CC OO pide la ampliación de las imputaciones contra Nacho Cano por otro delito de “promoción de la inmigración clandestina”
Dos jueces de lo contencioso autorizan la estancia en España de dos de los ‘becarios’ que recurrieron la decisión de la Delegación del Gobierno de Madrid
El caso del excomponente de Mecano, Nacho Cano, procesado por un delito de favorecimiento de la inmigración irregular y contra los derechos de los trabajadores extranjeros, sigue engordando las carpetas de la juez del juzgado número 19 de Plaza Castilla. Mientras la defensa del promotor musical —y de sus tres colaboradoras también imputadas—, presentaba el pasado jueves un documento con unos mensajes enviados por la denunciante, la mexicana de 28 años Lesly Ochoa, en los que le pedía a Cano 6.000 euros “por daños morales” y una carta de recomendación “para no proceder legalmente” contra él; ahora, el sindicato Comisiones Obreras (CC.OO), personado como acusación particular en la causa, solicita que se amplíen las imputaciones contra los acusados por un presunto delito de “promoción de la inmigración clandestina”.
“... De la debida instrucción de las presentes actuaciones y de los hechos investigados -a juicio de esta representación- cabe deducir asimismo -al menos indiciariamente- la comisión de un delito de promoción o facilitación de la inmigración clandestina con destino a España , previsto y penado en el artículo 318 bis del vigente Código Penal”, reza el escrito enviado a la juez por el equipo jurídico del sindicato. “Por tráfico ilegal ha venido entendiéndose cualquier movimiento de personas extranjeras que trate de burlar la legislación española sobre inmigración”, reza el artículo.
Según el atestado policial, los 17 supuestos “becarios” mexicanos que trabajaron presuntamente de manera ilegal en el espectáculo Malinche de Nacho Cano durante meses, fueron aleccionados por Roxana García Drexel en un grupo de WhatsApp (”Chat México Becas Malinche”) sobre cómo debían de llegar a Madrid, haciéndose pasar por turistas, portando guías de Madrid, viniendo por separado como si no se conocieran, con billete de vuelta, a pesar de que su idea original era quedarse en España por un periodo de diez meses de presunta formación dentro del espectáculo de Cano. La policía comprobó que los supuestos “estudiantes” formaban parte del elenco de artistas que actuaban en el espectáculo de manera habitual, que no tenían permiso de estudios ni de residencia en España porque les había sido denegado, que no habían sido dados de alta en la Seguridad Social y que se les pagaba en efectivo un sueldo de 500 euros mensuales, que no les permitía llegar a fin de mes, pese a que tenían cubierto el alojamiento y una comida diaria.
El pasado viernes, y después de que los becarios abandonaran España el 31 de agosto sin haber prestado declaración ante la juez aún, se conoció que dos jueces de los juzgados de lo contencioso administrativo habían autorizado al menos la estancia de dos de esos supuestos estudiantes, que presentaron un recurso contra la obligatoriedad de abandonar el país dictaminada por la Delegación del Gobierno.
“Esta representación ha venido asistiendo —desde el comienzo de las presentes actuaciones— a intervenciones de la representación letrada de los investigados y del propio del señor Cano en diversos medios de comunicación”, señala en su último escrito al juez CC.OO. “Tanto televisivos como escritos, donde se trata de poner en cuestión a la propia testigo doña Lesly Ochoa, intentando menoscabar su reputación y credibilidad y —entiende esta representación— su propia dignidad e imagen personal, comentando cuestiones de su vida privada y personal ajenas totalmente al objeto de esta causa”, advierten desde el sindicato y evidencian la coincidencia entre las publicaciones en medios de comunicación y las aportaciones de la defensa de Nacho cano a la causa. Según la acusación particular, eso “genera una distorsión de la debida discreción procesal de las partes, tendente a generar efectos extraprocesales adversos para uno de los testigos y – en definitiva “ruido” (o espectáculo) mediático.
Mientras LesLy Ochoa permanece en España como peticionaria de asilo, los otros 16 becarios abandonaron España el pasado 31 de agosto, tras interponer varias denuncias contra las actuaciones policiales en el desarrollo de la investigación y solicitar “órdenes de alejamiento” de los policías que los interrogaron. Los “estudiantes” habían sido citados a declarar el pasado 29 de agosto, pero su comparecencia fue suspendida ante la imposibilidad de localizar a Roxana García Drexel, que permanece en paradero desconocido y que es una de las principales imputadas por ser quien coordinaba el chat de WhatsApp en el que se les daban las instrucciones a los “becarios”. Su ausencia “impedía que se garantizara “la posibilidad de contradicción entre las partes”, según explicaba en su auto el juez. Es posible que los becarios tengan ahora que declarar por videoconferencia desde México.
De momento, los estudiantes llegaron triunfantes a México, aclamados por amigos y familiares que les recibieron con pancartas y vítores en el aeropuerto. Entrevistados por los medios de comunicación mostraban su agradecimiento a todo el aprendizaje y conocimiento recibido del “maestro Cano”: “Nos dio una formación muy completa, llena de canto, de baile urbano, flamenco, actuación... Y, sobre todo, el bonito equipo que tiene Malinche que es una familia”, decía una. “Yo nunca me imaginé poder convivir con él, al grado de tener esa confianza y que se preocupara por nosotros, tenerlo a él como maestro es una experiencia que, en lo personal, jamás voy a olvidar”, comentaba otro ante las cámaras. “Yo le quiero agradecer mucho, que Dios lo bendiga, que esté siempre con él y que siga ayudando a la gente”, concluía un tercero a su llegada. Los medios mexicanos ya anunciaban la llegada del musical La Malinche a México y daban por hecho que “estos jóvenes serán parte fundamental del nuevo montaje”. “Obviamente, vamos a estar presentes todos nosotros, se espera que sea el próximo año, todavía no se sabe el mes, pero ese estreno se viene fuerte y con todo”, confirmaba una de las “becarias”.
En España, pese a encontrarse inmerso en este polémico proceso judicial, ha vuelto Malinche, este fin de semana pero ahora sin becarios.