Hinds abraza el pop sin complejos

La banda madrileña publica 'The prettiest curse', su tercer álbum, que evoluciona de un sonido crudo de guitarras a una paleta sonora más sofisticada

La banda musical Hinds en Madrid.Jaime Villanueva

Las chicas de Hinds están de vuelta. Y esta vez han pegado un giro estilístico a sus canciones. Tras dos álbumes en los que apostaron por guitarras al estilo del quinteto neoyorquino The Strokes y un sonido crudo pertrechado por la reverb, su nuevo largo, The prettiest curse (Lucky Number), abandona las impurezas sonoras para abrazar un pop de corte más sofisticado. Fuera complejos. Letras más introspectivas, teclados y hasta momentos en castellano. Carlotta Cosials (guitarra y voz), Ana Perrote (guita...

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Las chicas de Hinds están de vuelta. Y esta vez han pegado un giro estilístico a sus canciones. Tras dos álbumes en los que apostaron por guitarras al estilo del quinteto neoyorquino The Strokes y un sonido crudo pertrechado por la reverb, su nuevo largo, The prettiest curse (Lucky Number), abandona las impurezas sonoras para abrazar un pop de corte más sofisticado. Fuera complejos. Letras más introspectivas, teclados y hasta momentos en castellano. Carlotta Cosials (guitarra y voz), Ana Perrote (guitarra y voz), Ade Martín (bajo) y Amber Grimbergen (batería) vuelven a la carga con el bagaje de ser una de las bandas españolas -y madrileñas- más internacionales.

Comenzaron a pergeñar el disco en enero del año pasado. En verano viajaron tres semanas a Los Ángeles (California) para cerrar un repertorio de canciones. Nunca habían empleado tanto tiempo en componer. “Con el cambio de manager (de Ground Control a Sonido Muchacho) decidimos parar pronto la gira del anterior álbum (I don’t run, publicado en 2018) y aprovechamos el tiempo. Siempre hemos escrito a contrarreloj y nos volvimos un poca locas”, cuentan Ana y Carlotta desde sus hogares en la capital a través de una videoconferencia durante el confinamiento. Terminaron con 19 canciones durante su estancia en un bungaló con porche, alquilado en Airbnb, y desde el que incluso fueron reconocidas por sus vecinos.

Los diez temas que pasaron la criba final fueron grabados en los estudios Bunker de Nueva York de la mano de Jennifer de Silvio, que ha trabajado con grupos como Porridge Radio, Bat for Lashes o Albert Hammond Jr. De Silvio, acostumbrada a estilos de cantantes pop y el mainstream de radio americana fue la clave para que la banda abrazara un sonido más refinado y accesible.

“Ella estaba harta de que todo fuera perfecto en sus producciones y flipó cuando nos vio gritar”, cuentan. Y el encuentro entre estos dos mundos funcionó: el encanto de la grasa de bar permanece, pero le han cambiado el aceite a la freidora para optar por técnicas y pases de paladar más afilado. Y el primer reflejo es la portada del álbum, obra de la artista madrileña Ouka Leele y donde posan en una imagen de mayor riqueza expresiva y que se aleja la pose universitaria de obras anteriores.

Para grabar emplearon tres semanas: “Por primera vez nos hemos enfrentando a un álbum con tiempo para tomar decisiones. Jenn es una crack de los sintes y de la improvisación. Mantenía un micro abierto para captar los momentos de espontaneidad.”, recuerdan. Una de las esencias de Hinds es la frescura con la que se presentan y que nada parece demasiado pensado. “A menudo no es fácil”, resumen.

El disco, que sufrió un retraso en la fecha de publicación por la pandemia de coronavirus, desvela cierta agitación sentimental con canciones como Boy, Come back and love me o su segundo sencillo Good bad times –”por primera es un trabajo más introspectivo en el que mezclamos el amor, la soledad y otros sentimientos”-, cuentan, o Just like kids (Miau) o Burn donde cantan sobre cómo les afecta la percepción externa, a menudo recelosa y sin fundamento. “Nos hemos quitado muchos prejuicios y cosas que nos daba vergüenza decir al componer tantas canciones”, apuran.

Y por primera vez cantan algunas líneas en español tras dos trabajos íntegros en inglés. “Teníamos ganas desde el anterior álbum, a pesar de que enfrentarse al papel en blanco es abrumador. Trabajábamos con un protocolo de escritura aprendido y en español te expones más. Toda la atención iba a estar en esas barras”, cuentan. Carlotta tampoco tenía un gusto definido sobre escuchar los sentimientos en castellano: “Me puse las pilas con el indie pop español (Los Planetas, Los Punsetes, La estrella de David, Perras on the beach…) para definir mi gusto”, relata.

El disco finaliza con una delicada pieza de aire melancólico titulada This moment forever (Este momento para siempre) que se aleja de los registros habitualmente guerreros de la banda para abrazar un sonido más cálido y una letra más nostálgica tras pasar por un momento áspero a finales de 2018 durante una gira en Inglaterra: “Fue horroroso. Pasamos frío, nos robaron el dinero del merchandising y lo intentaron con la furgoneta. Un día estábamos en casa y relativicé todo. Esas experiencias nos hacen mucho apreciar los momentos en Madrid. Siempre he sido fan del aspecto simpático de la rutina”, aclara Carlotta.

Portada del tercer disco de Hinds, 'The prettiest curse'.

Cambio de sello

Hinds fichó el verano pasado por Sonido Muchacho, sello y editorial liderado por Luis Fernández que lleva a grupos nacionales como Carolina Durante, La Trinidad, Sen Senra o Cupido. “Estamos contentísimas. Controla todas las necesidades del artista, está al día y trata igual de bien a todos los grupos”, cuentan Ana y Carlotta. Porque precisamente en España tienen recorrido por avanzar. “Es un territorio que hay que mimar mucho. Nos lo hemos tomado como que somos un grupo internacional, intentábamos tocar aquí y no veía nadie. La industria española es pequeña y cerrada. Queríamos a alguien que se centrara en ello”, explican.

Desde la publicación de Leave me alone, su primer largo en 2014, también han tenido tiempo de notar como los sectores más críticos aflojaban con ellas, vapuleadas desde el principio por su aparente falta de habilidad con los instrumentos y su despegue inmediato en países como Japón, Inglaterra o Estados Unidos. “Nos sentimos siento cada vez más arropadas en España. Empezamos con mal pie y la prensa se ha relejado mucho”, afirman.

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