La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha firmado este lunes el decreto de convocatoria de las elecciones del 28 de mayo con un importante cambio con respecto a los últimos comicios, celebrados en 2021: se elegirán 135 diputados a la Asamblea autonómica, en lugar de los 136 de hace dos años. La razón es que el estatuto de autonomía vincula el número de representantes a la evolución de la población de la Comunidad y Madrid ha perdido residentes, según los datos del Instituto Nacional de Estad...

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha firmado este lunes el decreto de convocatoria de las elecciones del 28 de mayo con un importante cambio con respecto a los últimos comicios, celebrados en 2021: se elegirán 135 diputados a la Asamblea autonómica, en lugar de los 136 de hace dos años. La razón es que el estatuto de autonomía vincula el número de representantes a la evolución de la población de la Comunidad y Madrid ha perdido residentes, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) a 1 de enero de 2022 (se toma como referencia el año anterior al de las elecciones). La consecuencia es que la mayoría absoluta pasa de 69 a 68 escaños, según aclaran en la Asamblea y el Gobierno regional. Con Díaz Ayuso destacada en todas las encuestas como favorita a la victoria, ¿puede ayudarle el cambio a obtener la mayoría absoluta?

“Apenas nada, la verdad”, contesta el politólogo y profesor titular en la universidad Carlos III de Madrid Pablo Simón, que está especializado en partidos, sistemas electorales y participación política. “El sistema es bastante proporcional, superada la barrera del 5% [que establece qué partidos tienen representación en la Asamblea y cuáles no]”.

Así lo ven en el PP. “Se reparten menos diputados, en este caso uno, pero el coste de votos por escaño sube”, analiza una fuente conocedora de la estrategia electoral del partido conservador. “La mayoría absoluta no es más fácil”, sigue, empleando el argumento de que ahora habrá que sumar más votos para conseguir el mismo escaño que en 2021. “Y es igual para todos”.

Sin embargo, en Más Madrid consideran que el cambio sí facilita la mayoría absoluta. “Es algo puramente matemático”, opina Javier Padilla, el portavoz de la campaña de Mónica García (Más Madrid). “Hará falta un escaño menos para la mayoría absoluta”, sigue. “Lo que encarece la mayoría absoluta de Ayuso es su mala gestión, que la aleja de revalidar el Gobierno”.

La Asamblea de Madrid era hasta ahora la Cámara autonómica que más diputados tenía en España, al haber superado la pasada legislatura los 135 representantes del Parlament catalán. La reducción de un diputado se debe a una pérdida poblacional de 29.552 personas con respecto a las pasadas elecciones, pues el estatuto de autonomía establece que “la Asamblea estará compuesta por un Diputado por cada 50.000 habitantes o fracción superior a 25.000, de acuerdo con los datos actualizados del censo de población”.

Es decir, 4.552 personas han determinado que la Asamblea pierda un diputado. Es la primera vez en la historia de la Cámara que ocurre algo así. Desde los 94 diputados de la legislatura inaugural (1983-1987), la Cámara siempre había crecido en representantes.

Gobierno monocolor

En mayo de 2021, la candidatura de Díaz Ayuso obtuvo más escaños (65) que toda la izquierda junta (Más Madrid, PSOE y Podemos sumaron 58). Eso ha permitido que el Gobierno monocolor del PP apenas necesitara cuatro abstenciones de Vox durante la legislatura que ahora ha acabado para sacar adelante sus proyectos. Sin embargo, de cara a los comicios del 28 de mayo, la incertidumbre es máxima.

Primero, porque Díaz Ayuso se ha obligado a obtener la mayoría absoluta (dijo que no lograrla “sería una decepción”); se ha cerrado a un gobierno de coalición con la extrema derecha (“sería nefasto”); y, de hecho, incluso la ha descartado como socio estable (“A partir de hoy, cada uno sigue su camino”).

Segundo, porque todas las encuestas reflejan que Podemos deberá luchar durante la campaña para sumar el 5% de votos que marca la entrada en la Cámara regional. Y de que lo consiga, o no, pueden depender muchas cosas: ese mínimo exigible, de cumplirse, supone obtener directamente siete diputados, que de otra manera quedan libres y pueden decidir la mayoría absoluta del PP.

Y tercero, porque la izquierda vuelve a acudir dividida a las urnas, pese a las malas experiencias previas: en 2015, Izquierda Unida logró 130.000 votos, pero no superó la barrera del 5%, se quedó fuera del Parlamento regional, y así propició que el PP mantuviera el poder gracias a una alianza con Ciudadanos que personificaron Cristina Cifuentes e Ignacio Aguado.

La campaña electoral de Madrid, de 15 días de duración, comenzará a las 00.00 horas del viernes 12 de mayo y finalizará a las 23.59 horas del viernes 26 de mayo. La sesión constitutiva de la Asamblea se celebrará el día 13 de junio, a las 10 horas.

Además de la Comunidad de Madrid, otras 11 autonomías disuelven parlamentos y convocan elecciones para el 28 de mayo este lunes, cumpliendo así la Ley Orgánica de Régimen Electoral General (LOREG), que exige que el decreto se expida 55 días antes del último domingo de mayo.

Ximo Puig con sus 12 consejeros

El presidente de la Generalitat, el socialista Ximo Puig, ha firmado el decreto que disuelve Les Corts tras una legislatura que ha calificado de “excepcional”. Ha comparecido en una declaración institucional, en la que ha estado arropado por todos los consejeros, una imagen que contrasta con la última convocatoria electoral, cuando compareció solo al estar en contra los miembros de Compromís del adelanto electoral que impidió la coincidencia de las autonómicas con las municipales. Ha habido incluso una foto de familia con los 12 miembros del Consell, del PSPV-PSOE, Compromís y Unides Podem.

El presidente ha defendido que se cierra una legislatura “excepcional” y “única para el autogobierno” en la que la Comunidad Valenciana ha avanzado en creación de empleo y en cohesión social y tiene ante sí “un nuevo mapa de oportunidades”.

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