses, con suspense, para desbancar a Salvador González Solla del sillón de la alcaldía.

El penúltimo episodio fue la consulta a las bases del Bloque, que...

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Tras las tres décadas de José Castro, el Ayuntamiento de Ponteareas lleva otras de recurrente sucesión de mociones de censura, escisiones del PP y traiciones varias por hacerse con el bastón de mando. Desde 2011, el PP gobierna con los nueve ediles de su mayoría simple frente a la oposición de BNG, con cinco, Acip (Alternativa Ciudadana de Ponteareas, esqueje del PP) con cuatro y PSOE con tres. Las tres formaciones negocian desde hace meses, con suspense, para desbancar a Salvador González Solla del sillón de la alcaldía.

El penúltimo episodio fue la consulta a las bases del Bloque, que dieron el sí el lunes en un cambio de registro respecto a la opinión previa de la formación, que veía difícil llegar a un acuerdo por los problemas para asumir el Gobierno en un contexto de ajuste presupuestario brutal. El portavoz nacionalista y candidato potencial en la moción, Xosé Represas, dice que “salvo repartir áreas de Gobierno”, estaba todo acordado. “Estamos esperando día y hora”, asegura. Pero el PSOE desconfía y se lo tienen que pensar, como Acip.

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Asfixia económica

De fondo está la asfixia económica del Ayuntamiento, sobre el que pende la amenaza de la intervención si no consigue corregir su déficit. En el PSOE, además, aún recuerdan la jugada de 2003, cuando varios ediles del PP permitieron al candidato socialista ser alcalde para echarlo nueve meses después, tras un pacto con el partido que Castro fundó a su salida del PP. Aquella formación se amortizó con el paso a la Xunta de Nava Castro, hija del patriarca —ahora es secretaria general de Turismo— y la presencia de Juan Carlos González Carrera como teniente de alcalde. Pero este chocó a su vez con Solla y planteó, él también, una escisión que privó de la mayoría al PP.

Tras los comicios de 2011 el PSOE dijo que no pactaría con Acip. Después cambió de idea. “Ese problema lo habíamos resuelto”, recuerda el secretario local, Delfín Domínguez, molesto por los “bandazos” del Bloque. “Hay que restablecer la confianza”, reclama. “Ahora no vamos a aceptarlo todo simplemente porque sus bases hayan dado luz verde”, señaló por su parte a Europa Press Raquel Bautista, de Acip. Represas dice que no le importan las críticas. “Me quedo con lo importante, que el PSOE aceptó públicamente un acuerdo con nosotros y los independientes y se comprometió a apoyar al candidato del BNG”.

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