Un hombre trata de asfixiar a su mujer en un parque y lo detiene un policía que paseaba al perro

Un policía nacional con más de 30 años de servicio a sus espaldas paseaba a su perro este martes por la noche por el parque de la Volatería, en el popular barrio de Pan Bendito de Madrid, cuando oyó unos gritos inusuales. A una distancia de 100 metros pudo ver a dos personas en un banco discutiendo, forcejeando. “En ese momento no sabía si eran hombres, mujeres ni qué estaba pasando exactamente”, cuenta este agente que prefiere permanecer en el anonimato. Aceleró el paso y, cuando se encontraba a unos 50 metros, ...

Un policía nacional con más de 30 años de servicio a sus espaldas paseaba a su perro este martes por la noche por el parque de la Volatería, en el popular barrio de Pan Bendito de Madrid, cuando oyó unos gritos inusuales. A una distancia de 100 metros pudo ver a dos personas en un banco discutiendo, forcejeando. “En ese momento no sabía si eran hombres, mujeres ni qué estaba pasando exactamente”, cuenta este agente que prefiere permanecer en el anonimato. Aceleró el paso y, cuando se encontraba a unos 50 metros, vio que la agredida era una mujer, que cayó desplomada al suelo. El agente gritó y el hombre del banco agarró el carito de bebé que estaba junto a ellos y echó a correr. La carrera no duró muchó, en apenas 10 metros el policía lo detuvo y lo inmovilizó en el suelo hasta que llegaron sus compañeros. El policía tuvo ocasión incluso de cachearlo y descubrió una navaja tipo mariposa en el bolsillo derecho de su pantalón.

“Cuando lo tenía en el suelo, se puso a llorar y a hablar de su hijo. Mientras, la chica fue recobrando el sentido, estaba muy magullada”, resume el policía. En el cuello de la mujer, de 20 años, todavía se podía ver nítidamente la marca enrojecida de los cinco dedos de su agresor perfectamente delineados. Su pareja, de 25 años, acumula una decena de antecedentes por robos con violencia, pero no consta ninguna denuncia por malos tratos ni órdenes de alejamiento. En esa ocasión, sí que existe un atestado de la agresión y, quiera o no la víctima seguir adelante con la denuncia, el proceso continúa su curso de oficio. El hombre fue, de hecho, enviado el jueves a prisión comunicada y sin fianza. El magistrado titular del Juzgado de Violencia Sobre la Mujer número 8 de Madrid le imputa un delito de homicidio en grado de tentativa.

El policía suele pasear cada noche por ese parque a su pastor alemán al acabar su jornada laboral. El agente forma parte del equipo del Congreso de los Diputados. Ese día era uno de tantos, en el que había salido de su turno de trabajo apenas una hora antes, a las nueve y media. Lo único que llevaba encima era su placa, ni grilletes ni el arma reglamentaria. Al escuchar los gritos y ver el forcejeo, no dudó en echar a correr seguido de su perro. El agresor y su víctima estaban acompañados, además de su bebé de un año, de la madre de ella y de otro perro de gran tamaño. “Cuando me identifqué como policía, él apretó un poco a correr, pero con el carrito del bebé no era muy rápido, así que pude inmovilizarlo pronto”, relata. Poco después llegó la ambulancia del Samur, que atendió a la mujer y la trasladó a un centro hospitalario, y los miembros de la Unidad de Prevención y Reacción, que trasladaron al detenido a dependencias policiales.

Esta es una de las agresiones de hombres a sus parejas o exparejas que se han conocido en las últimas dos semanas en Madrid. El lunes, un guardia civil detuvo a un hombre en el barrio de Villaverde que acababa de intentar taladrar la cabeza a su pareja. La policía nacional detuvo también este lunes a un hombre que había tratado de acuchillar a su exnovia, de la que tenía una orden de alejamiento, en la parada del metro de Lucero el 2 de julio. También ingresó en prisión el pasado jueves otro agresor de 37 años que asestó varias puñaladas a su novia por la calle en el distrito de Usera, acusado de homicidio en grado de tentativa. La Policía Municipal arrestó el martes a un hombre que agredió, trató de violar y robó tarjetas y dinero a su novia, con la que convivía en una casa del distrito de Latina.

El teléfono 016 atiende a las víctimas de violencia machista, a sus familias y a su entorno las 24 horas del día, todos los días del año, en 52 idiomas diferentes. El número no queda registrado en la factura telefónica, pero hay que borrar la llamada del dispositivo. También se puede contactar a través del correo electrónico 016-online@igualdad.gob.es y por WhatsApp en el número 600 000 016. Los menores pueden dirigirse al teléfono de la Fundación ANAR 900 20 20 10. Si es una situación de emergencia, se puede llamar al 112 o a los teléfonos de la Policía Nacional (091) y de la Guardia Civil (062). Y en caso de no poder llamar, se puede recurrir a la aplicación ALERTCOPS, desde la que se envía una señal de alerta a la Policía con geolocalización.

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