El Gobierno de Colombia suspende las postulaciones para el programa Mi Casa Ya

El Ministerio de Vivienda anuncia que el subsidio, creado para facilitar la compra de casas a los ciudadanos, debe reducir sus capacidades en medio de las dificultades financieras del Estado

Viviendas en la localidad de Ciudad Bolívar, en Bogotá, en abril de 2024.NATHALIA ANGARITA

El Gobierno de Colombia ha anunciado este lunes la suspensión de las postulaciones para el programa Mi Casa Ya, el subsidio estatal creado para facilitar la compra de casas a los ciudadanos. El anuncio fue hecho a través de una circular emitida por el Fondo Nacional de Vivienda (Fonvivienda), dependiente del Ministerio de Vivienda. La suspensión va acompañada por el cierre del registro para la preasignación del subsidio para la compra de viviendas de interés prioritario (VIP, que tienen un coste máximo de 90 salarios mínimos). La decisión significa una afectación para quienes esperaban comprar una casa valiéndose de las facilidades que ofrece ese subsidio ―que oscila entre 20 y 30 salarios mínimos, dependiendo de la clasificación del Sisbén, o entre el 4% y el 5% para la cobertura de la tasa de interés, dependiendo del tipo de vivienda―, y también para las empresas constructoras.

El ministerio justifica los cambios en Mi Casa Ya en varios factores. El primero de ellos es la coyuntura financiera del Estado, que tiene muy poco dinero líquido por el bajo recaudo de 2024. Eso se da un contexto en el que naufragó en el Congreso la reforma tributaria con la que el Gobierno esperaba recolectar unos 12 billones de pesos para sanear el déficit de su presupuesto para 2025. También argumentó que el subsidio se ha hecho menos acuciante para los compradores por el “entorno macroeconómico favorable” de las tasas de interés de los créditos para viviendas de interés social (VIS, de un coste máximo de 135 salarios mínimos) y la baja inflación que ha proyectado el Banco de la República. Ante esa mejoría del contexto en el que los hogares pueden acceder a créditos hipotecarios, agrega la circular, se hace necesario “replantear” varios aspectos de la política pública de vivienda.

Según explica, se agotaron los cupos para acceder al beneficio de la cobertura a las tasas de interés. Por eso, a partir del pasado lunes, las familias que no hayan llegado a cierto paso, la marcación, en el proceso para recibir la ayuda, ya no contarán con él. La carga de revelar la mala noticia a los interesados quedará en cabeza de los establecimientos de crédito, las entidades de economía solidaria o las cajas de compensación familiar, que son quienes tramitan las ayudas como parte de su financiación a la compra de vivienda. Solo aquellas familias que ya tengan un registro inicial podrán seguir adelante con el proceso como hasta ahora, sin que ello garantice que van a recibir el subsidio.

Sobre el cierre de la plataforma para la preasignación de subsidios, el ministerio ha aclarado que los hogares que ya la hayan obtenido mantendrán su reserva, siempre que haya disponibilidad en el presupuesto y cumplan con los requisitos. La circular recuerda que, una vez en el proceso de preasignación, los hogares no pueden cambiar de constructor, proyecto, tipo de vivienda ni composición de grupo familiar. Además, indica que se mantienen otras exigencias en la solicitud posterior.

Aparte de los motivos expuestos en la circular, otra razón que explica los cambios en Mi Casa Ya tiene que ver con la falta de liquidez del Estado, lo que ha obligado a aplicar varios recortes. De acuerdo con los reportes del Banco de la República, el 6 de diciembre pasado los recursos de la Nación llegaron a 6,4 billones de pesos, lo que representaba una disminución de 7,3 billones en comparación con la medición del 29 de noviembre. El nivel es uno de los más bajos en más de 20 años. Las dificultades quedan en evidencia si se observa que, hacia finales de 2023, los saldos en caja de la Nación estaban cercanos a los 18,5 billones de pesos.

La decisión del Gobierno se suma a una cadena de dificultades en la venta de viviendas en Colombia que viene de varios años atrás y que esta Administración no ha podido mejorar. A comienzos de este año se informó de que, en 2023, la venta de casas en el país se había reducido en un 45%, y que, entre todos los segmentos, era el de interés social el que más retrocedía, con un 49,7% de disminución. Ese porcentaje se traducía en unas 290.000 familias que no pudieron comprar casa el año pasado. La iniciativa del Ejecutivo de acelerar las ayudas para las regiones más apartadas del país ha significado una ralentización en los procesos que deben seguir los interesados en programas como Mi Casa Ya. Sin embargo, el experto y docente de Urbanismo de la Universidad Nacional Carlos Alberto Torres aseguraba en ese momento que los problemas de acceso a vivienda son más profundos y vienen desde hace por lo menos 15 años.

El anuncio del Ministerio de Vivienda ha sido blanco de ataques por parte de varios miembros visibles de la oposición al Gobierno. El exministro y senador David Luna dijo: “Esto no solo revela la improvisación fiscal del Gobierno, sino también su incapacidad para proteger a los más vulnerables; la defensa de los desfavorecidos se quedó en discurso”. La también senadora María Fernanda Cabal escribió: “¡Farsantes! Y dicen que trabajan por los más necesitados”. El presidente Gustavo Petro replicó a Cabal: “La senadora dejó que Duque endeudara el Estado. Votó en contra de la reforma tributaria que después destruyeron y ahora presionó para hundir la ley de financiamiento y se asombra que no haya caja en el Estado”.

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