Ángel Gabilondo reclama diálogo para solucionar la crisis catalana

El portavoz del PSOE en la Asamblea de Madrid, Ángel Gabilondo, ha reclamado este sábado diálogo para solucionar la crisis catalana. "¿Dónde están los espacios de diálogo? ¡No hay mesas para dialogar! Hay desafíos, desplantes e inquietud social. Estoy seguro de que se producirá y pido que se produzca", ha afirmado esperanzado. Gabilondo se ha unido desde Córdoba al exjuez Baltasar Garzón, que el viernes exigió entendimiento político para solucionar la crisis del independentismo catalán.

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El portavoz del PSOE en la Asamblea de Madrid, Ángel Gabilondo, ha reclamado este sábado diálogo para solucionar la crisis catalana. "¿Dónde están los espacios de diálogo? ¡No hay mesas para dialogar! Hay desafíos, desplantes e inquietud social. Estoy seguro de que se producirá y pido que se produzca", ha afirmado esperanzado. Gabilondo se ha unido desde Córdoba al exjuez Baltasar Garzón, que el viernes exigió entendimiento político para solucionar la crisis del independentismo catalán.

Ángel Gabilondo ha aclarado su vínculo y afecto hacia Cataluña: "Yo quiero vivir con los catalanes y para eso tenemos que crear las condiciones. Ese referéndum debería desconvocarse, pero a la vez hay que crear condiciones para un diálogo en las instituciones sobre el modelo territorial, un debate imprescindible sobre la generación de espacios políticos distintos". "Con ellos somos más y mejores. Alguien ha hecho algo mal aquí, y no ha sido uno, al menos dos. Y yo me sé nombres", ha afirmado jocoso.

Gabilondo ha desenfundado su perfil más reflexivo e irónico como catedrático de Metafísica para aportar lucidez En un mar de dudas, título de la charla que mantuvo con el adjunto al director de EL PAÍS Juan Cruz en el congreso del bienestar, organizado por la Cadena Ser.

El catedrático ha hecho un mal diagnóstico de la temperatura de la sociedad catalana: "Me temo que ese es un problema muy grave, porque cuando llega el corazón de la vida social a las cenas familiares, el asunto es difícil porque ya no se resuelve diciendo a partir del día 1 vamos a llevarnos bien. Hace falta mucho tiempo para recomponer los afectos". Y abundó: "Cuando el tejido social se resiente hace falta una labor educativa de años".

La noche del viernes, tanto el exjuez Baltasar Garzón como Íñigo Errejón (Podemos) insistieron en esa petición de tender puentes de diálogo como solución al independentismo catalán. Garzón criticó con dureza las soluciones judiciales para solucionar el conflicto y censuró la actuación de la Fiscalía General, que tildó de "altamente cuestionable", por "criminalizar" a los 700 alcaldes que apoyan el referéndum en Cataluña al citarles como investigados "cuando aún no han cometido delito".

A tres días de que el Gobierno incumpla su compromiso para acoger los 17.337 refugiados que prometió a Bruselas, Gabilondo ha censurado la inacción con una breve pregunta: "¿Dónde están? Hemos puesto fronteras porque creemos que el que viene es un enemigo hostil a quitarnos el trabajo. Pues ellos nos ayudan a sacar el país adelante. Es un dolor ver el Mediterráneo como sepultura de tantas personas", recordó.

A Gabilondo, una maestra canaria le ha planteado la realidad de que en algunas aulas uno de cada dos alumnos abandona el colegio sin título. "La estructura socioeconómica del país influye en el fracaso escolar, y tenemos un país de servicios entregado a la restauración y el turismo. Un país debe poner la educación en el corazón de la economía. España será lo que sea su educación. Y esto significa las convicciones (…) Nos pasamos el año hablando de la educación y luego vienen los presupuestos y ahí se ve lo que pensamos", ha alertado.

En paralelo y en tiempos de la posverdad, la periodista Marta Fernández ha moderado un debate sobre periodismo y abrió fuego al recordar el término coloquial de paparrucha que le enseñó su abuela: noticia falsa y desatinada de un suceso, esparcida entre el vulgo. A continuación, la catedrática de Ética Adela Cortina ha disparado contra la obsesión de seguir el chorro informativo sin reflexión: "Vivimos un encarnizamiento informativo, veo a gente que se pasa todo el día con el móvil con informaciones que no pueden digerir, y eso no puede transformarse en conocimiento apropiado. Conectarse a través de las redes no es comunicarse. Información no es conocimiento".

Mientras, José Manuel Calvo, director adjunto de coordinación editorial de EL PAÍS ha definido el último año como "tiempos revueltos". "Los últimos meses han sido tiempos buenos para las noticias con Trump y el Brexit, pero no para el periodismo ¿Estamos preparados para las noticias falsas? Seguramente no". "Hoy no nos sirven las herramientas habituales del periodismo", remató.