El consejero de Sanidad valenciano se compromete a comunicar en un máximo de 30 días los resultados de las mamografías
Los socialistas denuncian que 90.217 mujeres no han sido llamadas por la Generalitat para el cribado del cáncer de mama y pregunta por la externalización de las lecturas
El consejero de Sanidad, Marciano Gómez, se ha comprometido este miércoles en las Cortes Valencianas a que su departamento garantizará la comunicación de los resultados de mamografías del programa de cribado de cáncer de mama en un plazo máximo de 30 días desde la realización de la prueba. El diputado socialista Rafael Simó ha interpelado por la tarde al consejero por la política general de Sanidad en la lucha contra el cáncer de mama tras denunciar que un total de “90.217 mujeres valencianas han sido abandonadas por el Consell tras no ser llamadas para las pruebas de cribado“. ”Le pedimos muchas explicaciones y más transparencia, consejero", le ha espetado Simó.
En su comparecencia ante el pleno del Parlamento autonómico, Gómez ha explicado que las cartas de invitación a participar en el programa ya incluyen la advertencia de que si en ese plazo no se ha recibido notificación de resultados acudan al SAIP de su hospital, donde se ha establecido un trámite y procedimiento específico para el seguimiento de casos, o lo notifiquen enviando un correo electrónico a la dirección cribado_programa_mama@gva.es. “Tranquilos que aquí no va a pasar lo que en Andalucía”, ha dicho.
El consejero ha anunciado que en el primer semestre de 2026 se completará el impulso tecnológico dado al programa con la automatización integral del proceso apoyado en plataformas de comunicación omnicanal, de manera que las mujeres podrán recibir toda la información del proceso, desde la invitación, citas para pruebas o informe de resultados, a través de la nueva versión de la aplicación móvil GVA Salut que se pondrá en marcha en breve, y/o a través del canal de comunicación que elijan, ya sea correo electrónico, SMS u otros medios digitales.
De este modo, según informa la Generalitat, la carta en papel enviada por correo postal dejará de ser el único canal disponible.
Este nuevo modelo de comunicación supondrá una mejora sustancial en el modelo de invitación, al garantizar una mayor eficacia en la recepción de las comunicaciones y, con ello, un incremento de la participación en el programa. Además, facilitará una comunicación más rápida y efectiva de los resultados, mejorando así la experiencia y la tranquilidad de las pacientes.
Gómez ha destacado que la labor realizada para recuperar el programa de cribado de cáncer de mama se evidencia en los resultados, ya que “a finales de septiembre de 2025 ya se habían realizado 10.000 mamografías más que en el mismo período del año anterior”.
A su juicio, una transformación estructural de esta magnitud “no se logra en cuestión de semanas. Llevamos ya 15 meses de trabajo intenso, de revisión profunda, de decisiones valientes, y hoy podemos decir que estamos en la fase final y procuraremos tener el programa a pleno rendimiento durante el año 2026”.
“Nos encontramos con un programa en riesgo: desorganizado, tecnológicamente obsoleto y con fallos graves en los circuitos asistenciales, la capacidad de respuesta y la calidad de datos. Ahora estamos en el camino para que sea: moderno, digital, más inteligente, con nuevas capacidades, mayor trazabilidad y centrado en las personas”, ha añadido el consejero ante el pleno.
El síndic socialista, José Muñoz, y el diputado Rafa Simó han sostenido que “la situación de Andalucía no es un caso aislado” -en alusión a los problemas en los protocolos de los cribados en esta comunidad-, sino que “es una política del PP que ha privatizado la sanidad pública”.
Los socialistas han asegurado haber tenido acceso a datos de la Consejería de Sanidad que recogen que 90.217 mujeres valencianas no han sido llamadas para estas pruebas. Además, han indicado que un informe del Comité Econòmic i Social (CES) indica que “desde la entrada de Mazón a la Generalitat se han realizado 12.000 mamografías menos”.
En concreto, este informe señala que en 2022, último año completo del gobierno del Botànic, se realizaron un total de 228.492 mamografías, mientras en 2023 fueron 235.706 y en 2024 223.414.
“Todos los casos que nos están llegando que nos hacen sospechar que en la Comunidad Valenciana, en lo que respecta a la lucha contra el cáncer de mama, se está aplicando el modelo Moreno Bonilla”, ha denunciado el síndic del PSPV, además de lamentar que “hay mujeres que están viviendo en la incertidumbre porque nadie les llama para ratificar resultados después de realizarse una prueba no determinante”.
Muñoz ha defendido que “no se puede mercantilizar la sanidad pública” y que “la lucha contra el cáncer de mama es sagrada y su detección tiene que hacer con la mayor atención, la mayor diligencia y rapidez para evitar casos como los que estamos conociendo”.
Los socialistas han preguntado al consejero de Sanidad, Marciano Gómez, que aclare “cuántas lecturas de mamografías se han externalizado y si se están cumpliendo con los estándares de la Unión Europea”.