El Gobierno considera que tras el asesinato de José Luis López de Lacalle, cometido por ETA el domingo en Andoain (Guipúzcoa), el lehendakari, Juan José Ibarretxe, no tiene más remedio que anticipar las elecciones en Euskadi, "para acabar con tanta ignominia y tanta vergüenza". Así lo afirmó ayer en Rabat, donde se encuentra en visita oficial, el presidente José María Aznar, y lo reiteraron otros miembros del Gobierno. Decenas de miles de personas se manifestaron en toda España para repudiar el crimen, mientras en el País Vasco quedó patente, una vez más, la tensión que enfrenta a los nacionalistas con el resto de partidos y fuerzas sociales.
Dos vigilantes jurados de la empresa Prosegur resultaron muertos ayer en Vigo a consecuencia del tiroteo que se produjo en un espectacular atraco a un furgón blindado. Los atracadores, que no lograron hacerse con el botín, utilizaron tres explosivos para intentar reventar el furgón. Los vigilantes repelieron la agresión a tiros y en la refriega resultaron muertos dos de ellos y herido grave un tercero. Tres personas que transitaban por el lugar resultaron con heridas leves. Los atracadores, que usaron armas automáticas, eran dos hombres y una mujer. Es el tercer suceso de estas características que se produce en Vigo desde 1994. La policía especula con que se trate de una acción de los GRAPO o de una banda internacional de delincuentes.
La policía filipina detuvo ayer a uno de los tres principales sospechosos de crear y difundir el virus I love you, que ha contaminado a 45 millones de ordenadores en todo el mundo. El detenido es Reomel Ramones, de 27 años, un especialista informático del Equitable Bank. Se prevé la pronta detención de su novia, Irene de Guzmán, de 23, y de la hermana de ésta, Jocelyn de Guzmán, a la que los investigadores responsabilizan de la creación del virus. En las indagaciones ha desempeñado un papel determinante el FBI de Estados Unidos. En las últimas horas han proliferado las mutaciones del virus -al menos 14-, en ocasiones camufladas como advertencias contra el I love you e incluso avaladas por una prestigiosa empresa fabricante de sistemas antivirus.
La Bolsa castigó ayer el fracasado intento de fusión de Telefónica con la holandesa KPN, que naufragó el viernes por la oposición del Gobierno y de los principales accionistas, el BBVA y La Caixa. Los títulos de la operadora perdieron un 6,67%, con lo que Telefónica valía ayer en Bolsa 13,28 billones de pesetas, 940.000 millones menos que la semana pasada. Fuentes de la compañía insistieron ayer en los beneficios que el acuerdo habría reportado para Telefónica. Así lo interpretó el mercado, que la semana pasada saludó la fusión con fuertes subidas, mientras que ayer castigó la ruptura.