Artistas y críticos tildan de incongruente poner a Ciscar en el Consell de Cultura
Consideran que su trayectoria en instituciones culturales ha sido “un ejemplo de derroche”
La propuesta del PP de que la actual directora del IVAM, Consuelo Ciscar, ocupe una vacante en el Consell Valencià de Cultura ha provocado el rechazo de los críticos de arte y los artistas, que consideran una “incongruencia” que se intente designar para el órgano consultivo “a una persona cuya trayectoria al frente de instituciones culturales valencianas ha sido un ejemplo de derroche económico y falta de planificación”. La Associació Valenciana de Crítics d’Art (AVCA) y Artistes Visuals de València, Alacant i...
La propuesta del PP de que la actual directora del IVAM, Consuelo Ciscar, ocupe una vacante en el Consell Valencià de Cultura ha provocado el rechazo de los críticos de arte y los artistas, que consideran una “incongruencia” que se intente designar para el órgano consultivo “a una persona cuya trayectoria al frente de instituciones culturales valencianas ha sido un ejemplo de derroche económico y falta de planificación”. La Associació Valenciana de Crítics d’Art (AVCA) y Artistes Visuals de València, Alacant i Castellón (AVVAC) insisten en un comunicado conjunto en la necesidad de que los miembros del Consell de Cultura sean independientes, lo cual a su juicio “resulta incompatible” con el nombramiento de la directora del IVAM, ya que el museo que dirige es “susceptible” de ser evaluado por el organismo del que formaría parte.
Las asociaciones recuerdan que solicitaron públicamente la dimisión de Consuelo Ciscar como directora del IVAM, de cuya gestión destacan “los numerosos proyectos fantasma que generaron un enorme gasto sin llegar a existir”, como es el caso de la Ciudad de las Artes Escénicas o el Museo del Siglo XIX, y la deuda generada por su dirección del Consorci de Museus.
Artistas y críticos rematan así un duro comunicado: “Consideramos imprescindible que sean los profesionales de prestigio, con una trayectoria acreditada, quienes ocupen los espacios institucionales de excelencia cultural. Un principio lógico que se vería defraudado en el caso de llevarse a cabo dicho nombramiento”.