Almeida apuntala su mandato con el apoyo de Vox a los presupuestos

El gobierno de PP y Ciudadanos llegó al pleno para debatir las cuentas con el acuerdo firmado media hora antes con la ultraderecha

El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, junto con el líder de Vox en Madrid, Javier Ortega Smith, durante la firma del acuerdo de presupuestos-Chema Moya (EFE)

Todo el pescado estaba vendido antes de empezar. El prólogo del pleno extraordinario para aprobar de este viernes los presupuestos del Ayuntamiento de Madrid de 2021 fue la firma del apoyo a los mismos de Vox y el equipo de gobierno de Partido Popular y Ciudadanos. De esta forma, y pese a contar solo con cuatro concejales, queda apuntalado el respaldo de la ultraderecha como principal pilar del ejecutivo en los dos años y medio que restan de mandato. Al mismo tiempo, se diluye la posibilidad de mantener el clima de concordia que impuso la pandemia en una de las ciudades más golpeadas del mundo...

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Todo el pescado estaba vendido antes de empezar. El prólogo del pleno extraordinario para aprobar de este viernes los presupuestos del Ayuntamiento de Madrid de 2021 fue la firma del apoyo a los mismos de Vox y el equipo de gobierno de Partido Popular y Ciudadanos. De esta forma, y pese a contar solo con cuatro concejales, queda apuntalado el respaldo de la ultraderecha como principal pilar del ejecutivo en los dos años y medio que restan de mandato. Al mismo tiempo, se diluye la posibilidad de mantener el clima de concordia que impuso la pandemia en una de las ciudades más golpeadas del mundo con los Acuerdos de la Villa.

La foto protocolaria tuvo lugar media hora antes del comienzo de la sesión pero solo contó con dos protagonistas: el alcalde José Luis Martínez-Almeida (PP) y el portavoz del grupo de Vox, Javier Ortega Smith. No posó con ellos la vicealcaldesa Begoña Villacís, de Ciudadanos, pese a que ella misma calificó las cuentas como “las más importantes de la historia de la democracia”. El primer edil justifica esta “escenificación” sin Ciudadanos porque forman “un único gobierno con dos partidos” con “una sola cara y una sola voz”. “A nosotros nos interesa menos la escenificación que lo que se vota”, respondió Villacís a preguntas de los reporteros tras el pleno. “Las fotos y tal nos parece menos relevante”, añadió.

En cualquier caso, la escena de esa firma previa al debate plenario aparta al ejecutivo municipal de la senda del consenso de los Acuerdos de la Villa que todos los grupos municipales sellaron en verano. La polarización política fue desterrada en las peores semanas de la pandemia. La concordia entre todo el abanico político fue el pilar de esos pactos que debían marcar la senda de consenso para salir de la crisis. Pero las diferencias han vuelto a hacerse fuertes en el Ayuntamiento pese a que el ejecutivo recuerda que el 10% de los presupuestos del año próximo van destinados a satisfacer los Acuerdos de la Villa. Villacís señaló que acordarlos fue “una lección a España entera” y que fue “gracias a una oposición generosa”, a la que culpa ahora de no querer dar continuidad a ese espíritu. Sin sorpresas en los discursos y las posiciones, algo más de tres horas después de abrirse el debate, las cuentas quedaron aprobadas sin guerras dialécticas ni sobresaltos.

Sobre la mesa, 5.066 millones, un 8% más que en 2020, de los que se destinarán 488 millones a inversiones, 169 millones más que en las anteriores cuentas. Unos 500 millones, aproximadamente el 10%, se enfocarán al cumplimiento de los Acuerdos de la Villa. Almeida, tras estampar su firma con Vox, agradeció el “compromiso con la ciudad de Madrid” y “la generosidad y altura de miras” de esta formación para lograr que las cuentas salgan adelante. La oposición de Más Madrid y PSOE denuncia que la desigualdad territorial será mayor en la capital en 2021 y los vulnerables tendrán mucho más complicado sobrevivir.

En paralelo a las palabras del alcalde, Vox se deshizo también en halagos después de abstenerse hace un año, cuando los presupuestos salieron adelante porque Más Madrid acudió por error al pleno con una edil menos. Ortega Smith aplaudió que Almeida impida con estas cuentas “los chiringuitos” y “las subvenciones a dedo” de la izquierda, que según este concejal gobierna sobre “dogmas y mentiras” que impiden a las mujeres o los homosexuales sentirse de derechas. Arancha Cabello, la concejal económica de Vox, aplaude a su vez que hayan logrado incluir a los “varones” en los programas de violencia intrafamiliar y en los que combaten los abusos sexuales a menores.

Subvenciones

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La vicealcaldesa calificó de “bulos” de la oposición que los presupuestos dediquen menos dinero a las asociaciones que defienden los derechos LGTBI o luchan contra la violencia de género porque “no se ha reducido ni un solo euro” en esa parcela. Lo que sí ocurre, dijo, es que la tendencia es a pasar todas las subvenciones nominativas a libre concurrencia, es decir, que se abran a concurso y dejen de ser otorgadas directamente como era la “norma” en el anterior mandato. En los nuevos presupuestos hay sin embargo, entre otras, una subvención nominativa para la Fundación Madrina que ha impuesto Vox a PP y Ciudadanos, como denunció la oposición en el pleno.

La realidad para Más Madrid, el grupo con más representantes de la cámara, es que se ha dado la espalda a las asociaciones vecinales, las que defienden los derechos de personas LGTBI y feministas y se ha abierto la puerta al coche y al ladrillo en una ciudad que carece de modelo de futuro. “Sigan ustedes alimentando el monstruo”, comentó el concejal Jorge García Castaño refiriéndose a la creciente influencia de Vox en las decisiones del Ayuntamiento. La crisis, añadió, ha aumentado las desigualdades y los jóvenes de Madrid han de afrontar el creciente paro de 250.000 personas y unos precios de la vivienda inasumibles.

Sobre esos mismos argumentos y también sin sorpresas edificó su discurso el PSOE. Las cuentas se hallan lejos de las necesidades sociales y de una ciudad que apueste más por la nueva movilidad, denunció la concejal Enma López Araujo.

El alcalde se ha comprometido con Vox a reducir el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) del 0,46 al 0,456, acercándose algo al horizonte mínimo del 0,4. También se pondrán en marcha los trabajos del carril bici del eje Prado-Recoletos-Castellana, algo que también demanda la oposición y que cree que es una medida insuficiente de apoyo al sector de la bicicleta. Pero quizás el mayor calado ideológico de la firma estampada por Almeida y Ortega Smith sea la supresión de varias subvenciones nominativas y la creación de otras para distintas organizaciones religiosas. Otras iniciativas que recogen los presupuestos del año próximo en la capital son la finalización de las obras de Plaza de España, las obras del Nudo Norte en la confluencia del paseo de la Castellana y la M-30 o la nueva planta de materia orgánica de Valdemingómez.

Sin solución para los cortes de luz de la Cañada

El último pleno del Ayuntamiento de Madrid del año, posterior a la votación presupuestaria, rechazó ayer una propuesta de Más Madrid dirigida a subsanar los cortes de luz en la Cañada Real, mientras que el equipo de Gobierno ha defendido que se “ha ofrecido una alternativa de alojamiento temporal a todas las familias más vulnerables” y se han hecho 103 realojos. En el pleno de octubre, el Ayuntamiento aprobó por unanimidad una moción de urgencia por la que se comprometía a adoptar “soluciones de emergencia” para los cortes de luz que, desde hace 25 días, afectan al sector seis de la Cañada Real a causa de una solicitud de consumo excesiva para mantener plantaciones de marihuana, según fuentes policiales.

Más Madrid ha vuelto a traer al pleno de diciembre una propuesta para subsanar esos cortes de luz, y todos los concejales del grupo han iniciado sus intervenciones de la jornada mencionando los problemas en el asentamiento. La propuesta, que había sido enmendada por Ciudadanos, PSOE y Vox, ha sido rechazada con los votos en contra de Vox y los partidos del equipo de Gobierno (PP y Ciudadanos).

El delegado de Familias, Igualdad y Bienestar Social, Pepe Aniorte, ha considerado inviables algunos puntos de la propuesta y ha recalcado que “sin duda” es la Delegación del Gobierno en Madrid quien tiene que atajar ese problema. “No dudo que la Delegación está haciendo todo lo que puede, lo que espero para esas familias es que sea lo antes posible”, añadió.

Desde primeros de octubre, la falta de luz en los sectores V y VI ha afectado al menos a 4.500 vecinos, entre ellos unos 1.800 niños y niñas.

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