Seis libros esenciales para entrar al arte contemporáneo

Pese a que en 2014 aún parecía una realidad difícil de suceder, hoy la lectura digital parece rebasar al formato físico de forma importante, especial entre los nativos digitales, quienes aluden economía de recursos, practicidad e incluso una dinámica más ecológica.

De acuerdo con un estudio de Amazon encargado a IPSOS, en febrero de 2022 el 70% de los lectores declaró mundiales declaró estar suscrito a un servicio digital, incluyendo libros, sobre todo entre una población entre los 18 y los 34 años, quienes son los que más utilizan programas de lectura digital (30%). Sin embargo, hay voces que consideran que un formato no sustituye al otro, especialmente en libros especializados como lo son los libros de arte.

Diseñados con mayor atención en el aspecto visual, la claridad de los discursos o la experiencia del lector, los libros de arte hoy por hoy juegan un papel fundamental entre propios y extraños, quienes al no poder estar de forma física en una exposición o momento histórico predeterminado, los libros físicos son una poderosa fuente de aprendizaje y deleite estético, pero también de crítica y reflexión a temas nodales de la vida humana desde las distintas disciplinas artísticas.

Sin embargo, con el paso de los años y ante la evolución de la oferta cultural circundante, escoger un libro de arte contemporáneo vital, didáctico o de alto valor es una tarea compleja que requiere tiempo y detenimiento para no pasar por los mamotretos básicos de escritorios, que suelen ser más un compendio de fotografía e imágenes, que un libro de arte que nos puede llevar a lecturas más profundas o complejas.

Para María José Sesma, artista visual y fotógrafa mexicana (1983, Torreón, Coahuila), el formato de libro físico le ha permitido expresar de una forma narrativa mucho más precisa su obra, al tiempo que ha podido llegar a otros mercados, sin la necesidad y la casi siempre titánica tarea que implica mover su trabajo en exposiciones o galerías.

“Me agrada mucho (el libro físico) porque no me gustan las imágenes sueltas y te da oportunidad de hacer un discurso. Así como hay narrativas en las películas, que requieren un orden y un tiempo, hay una secuencia, en mis libros existe una construcción en términos de contenido. A mí me encantan porque es como una exposición que dura para siempre, años, no necesitan ir personas, es más libre. Pero claro, tiene otros desafíos como la distribución, los costos y es muy lento”, reflexiona la fotógrafa, quien se interesa en su trabajo por lo espectral o lo que no está a la vista pero existe.

Por su parte César Oliveros, encargado de la librería EXIT, local especializado con más de una década de existencia y perteneciente a la icónica revista del mismo nombre fundada por la escritora y crítica española Rosa Olivares (Madrid, 1955), lo digital y lo analógico incluso se complementan. “Hay ediciones que no se encuentran en otro lado y sí están en pdf. Optimismo aparte, apostar sólo por lo digital me parece un tanto ciego a futuro, ya que puede haber una tormenta solar (como lo muestra Werner Herzog en su documental Lo and Behold de 2016) y quedarnos sin internet. En ese escenario lo que va a sobrevivir es lo físico. Conocemos muchas obras de Platón o Epicuro porque han ido pasando de mano en mano en formato físico, en papel. La mayor parte del archivo de la humanidad ha sido físico, pero no somos enemigos de lo digital, precisa Oliveros.

Consultamos a diferentes artistas, editores, curadores y especialistas inmersos en el arte contemporáneo y sus libros para compartir una breve guía, tan subjetiva como abreviada, que de alguna manera marca un camino para adentrarse en las diferentes posibilidades, subjetividades, diálogos y visiones que brinda un libro físico de arte contemporáneo.

1. Historia del arte, Ernst Gombrich (Océano, 1950)

Publicado originalmente hace más de 70 años y considerado la piedra angular de la historia del arte, este best seller no ha tenido a la fecha un competidor claro como introducción al arte de forma clara, didáctica y completa, yendo de las primeras pinturas rupestres al arte experimental contemporáneo. Uno de los indispensables en la librería EXIT.

2. Prime, Art’s Next Generation Phaidon Press, 2022)

Fundada en Phaidon Press en Viena en 1923 por Bela Horowiz y Ludwig Goldscheider con el objetivo fundamental de hacer libros de alta calidad a precios accesibles, Phaidon Press es hoy por hoy uno de los bastiones editoriales en torno al arte contemporáneo.

Este título, el más actual de este listado, comprende una actualización puntual e innovadora de lo que está sucediendo en el arte contemporáneo del mundo desde sus distintas vertientes, disciplinas y discursos. Lawrence Abu Hamdan, Farah Al Qasimi, Korakrit Arunanondchai, Firelei Báez, entre otros artistas nacidos a partir de la década de los ochenta conforman este voluminoso libro, indispensable para estar al día.

3. Volverse público, Boris Groys (Caja Negra, 2014)

Enfocado en la reflexión y el pensamiento crítico, este texto perteneciente a la icónica editorial argentina Caja Negra es un buen termómetro para identificar y discutir los distintos avances técnicos y cambios en los criterios que se han insertado en la sociedad contemporánea para identificar qué es arte y qué no lo es.

Jesús Pacheco, periodista cultural, productor y conductor de La Pipa y la Fuente, programa de radio especializado en el arte contemporáneo, sugiere de forma especial el capítulo de este libro titulado Camaradas del tiempo. “En él, Groys no sólo ensaya sobre el significado de lo contemporáneo, sino que se atreve a asegurar que el arte contemporáneo se ha vuelto una práctica de la cultura de masas debido a los medios y redes que permiten al usuario volverse autor al presentar sus fotos, videos y textos, al practicar la autodocumentación”, explica Pacheco.

4. Love Goes to Buildings on Fire, Will Hermes (Faber & Faber, 2011)

Para el músico y periodista argentino Ariel Pukacz, editor de Walden, proyecto autogestionado y nacido en 2017 -enfocado en el ethos punk desde diversas disciplinas, visiones y vertientes-, el libro físico representa un acercamiento distinto con su contenido. “Poder subrayarlo, saber cuántas páginas son, tiene otra aproximación al texto. En Kindle un libro de diez páginas o un libro de mil pesan y lucen igual”. Él nos recomienda este libro del periodista estadounidense Will Hermes, quien cuenta el surgimiento de una etapa nodal de la música del Siglo XX con un protagonista al centro: Nueva York.

Comprendida como una disciplina que puede conectar con las artes y el pensamiento contemporáneo, la música en este libro es abordada de forma no lineal, generosa y bien documentada, algo que Pukacz procura mucho tanto como editor de libros como lector. “Me aburre cuando un libro cuenta la historia de forma lineal, me gusta la idea de microhistoria, eso lo hace más complejo. Este libro analiza la escena musical de Nueva York desde el 73 al 78, del surgimiento del rock con New York Dolls, el glitter rock, toda esa movida, al surgimientos del hip hop, de la salsa y la música disco. Es de los pocos libros que aborda una ciudad en su totalidad musical y eso para mí es interesante”, afirma el editor de libros como No te debemos nada, In my Eyes y más recientemente La venganza de Killing del autor argentino Rafael Bini.

5. Management of Art Galleries, Magnus Resch (Phaidon Press, 2018)

Comprendida como la guía más vendida para administrar una galería exitosa y contada desde la perspectiva experta de los conocedores del mundo del arte, este compendio funge como un referente nodal para adentrarse en el ámbito curatorial moderno, las dinámicas del mercado, así como los aspectos alrededor de la promoción, cotización y divulgación de la obra artística desde sus distintos elementos: espacios, ferias, bienales, tendencias y producción desde el ecosistema de las galerías.

6. An American Index of the Hidden and Unfamiliar, Taryn Simon (Steidl, 2007)

Si las artes se nutren del mundo y sus distintos aspectos, y a su vez el arte contemporáneo diversifica, expande y complejiza la visión del mundo, este libro resulta fascinante desde el aspecto documental de la fotografía.

La artista visual María José Sesma lo recomienda especialmente como una fuente de inspiración puntual, en donde la artista multidisciplinaria estadounidense Taryn Simon (Nueva York, 1975). “El papá de Taryn trabajaba en la CIA, y en este libro ella hace todo un registro de cosas absurdas que oculta el gobierno de Estados Unidos, objetos extraños del aeropuerto, los cables de internet, evidencias de distinto tipo, cosas que al final reflejan la idiosincrasia de la sociedad norteamericana. Es un índice de cosas que a ella le parecen incongruentes. Resulta curioso que al único lugar al que no la dejaron entrar a fotografiar fue Disneyland, pero va a lugares donde hubo bombas y demás”, cuenta Sesma.