Llegan tarde y mal
Eso de que “nunca es tarde si la dicha es buena” no vale. Las medidas tomadas por la Comunidad de Madrid llegan demasiado tarde. La gestión del Gobierno madrileño ha sido tardía, errónea e, incluso, insuficiente ahora. El neoliberalismo de dicho Gobierno no le deja ver la realidad, y la realidad es que las medidas siempre fueron laxas y no acordes con la gravedad de la pandemia. El resultado es una situación de alarma gravísima, aunque la presidenta insista en que “hay que evitar a toda costa el estado de alarma”. ¿A costa de nuestra salud, de nuestra vida? Ocúpense de dotar a la sanidad de pe...
Eso de que “nunca es tarde si la dicha es buena” no vale. Las medidas tomadas por la Comunidad de Madrid llegan demasiado tarde. La gestión del Gobierno madrileño ha sido tardía, errónea e, incluso, insuficiente ahora. El neoliberalismo de dicho Gobierno no le deja ver la realidad, y la realidad es que las medidas siempre fueron laxas y no acordes con la gravedad de la pandemia. El resultado es una situación de alarma gravísima, aunque la presidenta insista en que “hay que evitar a toda costa el estado de alarma”. ¿A costa de nuestra salud, de nuestra vida? Ocúpense de dotar a la sanidad de personal suficiente, de centros, de dotar a los sanitarios de los medios necesarios; no jueguen con nuestra salud y nuestras vidas llevando al sistema sanitario al colapso, pongan rastreadores suficientes. Y hagan caso del clamor de médicos, enfermeros, científicos, epidemiólogos. Llegan tarde y mal. La ciudadanía exige remedio inmediato y depuración de responsabilidades.
Ángel Villegas Bravo. Madrid