La sustentabilidad también es parte de la aventura
Tras el auge de las actividades exteriores, aunado a la urgencia de una conciencia ambiental mucho más comprometida y activa, el cuestionamiento sobre nuestro impacto en la naturaleza se ha redimensionado
El confinamiento y las restricciones de viaje detonaron un cambio de actitud en muchos de nosotros, especialmente frente a nuestra relación con el mundo exterior. Para muchos, esperar el momento adecuado para retomar la confianza y volver a nuestros viajes y actividades fue un día que se fue prolongando poco a poco. Salud, diversión y la necesidad de desconectarnos un poco nos fue acercando de vuelta al bosque, los desiertos, las montañas y los senderos.
La naturaleza más próxima a nosotros nos ha recibido de nuevo y el hiking, senderismo, montañismo y actividades exteriores están de vuelta como nunca. Sin embargo, esto ha traído consigo una serie de cuestionamientos alrededor de nuestra huella y responsabilidad ambiental.
Picnics, escaladas, campings, ejercicio y actividades sobre territorios en donde suele habitar una flora y fauna muy particular hoy demandan un cuidado y protección activa de nuestra parte, si lo que deseamos es preservar los paisajes increíbles y las experiencias únicas al aire libre.
Para José González, guía hiker y fundador de Latino Outdoors, organización que genera comunidad y consciencia mediante las actividades exteriores, la cultura y la diversidad latinoamericana en Estados Unidos, el tema de nuestra huella en estos espacios no es menor ni puede postergarse demasiado, en tanto “(...) estamo rompiendo el ciclo natural. Tú lo puedes ver con el cambio climático. Por eso, en las actividades que realizamos lo más importante es poder conectar con la importancia y grandeza del entorno. La naturaleza son nuestras raíces ancestrales, hay mucha información y herramientas en ella que nos pueden ayudar a sanarnos. Creo que la civilización moderna se está dando cuenta del daño que está haciendo. Salir a disfrutar del exterior natural es recordar que somos parte de un ciclo de regeneración de vida”.
En su informe titulado “To Recovery & Beyond: The Future of Travel & Tourism in the Wake of Covid-19″, el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC), dentro de las cuatro principales tendencias que darán forma al turismo del futuro, destaca la sostenibilidad como una de las más importantes y estratégicas, en donde la preservación y la participación activa de todos los actores involucrados en las aventuras en exteriores será crucial para poder conservar estos espacios para las próximas generaciones.
Detrás de acciones obligadas y recurrentes como recoger y separar la basura, no alterar la vida silvestre del ecosistema que visitamos o sensibilizarnos con la forma en la que nuestra presencia puede afectar ese ciclo natural del que nos habla José González, existe un cambio de visión, en donde el respeto, la observación y la reciprocidad es parte inherente del contexto actual, dentro y fuera de la naturaleza.
Jorge Olvera, fundador del proyecto internacional en torno a la aventura outdoors con enfoque social World Lineage, la aventura exterior siempre tiene que venir acompañada de una sensibilización, respeto y empatía hacia todo aquello que se encuentra fuera de nosotros. Lo que él llama “lo otro”.
“La naturaleza a veces va contra las dinámicas globales del mercado (agencias de viajes), contra lo que el turismo homogeneizado nos vende a veces de forma irresponsable. Nosotros como viajeros debemos ser más responsables, abrir los ojos y ver el valor biocultural del entorno. Tenemos que entrar y ver el entorno con ojo crítico, observar los impactos secundarios y hacernos cargo. La naturaleza implica siempre el respeto a todo lo demás”.
Si bien el camino por delante puede parecer incierto, tras los meses más cruentos de la Covid-19 tendencias como los bosques-spa temáticos para aliviar padecimientos de salud, el glamping o camping-hotel boutique, así como un boom en las experiencias naturales, de montaña y senderismo han tenido un incremento entre sus adeptos. Esto nos habla también de una consideración con el ambiente, además de la creación de comunidades que de a poco han venido trabajando de forma conjunta.
Como en el caso de Jorge Olvera y José González, quienes además de fungir como sendos guías experimentados, brindan inspiración y orientación, transmiten su conocimiento y pasión por la naturaleza, confiando en que las acciones tomadas hoy sean componentes vitales para la sostenibilidad y la resiliencia a largo plazo dentro de los viajes, el turismo y las actividades en exteriores.