La Junta de Andalucía acelera los cambios en Canal Sur

Si no hay acuerdo de casi todas las formaciones, Vox tendrá la llave.

El Gobierno andaluz de PP y Ciudadanos quiere meter la marcha rápida para cambiar Canal Sur, que cumple 30 años el jueves. No será fácil, porque requiere consensos amplios, pero la Junta de Andalucía está dispuesta, llegado el caso, a modificar la ley actual y rebajar las mayorías cualificadas exigidas ahora para elegir al director general y al consejo de administración de la cadena autonómica por el requisito de mayoría absoluta (55 de los 109 escaños). Si no hay acuerdo de casi todas las formaciones, Vox tendrá la llave.

Una entrevista en un programa de Canal Sur TV.Europa Press

La situación en la Radio y Televisión de Andalucía (RTVA) es de bloqueo político. Ni el máximo responsable de la empresa ni el consejo de administración responden a la representación parlamentaria actual, ni siquiera a la anterior. Lo mismo ocurre con órganos como el Consejo Audiovisual, la Cámara de Cuentas y el Defensor del Pueblo. Todos están pendientes de renovación. En el anterior mandato, PSOE, en el Gobierno, y PP e IU, en la oposición, estaban cómodos así porque entendían que el cambio les perjudicab...

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La situación en la Radio y Televisión de Andalucía (RTVA) es de bloqueo político. Ni el máximo responsable de la empresa ni el consejo de administración responden a la representación parlamentaria actual, ni siquiera a la anterior. Lo mismo ocurre con órganos como el Consejo Audiovisual, la Cámara de Cuentas y el Defensor del Pueblo. Todos están pendientes de renovación. En el anterior mandato, PSOE, en el Gobierno, y PP e IU, en la oposición, estaban cómodos así porque entendían que el cambio les perjudicaba. Los otros dos partidos, Podemos y Ciudadanos, tampoco apretaron para estar presentes, porque consideraban de mal gusto estrenarse pidiendo sillones en órganos de control.

El Gobierno de PP y Ciudadanos pretende acabar ya con esta anomalía democrática, pero empezando de manera “urgente” por RTVA y el Consejo Audiovisual. El pasado jueves el vicepresidente de la Junta, Juan Marín (Ciudadanos), y el consejero de la Presidencia, Elías Bendodo (PP), mantuvieron entrevistas con los portavoces del PSOE, Mario Jiménez; Adelante Andalucía, Antonio Maíllo, y Vox, Francisco Serrano.

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“Todos los grupos ven urgente y una necesidad los cambios, porque es intolerable que no haya normalidad democrática en estas instituciones”, aseguró Marín. El Gobierno presentará en dos semanas más detalles de su propuesta que pasa por la drástica reducción de miembros en el consejo de administración de RTVA (ahora hay 15, con tres bajas no cubiertas) y en el Consejo Audiovisual (son 11 y hay dos bajas).

La otra exigencia del Gobierno es que la mayoría presente en la Mesa del Parlamento, donde la derecha suma más que la izquierda, se vea reflejada en esas instituciones con el voto ponderado. El Ejecutivo autónomo quiere dejar el Audiovisual en cinco sillones y también el consejo de RTVA. Los grupos están de acuerdo en la rebaja, pero no con esos números.

“Esto hay que hacerlo ya, pero si no hay acuerdo iremos a la reforma de la ley”, advierte el vicepresidente andaluz. Fuentes del PSOE adelantan su rechazo. El cambio supondría rebajar las mayorías cualificadas exigidas ahora por la mayoría absoluta, según fuentes del Gobierno. Los dos partidos de derechas (PP, Ciudadanos) y la ultraderecha de Vox suman 59 escaños. Para elegir el consejo de administración se exigen tres quintos (66) y para el director de RTVA, dos tercios en primera votación (73 diputados) y tres quintos en la segunda.

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El Gobierno andaluz es consciente de la preocupación en la plantilla de Canal Sur, de 1.445 trabajadores. Fue Vox el que planteó en la negociación de investidura con el PP reducir los costes en la RTVA en un 50% y eliminar el Consejo Audiovisual. Nada de eso figura en el acuerdo final, que aboga por “reducir el gasto, mejorar la eficiencia y racionalizar los recursos de RTVA y garantizar el servicio público y la neutralidad ideológica e informativa”.

El Ejecutivo quiere dejar en manos de la próxima dirección esta misión. Las fuentes consultadas aseguran que no apuestan por despidos y dicen que no preocupan “los informativos”: “En las campañas electorales el tiempo está muy tasado y minutado”.

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