Un manifiesto contrario a Eurovegas suma 2.500 firmas

El escrito previene del impacto negativo que implicaría el macrocasino con argumentos económicos, sociales y medioambientales

Los detractores al complejo Eurovegas siguen movilizándose para que el macrocomplejo de ocio no se instale en Cataluña si finalmente así lo decide el magnate Sheldon Adelson. El manifiesto Eurovegas no ha recogido en solo 15 días más de 2.500 firmas y sigue sumando. El escrito, suscrito por personalidades de la ciencia, la cultura, y la política, se carga de argumentos económicos, sociales y medioambientales contra el complejo. Por ejemplo, muestra la situación de Nevada, Estado norteamericano donde se ubica Las Vegas: ocupa los últimos lugares en calidad escolar y es el primero en pa...

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Los detractores al complejo Eurovegas siguen movilizándose para que el macrocomplejo de ocio no se instale en Cataluña si finalmente así lo decide el magnate Sheldon Adelson. El manifiesto Eurovegas no ha recogido en solo 15 días más de 2.500 firmas y sigue sumando. El escrito, suscrito por personalidades de la ciencia, la cultura, y la política, se carga de argumentos económicos, sociales y medioambientales contra el complejo. Por ejemplo, muestra la situación de Nevada, Estado norteamericano donde se ubica Las Vegas: ocupa los últimos lugares en calidad escolar y es el primero en paro. “Si por algo Cataluña debe ser conocida internacionalmente es por su cultura y por su capacidad de captar talento nuevo e industria innovadora”, concluye el manifiesto.

“No se tienen en cuenta las consecuencias que tendría para Cataluña la instalación de Eurovegas”, explica Roderic Guigó, impulsor del manifiesto y coordinador de los programas de bioinformática y genómica del Centro de Regulación Genómica de Barcelona. Guigó plantea el cambio que significaría para el modelo de ciudad: “Un proyecto como este va contra la línea de flotación de lo que hace crecer un país para vivir”, sostiene. Como investigador, le preocupa que un proyecto como Eurovegas haga que el talento que de otra forma se instalaría en Barcelona se lo replantee. Concluye ilustrando: “En Las Vegas no hay laboratorios”.

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