Un ‘hooligan’ del Pontevedra, responsable de la agresión a Rajoy
El joven que agredió a Mariano Rajoy de un puñetazo es un ultra del equipo gallego
Andrés V. F. tiene 17 años y desde ayer es y será el joven que le pegó un puñetazo al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. “Estoy muy contento de lo que he hecho”, le dijo a la policía tras ser detenido en medio del tumulto de la comitiva que acompañaba al líder del PP en las inmediaciones de la iglesia de La Peregrina, en Pontevedra.
Fuentes policiales aseguraron que no mostró el más mínimo gesto de arrepentimiento, sino todo lo contrario. “Insistía en que estaba muy contento y que volver...
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Andrés V. F. tiene 17 años y desde ayer es y será el joven que le pegó un puñetazo al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. “Estoy muy contento de lo que he hecho”, le dijo a la policía tras ser detenido en medio del tumulto de la comitiva que acompañaba al líder del PP en las inmediaciones de la iglesia de La Peregrina, en Pontevedra.
Fuentes policiales aseguraron que no mostró el más mínimo gesto de arrepentimiento, sino todo lo contrario. “Insistía en que estaba muy contento y que volvería a hacerlo”, señalaron. Las mismas fuentes concretaron que, aunque el joven no tiene antecedentes penales, “pertenece a Mocidade Granate, un grupo de hooligans del Pontevedra no excesivamente violento”. En las redes sociales ya había manifestado hace tiempo su intención de atentar contra una sede del PP.
El joven, que estudió en el colegio privado Los Sauces y que ahora va al instituto, permanecía anoche en dependencias policiales a la espera de pasar a disposición del Juzgado de Menores. Su padre trabaja en la Cámara de Comercio y su madre es asesora laboral, según fuentes cercanas a la investigación. “Parece un chico descentrado y poco consciente de lo que ha hecho”, agregaron esas fuentes.
Durante el paseo de la comitiva, el agresor, vestido de negro y con el pelo rapado, se situó a la izquierda del presidente. Permaneció a su lado durante un rato, le hizo una fotografía con su móvil y después le asestó un tremendo puñetazo con el brazo izquierdo, según el relato de un testigo.
El detenido se enfrenta ahora a un delito de atentado contra un presidente del Gobierno, por el que podría ser condenado hasta a seis años de prisión según el Código Penal. Sin embargo, al ser menor de edad, esa pena se vería previsiblemente rebajada.