Los socialistas renuncian a llevar escolta

El secretario general del grupo, Óscar Rodríguez, rinde homenaje a los distintos cuerpos policiales y a los profesionales privados

La imagen de la vergüenza, que durante años y años se ha hecho anormalmente familiar en los aledaños del Parlamento, la de decenas de escoltas esperando en grupos, después de haber desembarcado de sus coches a sus protegidos, o a la expectativa de su recogida, empieza a borrarse. Van siendo ya muchos menos y es de esperar que desaparezcan en su casi integridad.

Ya iba siendo frecuente ver llegar solos y andando a parlamentarios de los partidos amenazados, pero el Grupo Socialista en la Cámara ha anunciado oficialmente hoy que sus integrantes han ido renunciando progresivamente a los ser...

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La imagen de la vergüenza, que durante años y años se ha hecho anormalmente familiar en los aledaños del Parlamento, la de decenas de escoltas esperando en grupos, después de haber desembarcado de sus coches a sus protegidos, o a la expectativa de su recogida, empieza a borrarse. Van siendo ya muchos menos y es de esperar que desaparezcan en su casi integridad.

Ya iba siendo frecuente ver llegar solos y andando a parlamentarios de los partidos amenazados, pero el Grupo Socialista en la Cámara ha anunciado oficialmente hoy que sus integrantes han ido renunciando progresivamente a los servicios de protección que llevaban, desde hace al menos 11 años, a causa de la amenaza expresa de ETA que pesaba sobre ellos y también sobre los representantes del PP y otras fuerzas no nacionalistas, como en su momento Unidad Alavesa (UA) o luego UPyD. Hay alguna excepción que no se ha precisado en el mantemiento de la escolta.

El secretario general del grupo, Óscar Rodríguez, ha rendido homenaje a los distintos cuerpos policiales, Ertzaintza y Fuerzas de Seguridad del Estado, y a los profesionales de empresas privadas, al agradecerles la protección que han brindado "con su vida" a la de todos los afectados por esa amenaza, ahora desaparecida.

Algunos miembros del grupo parlamentario del PSE-EE se adelantaron a pedir la retirada de la escolta incluso antes de que la banda terrorista anunciara hace año y medio la suspensión de actividades. Alguno lo hizo ya en 2006, pero fue luego obligado a retomar la protección. El resto lo ha ido haciendo a partir de la conversión en definitiva de la tregua, en octubre del año pasado.

"Ellos y ellas", ha señado Rodríguez, en referencia a los escoltas, "han hecho posible que en Euskadi hayan podido ejercer su labor los colectivos amenazados. Que los políticos de distintas formaciones hayamos podido seguir defendiendo las ideas y proyectos de quienes nos votan. Que los jueces hayan continuado impartiendo justicia y protegiendo derechos, también los de los terrroristas".

El secretario general del grupo ha resaltado que el trabajo de los escoltas ha permitido también "que los empresarios hayan permanecido creando riqueza y puestos de trabajo y que los periodistas hayan estado a pie de calle y de las instituciones para poder informar".

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