Paula García, concejal de Aldaia que deja el PP tras la dana: “En los partidos no se puede decir nada y la gestión ha sido inexistente”
La joven regidora abandona el grupo popular del Ayuntamiento de una de las poblaciones afectadas por las inundaciones del 29 de octubre
Paula García, de 35 años, era concejal del grupo municipal del PP en el Ayuntamiento de Aldaia, uno de los pueblos afectados por la dana, hasta el domingo 17 de noviembre, cuando decidió abandonar el partido. Este martes pasará al grupo de los no adscritos. La decisión obedece a su indignación por la gestión de las mortíferas inundaciones, que han causado 221 m...
Paula García, de 35 años, era concejal del grupo municipal del PP en el Ayuntamiento de Aldaia, uno de los pueblos afectados por la dana, hasta el domingo 17 de noviembre, cuando decidió abandonar el partido. Este martes pasará al grupo de los no adscritos. La decisión obedece a su indignación por la gestión de las mortíferas inundaciones, que han causado 221 muertos en la provincia de Valencia (seis en su localidad, en la que gobierna el PSPV-PSOE), y por la forma de actuar de los partidos, en general, y del suyo, en concreto, según explica a este periódico en conversación telefónica. El PP gobierna la Generalitat valenciana, presidida por Carlos Mazón, cuya actuación lo ha situado en el centro de la polémica. Se trata de uno de los primeros abandonos dentro de un partido político a causa de la gestión de la dana, al menos que haya trascendido públicamente.
“Los partidos políticos son instituciones en las que no se puede decir nada”, argumenta García. “Y la gestión de la dana no es que haya sido pésima, es que ha sido inexistente. Y está esa amenaza de los de arriba, de no poder quejarnos. Me pareció una incoherencia querer quejarme del Gobierno de la Generalitat estando en el mismo partido. Por eso, le comuniqué a mi portavoz, Jesús Molins, que somos amigos, que no lo podía soportar. A él no le pareció el mejor momento. Pero él sabe que soy un verso libre. Y las instituciones nos han abandonado”, agrega.
La llamada pidiendo auxilio que hizo hace unas semanas Paula García a la cadena Cope se hizo viral. En ella, destrozada, gritaba que Aldaia estaba abandonada, que nadie iba a ayudar a la gente. “No salimos en ningún medio, en ninguno, por favor, dadnos visibilidad”, imploraba la joven concejal. Días más tarde, explicaba a esa misma cadena su decisión de dejar el PP.
Para García, “no avisar antes”, la demora en el envío de la alarma a los móviles de la ciudadanía sobre las 20.11, cuando ya había muchas víctimas, fue sin duda “una cagada, pero ya no se podía arreglar”. “Ahora bien, me reconcomía ver que no venía nadie a ayudarnos, que el ejército tardaba tanto en venir. Cuando pasó Filomena, ya estaba el ejército el día después. En Massanassa se cayó [este domingo] un muro en un colegio y mató a una persona. Ya veremos si hay que tirar los colegios. El asunto es muy serio”, agrega. Y continúa: “Estoy en mi calle, el fango se está solidificando y los coches aún están hundidos. Nosotros, en el pueblo, estamos acostumbrados a las inundaciones. Somos los ciudadanos los que nos hemos movilizado coordinados con los voluntarios. Ha sido un desastre por parte de todos y del gobierno local, también”.
García sostiene que no tiene aspiraciones de hacer carrera política y que solo quiere ayudar y poder hablar. El PP cuenta con cuatro concejales en un Ayuntamiento en el que gobierna con mayoría absoluta Guillermo Luján, del PSOE. Los socialistas tienen 14 ediles (sobre un total de 21); Vox, dos; y Compromís, uno.