Pacto mínimo
Los acuerdos de oposición y Gobierno para la pospandemia fallan en lo social
El pleno del Congreso aprobó ayer la mayoría de las conclusiones de la comisión parlamentaria para la reconstrucción social y económica, creada para afrontar el impacto de la covid-19, lanzando así a la Unión Europea un mensaje de unidad y voluntad de acuerdo. Lo hizo al día siguiente de que Bruselas aprobara el mayor paquete económico y presupuestario de la historia comunitaria, del que España se beneficiará con 140.000 millones de euros. El consenso alcanzado en el Parlamento, aunque parcial, es una buena noticia. Habría sido muy difícil explicar a la opinión pública cómo 27 Estados con gran...
El pleno del Congreso aprobó ayer la mayoría de las conclusiones de la comisión parlamentaria para la reconstrucción social y económica, creada para afrontar el impacto de la covid-19, lanzando así a la Unión Europea un mensaje de unidad y voluntad de acuerdo. Lo hizo al día siguiente de que Bruselas aprobara el mayor paquete económico y presupuestario de la historia comunitaria, del que España se beneficiará con 140.000 millones de euros. El consenso alcanzado en el Parlamento, aunque parcial, es una buena noticia. Habría sido muy difícil explicar a la opinión pública cómo 27 Estados con grandes diferencias entre sí son capaces finalmente de llegar a un acuerdo, mientras un número muy inferior de partidos del mismo país no consigue un pacto de mínimos.
Pero el consenso no fue completo. La Cámara dio el visto bueno a tres de los cuatro bloques del dictamen —reactivación económica, Unión Europea y sanidad pública—, y dejó fuera uno fundamental: las políticas sociales. Sin embargo horas después se conoció que la votación sobre el dictamen de reconstrucción económica debía repetirse por un error de una diputada de Podemos al emitir su voto. Partido Popular y Ciudadanos solo apoyaron las propuestas de la comisión sobre sanidad y Europa, mientras que las de mejora del Estado de bienestar fueron rechazadas por ambas formaciones, en lo que coincidieron con el ultraderechista Vox (y también con el PNV). No es un detalle menor, pues ese rechazo de las políticas sociales muestra la importancia relativa que les conceden, ignorando los costes que para su identidad les acarrea esa confluencia. Aunque en estos momentos se cubran eficazmente dichas necesidades, habría sido deseable un acuerdo político sobre cuál debe ser la base imprescindible de ayudas sociales.
Tanto el PSOE como el PP saben que el acuerdo sobre los fundamentos de la reconstrucción es posible y, sin embargo, volvieron a mostrar su incongruencia con el tono bronco que exhibieron durante la sesión de control al Gobierno previa a la aprobación de las medidas de la Comisión, donde votaron juntos a favor de los bloques sobre sanidad y Europa. El presidente del Gobierno reprochó al líder de la oposición el inexistente apoyo recibido estos días durante las duras negociaciones en Bruselas. Pablo Casado replicó que el acuerdo había sido posible gracias al Partido Popular Europeo, aunque se apresuró a retorcer el término al afirmar que, en realidad, se trata de un rescate. Sería deseable que Casado aclare esta contradicción, y si seguirá manteniendo la estrategia de apoyar y llegar a acuerdos con el Gobierno —como hizo cuando el estado de alarma—, manteniendo al tiempo la crispación parlamentaria y la retórica polarizadora.
El mensaje enviado a España tras la cumbre es que no hay otra vía que la del acuerdo en tiempos de pandemia. A lo que España debería responder con una determinación clara de que no desaprovechará esta oportunidad de oro. Para iniciar el camino de la reconstrucción será necesario llegar a pactos que garanticen un Gobierno estable y una oposición crítica, pero comprometida con la gobernabilidad. Solo así este país podrá extraer todos los beneficios que el paquete europeo brinda para la recuperación económica, la competitividad empresarial y el necesario rescate social de los sectores más desvalidos. Resulta imperativo alcanzar un consenso, básico, sobre la generalidad de los grandes proyectos, medidas y reformas que deben ponerse en marcha. Porque habrá que cumplir con los requisitos de los subsidios europeos.
El contenido de este editorial ha sido modificado al conocerse la necesidad de repetir la votación del dictamen de la comisión sobre reconstrucción económica