Vídeo | Una hembra de foca Weddell enseña a bucear a su cría
Las focas de Weddell son conocidas por su capacidad para bucear y se ha registrado que lo hacen durante 96 minutos, una capacidad que se debe a los altos niveles de proteínas que contienen de hierro en sangre y músculos.
En comparación con otras focas fórcidas (uno de los tres grupos principales dentro del linaje de las focas) tienen un período de lactancia relativamente largo, 6-7 semanas, y durante este tiempo las hembras dependen principalmente de la energía y los nutrientes almacenados, y pueden perder entre 100-150 kg de masa corporal.
Michelle Shero, científica en el Departamento de Biología de la Institución Oceanográfica Woods Holey, y sus compañeros de investigación hicieron un seguimiento de las hembras reproductoras, y de las que no se reproducen, entre 2010 y 2017 para explorar los beneficios de la lactancia para las crías y las consecuencias asociadas a las hembras reproductoras. Examinaron el contenido de sangre y leche de las hembras, así como los cambios resultantes en el comportamiento de buceo. Los autores descubrieron que los índices de movilización de hierro eran elevados durante la lactancia en las hembras con crías, pero no en las reproductoras. Resultó que las hembras reproductoras transferían hierro de su hígado a la sangre y luego a la leche, reduciendo sus propias reservas de hierro. Este proceso crea una leche con hasta 100 veces más hierro que los niveles encontrados en los mamíferos terrestres.
Esta especie también es una de las indicadoras clave del estado de salud del océano Glacial Antártico. Por sus hábitos, estas focas se han convertido en el mamífero que habita más al sur del planeta y aguantan condiciones extraordinariamente duras mientras comparten terreno con pingüinos emperadores en el hielo marino que rodea al continente blanco.