Fomento defiende la ética y la honradez contra la corrupción

El acto ‘Anem per feina’ congrega a 400 empresarios

Gay de Montellà, en el acto.Massimiliano Minocri

Honradez frente a la corrupción, la petición de medidas urgentes y reformas estructurales para reactivar la economía, defensa de la reforma laboral y la demanda de una menor presión fiscal, y que la Administración pague antes y adelgace. Estos fueron los principales puntos del discurso de clausura del acto Anem per feina que ayer congregó a 400 empresarios en la sede de Fomento del Trabajo y que pronunció su presidente, Joaquim Gay de Montellà. En un día marcado por nuevas detenciones vinculadas a casos de corrupción, Gay ...

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Honradez frente a la corrupción, la petición de medidas urgentes y reformas estructurales para reactivar la economía, defensa de la reforma laboral y la demanda de una menor presión fiscal, y que la Administración pague antes y adelgace. Estos fueron los principales puntos del discurso de clausura del acto Anem per feina que ayer congregó a 400 empresarios en la sede de Fomento del Trabajo y que pronunció su presidente, Joaquim Gay de Montellà. En un día marcado por nuevas detenciones vinculadas a casos de corrupción, Gay de Montellà apeló a la “honradez y el prestigio social” de las organizaciones, “muy vinculada a las actitudes personales”. “La transparencia y el diálogo activo son preventivos de actitudes corruptas”, aseguró antes de afirmar que “la economía de mercado sin ética es totalmente imposible”.

Ni una sola referencia en la clausura a la política catalana o al proceso soberanista que se coló, en forma de temor, en la idea original del acto y que acabó por dejar sola a la patronal impulsora después de que se apearan el Círculo de Economía, Pimec y la Cámara de Comercio de Barcelona. Con todo, el acto llenó la sala Magna y un salón anexo de la histórica sede de la patronal en la Via Laietana de Barcelona.

Quien sí se refirió a la política fue Eusebi Cima, el presidente de Fepime. “La política hay que hacerla con mayúsculas, afrontando los problemas con altura de miras y no solo mirándose el ombligo, pensando en las próximas elecciones”, soltó antes de rechazar también las subidas de impuestos y pedir que la banca abra el crédito y a la Administración que ajuste su tamaño, que reduzca la burocracia y refuerce la seguridad jurídica. Cima también exigió “medidas excepcionales” y reivindicó que los empresarios “no somos los culpables de esta situación, como muchos ciudadanos tampoco lo son”. “También somos víctimas”, dijo.

Durante el acto, celebrado en un escenario con cuatro enormes flechas inclinadas hacia arriba, también intervinieron el presidente de Aijec-Joves Empresaris, Marc Bonavia; el presidente de la comisión de economía de la CEOE, José Luis Feito —que como el presidente de la patronal, Joan Rosell, minimizó las cifras del paro de la encuesta de población activa—; y el profesor de Iese Pedro Nueno.

El acto fue presentado por el periodista Manel Fuentes, que pisó fuerte en su intervención inicial. “Estoy acojonado porque tienen que ser muy peligrosa esta gente para que hoy haya más bajas aquí que en una empresa un lunes antes de la crisis”, dijo antes de asegurar que “en toda la sala no hay ningún imputado por corrupción, algo que no todos pueden decir”.

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