‘Cardo’ y ‘Todo lo otro’: el desencanto de los treintañeros españoles salta a las series
Abril Zamora y el dúo formado por Claudia Costafreda y Ana Rujas hablan sobre sus proyectos, que retratan la forzada falta de aspiraciones de sus protagonistas en una España que da la espalda a los jóvenes
Los veinteañeros de la recesión económica de 2008 son los treintañeros que han afrontado la pandemia actual sin haber podido recuperarse del golpe anterior. La generación desencantada comienza a aflorar también en televisión. Cardo (Atresplayer Premium) y Todo lo otro (HBO Max) son dos series a punto de estrenarse que, cada una a su modo, muestran la falta de oportunidades de los jó...
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Los veinteañeros de la recesión económica de 2008 son los treintañeros que han afrontado la pandemia actual sin haber podido recuperarse del golpe anterior. La generación desencantada comienza a aflorar también en televisión. Cardo (Atresplayer Premium) y Todo lo otro (HBO Max) son dos series a punto de estrenarse que, cada una a su modo, muestran la falta de oportunidades de los jóvenes españoles.
Desde la crisis de la pasada década, los menores de 35 años se han convertido en un colectivo en peligro. El 32% de la población de entre 20 y 29 años estaba en 2019 en riesgo de pobreza o exclusión social. La media de la Unión Europea es solo algo mejor: el 26% se encuentran en esa situación, apunta en un estudio el Centro Reina Sofía sobre adolescencia y juventud de la FAD. Al cumplir los 30, la situación no se resuelve de un día para otro y la pandemia ha complicado todavía más las cosas.
Cardo, creada por Claudia Costafreda (29 años) y Ana Rujas (32 años), llega al catálogo de Atresplayer Premium el 7 de noviembre. “Sin querer ser teóricas sobre ningún asunto ni centrarnos en un público o un género determinado, sí buscamos que la serie sea en parte la voz de una generación, porque lo que se refleja en ella son unas circunstancias concretas que viven un determinado grupo de personas en este tiempo”, apunta Costafreda en conversación telemática desde Barcelona.
La serie se centra en María, una chica madrileña al borde de los 30 que siente que no tiene mucho que ofrecer al mundo. Enganchada a las drogas y a desenvolverse a través de relaciones tóxicas y sexuales, odia su cuerpo a la vez que lo utiliza para conseguir retos efímeros. Ante tal sensación de vacío, un accidente cambiará su vida y la obligará a afrontar algunas verdades incómodas. “Ella está en un momento de la vida en el que se supone que ya tienes que tener las cosas claras, pero no se ha escuchado lo suficiente. Hasta que de pronto la vida le da un choque que le hace ver que no puede mirar ya a otro lado”, comenta Rujas, que además interpreta al personaje, desde Madrid.
“La desigualdad social es algo con lo que convive la gente de nuestra edad. La serie viene a reflexionar sobre la idea de que Vienes de donde vienes y eres quien eres”Ana Rujas, cocreadora de 'Cardo'
Javier Calvo y Javier Ambrossi, Los Javis, son productores de la serie y quienes unieron a ambas creadoras, convencidos de que podrían hacer un buen tándem. Costafreda se incorporó al equipo de guion de su serie Veneno (Atresplayer Premium, 2020). A Rujas, que había priorizado el teatro sobre las pantallas tras aparecer en la serie juvenil HKM (Cuatro, 2008) y en 90-60-90, diario secreto de una adolescente (Antena 3, 2009), le siguieron la pista por los escenarios. Hasta que escribió y estrenó en 2019 junto a Bárbara Mestanza La mujer más fea del mundo, donde defendía en solitario un texto sobre depresión, drogas, sexo, su oficio y su generación. Pero en realidad, ellas ya habían conectado antes, cuando Rujas fue jurado en un festival de cine en el que competía un cortometraje de Costafreda y peleó, sin éxito, para que fuera galardonado. “Los Javis nos han ayudado a que seamos la puerta para lo que viene: que mucha otra gente joven vaya a crear sus propias historias”, dice Rujas.
Las dos creadoras también ahondan a lo largo de los seis episodios en las diferencias sociales en España, que se amplían cada vez más para las nuevas generaciones. Su protagonista se ve involucrada con dos personajes de alto poder adquisitivo, interpretados por Alberto San Juan y Diego Ibáñez, vocalista de la banda Carolina Durante. La decisión fue por completo deliberada, relata Costafreda: “Ana viene de un barrio de clase obrera. Yo no, pero en mi familia sí que sufrimos de forma atroz la crisis del 2008. De alguna forma, sí que hemos vivido ambas lo que ha sido la diferencia de oportunidades”. Rujas comenta que era muy importante para el relato apuntar a esa desigualdad y los privilegios de una minoría. “Es algo con lo que convive la gente de nuestra edad. La serie viene a reflexionar sobre la idea de que vienes de donde vienes y eres quien eres”.
Rechazo a lo aspiracional
Mientras que en Cardo aparecen carteles en medio de la pantalla que desvelan el pensamiento interno de su protagonista, en Todo lo otro, es la voz de Alberto Casado (Pantomima Full) quien describe de forma bastante cruel lo que le ocurre a Dafne, la protagonista de la serie.
Esta producción de Mandarina para WarnerMedia está escrita, dirigida y protagonizada por Abril Zamora (39 años) y se estrena este 26 de octubre, coincidiendo con el lanzamiento de su plataforma, HBO Max España. “No busco crear un retrato generacional ni reflejar la crisis de los 30, porque yo llevo en crisis desde los 15″, apunta su creadora, aunque sí enmarca en un contexto actual lo que le ocurre a “un grupo muy concreto de treintañeros”, atrapados en vidas que no eran las que soñaban “porque a la gente de nuestra edad nos han obligado a compararnos con nuestros padres”. Para ganar autenticidad con el resto del reparto, la creadora se ha rodeado de actores que conoce y ha intentado llevar a la ficción la forma en la que se relaciona con ellos en la vida real.
Este relato con vocación universal rechaza también lo aspiracional y la idea de amor romántico. En él no hay trabajos de oficina ni profesiones artísticas y, a veces, las prendas que lucen sus personajes sencillamente no combinan. Porque la propia Zamora, cocreadora también de la comedia Señoras del (h)ampa, es consciente de estar tan perdida como su personaje. “Ya no soy tan ambiciosa en el trabajo como antes. Ahora estoy mucho más relajada. Quizá el año que viene me toque poner copas. Como tanta otra gente, estoy preparada para que tenga que ser así”, asegura.
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