Hacia las inversiones publicitarias inteligentes
La IA ha estado siempre presente en el marketing y la publicidad, revolucionando el sector a través de motores de búsqueda, las redes sociales o las plataformas de compra programática por poner algunos ejemplos representativos. Es cierto que, con la llegada y popularización de ChatGPT en el último año, la IA generativa ha adquirido una mayor relevancia en nuestras vidas, demostrando su impacto de forma más palpable. Y es que ahora los consumidores también pueden interactuar con sistemas basados en IA para obtener respuestas detalladas y contextualizadas en lugar de una lista de resultad...
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La IA ha estado siempre presente en el marketing y la publicidad, revolucionando el sector a través de motores de búsqueda, las redes sociales o las plataformas de compra programática por poner algunos ejemplos representativos. Es cierto que, con la llegada y popularización de ChatGPT en el último año, la IA generativa ha adquirido una mayor relevancia en nuestras vidas, demostrando su impacto de forma más palpable. Y es que ahora los consumidores también pueden interactuar con sistemas basados en IA para obtener respuestas detalladas y contextualizadas en lugar de una lista de resultados.
Entre los múltiples usos, esta tecnología nos está ayudando, por ejemplo, a la personalización de anuncios, ya sea a través de la publicidad contextual, la segmentación de usuarios o la generación de contenido personalizado en tiempo real.
En el ámbito concreto de la publicidad programática, una de las fórmulas más efectivas de llegar a públicos específicos, la IA nos está permitiendo optimizar las pujas en todas las plataformas que entran en juego en cualquier campaña, gracias a la utilización de algoritmos basados en indicadores como el momento, el contexto, la geografía, los datos sociodemográficos o los intereses de los usuarios. De esta manera, somos capaces de rentabilizar al máximo la inversión de nuestros clientes en todo momento.
La obtención de insights es otra de las grandes aportaciones de la IA. Gracias a esta tecnología y a la automatización de modelos de marketing mix y atribución, podemos reducir el sesgo humano en el proceso de modelado y trabajar con datos más detallados que nos sirven para recomendar a nuestros anunciantes dónde y cuánto tienen que invertir. A todo ello tenemos que sumar otras capacidades como la generación de todo tipo de contenidos y creatividades (que podemos hacer en un tiempo récord), el análisis de comentarios que publican los usuarios en redes sociales o la medición de audiencias mediante el procesamiento de audio, entre otros usos que llegarán muy pronto.
Todas estas aplicaciones y las que vendrán en los próximos meses son prueba de que la IA está suponiendo una auténtica disrupción en nuestro sector y tenemos que abrazarla para mejorar nuestro trabajo diario. Donde algunos ven esta tecnología como una amenaza para los profesionales por el temor a ser reemplazados, otros vemos una oportunidad para que nuestros equipos puedan desprenderse de tareas rutinarias y puedan aportar valor y diferenciación a nuestros clientes, tomando decisiones comerciales que por ahora las máquinas no pueden asumir.