El PSM vota contra el PSM

El PSM presentó en el pleno de la Asamblea de este jueves una proposición de ley para modificar la Ley Electoral de la Comunidad de Madrid, que planteaba primarias en todos los partidos políticos, que se cumpliera el programa electoral vendido en campaña y que se fijaran un número mínimo y determinado de debates en medios públicos. Lo hizo mediante una fórmula particularmente cerrada, la de la tramitación directa y en lectura única, que no facilita el debate, por no hablar de la posible presentación de enmiendas del resto de formaciones.

Conscientes de que se les podría reprochar fácilm...

El PSM presentó en el pleno de la Asamblea de este jueves una proposición de ley para modificar la Ley Electoral de la Comunidad de Madrid, que planteaba primarias en todos los partidos políticos, que se cumpliera el programa electoral vendido en campaña y que se fijaran un número mínimo y determinado de debates en medios públicos. Lo hizo mediante una fórmula particularmente cerrada, la de la tramitación directa y en lectura única, que no facilita el debate, por no hablar de la posible presentación de enmiendas del resto de formaciones.

Conscientes de que se les podría reprochar fácilmente semejante estrategia, los socialistas madrileños cambiaron de opinión y rectificaron a última hora su intención original y, en un gesto que generó cierto revuelo en el hemiciclo, votaron en contra de lo que ellos mismos habían presentado. Para sorpresa de la Cámara, el diputado socialista José Manuel Franco levantó los dos dedos de la mano, la señal que indica a los parlamentarios que se tiene que votar en contra (un solo dedo significa que hay que votar a favor, y tres que hay que abstenerse). Exactamente igual que Pedro Muñoz Abrines, que recordó la misma orden a sus colegas de escaño del PP. Gracias a ese gesto, que descolocó a muchos de los parlamentarios socialistas, que se veían conminados a votar en contra de lo que ellos mismos presentaban, se pudo parlamentar un asunto tan trascendente como tocar la Ley Electoral regional.

Rondaban las doce y media de la noche y el presidente de la Asamblea, José Ignacio Echeverria, avisó a sus señorías que antes de entrar en el último punto del orden del día se iba a proceder a votar la propuesta de tramitación en lectura única en primer lugar y sin debate previo. “Su aprobación comportaría el decaimiento del derecho a presentar enmiendas”, apuntó. De los 116 diputados –de 129- presentes a esas horas en el hemiciclo, ocho votaron a favor y 108 votos en contra, permitiendo de esta manera que hubiera un debate e intercambio de pareceres mucho más abierto que de haber salido adelante la lectura única. “La explicación para que se votara en contra de la lectura única y una tramitación así es que históricamente el Partido Socialista siempre ha estado en contra de dicha fórmula, porque es la que utiliza el Partido Popular cuando no quiere que haya el menor debate, aprovechando su mayoría absoluta”, explica uno de los parlamentarios socialistas presentes anoche en la Asamblea de Madrid.

El portavoz del PP en el hemiciclo, Íñigo Henríquez de Luna, aprovechó el cambio de estrategia del PSM para criticar el repentino cambio de postura. “Hay que ser coherentes. Ustedes han presentado una iniciativa que pretenden tramitar en lectura única y hoy aquí, de repente, han decidido retirarla. Es realmente impresentable que ustedes pretendan reformar una ley tan importante como es la Ley Electoral de la Comunidad de Madrid, una ley que al final regula y afecta a los derechos fundamentales de las formaciones políticas, que en un sistema democrático es algo absolutamente fundamental, y que esto ustedes pretendan hacerlo por el trámite de lectura única, es decir, sin dar la oportunidad a los Grupos Políticos de hacer enmiendas o aportaciones”, arremetió.

Tras el intercambio verbal, 68 diputados (del PP) votaron en contra y 51 (PSM, IU y UPyD) a favor, quedando rechazada la toma en consideración de una Proposición de Ley que generó una expectación incluso mayor de la esperada, que ya era.