Puig cree que “hay partido” el 23-J y que a Sánchez se le ha tratado injustamente: “Soy más pedrista que nunca”

El socialista Ximo Puig, presidente en funciones de la Generalitat valenciana, consume sus últimos días al frente del gobierno del Botánic tras ocho años de gestión y una pandemia por medio. Se despide del Palau con el libro Una idea de esperanza, en el que reflexiona sobre lo vivido a lo largo de dos legislaturas y pone los mimbres del que será proyecto socialista de futuro. No evita ningún tema, tampoco las próximas elecciones generales del 23-J, donde cree que hay partido, ni el trato, en su opinión, tan injusto ...

El socialista Ximo Puig, presidente en funciones de la Generalitat valenciana, consume sus últimos días al frente del gobierno del Botánic tras ocho años de gestión y una pandemia por medio. Se despide del Palau con el libro Una idea de esperanza, en el que reflexiona sobre lo vivido a lo largo de dos legislaturas y pone los mimbres del que será proyecto socialista de futuro. No evita ningún tema, tampoco las próximas elecciones generales del 23-J, donde cree que hay partido, ni el trato, en su opinión, tan injusto recibido por Pedro Sánchez cuando las políticas de su gobierno “tienen un gran respaldo” y un “saldo muy positivo”. “Soy más pedrista que nunca”, sostiene.

En un acto celebrado este lunes en el salón de actos del Jardí Botànic de Valencia, organizado por una plataforma cívica que le ha apoyado durante la campaña electoral, el político ha defendido la subida del salario mínimo interprofesional y la reforma laboral, y ha apuntado que Sánchez “tiene defectos pero también virtudes” como el hecho de darle a España “una visibilidad en el mundo que no tenía anteriormente”.

El también secretario general del PSPV-PSOE ha insistido en que a la Comunidad Valenciana “le ha ido mejor con Sánchez que con Mariano Rajoy” tanto desde el punto de vista de recursos como de inversiones, que han aumentado de una manera exponencial. Su relación con Sánchez ha sufrido “altibajos”, según el presidente valenciano, pero “siempre ha estado basada en el respeto y la lealtad, que no en la sumisión”.

Para Puig, “si se consigue que el debate en la campaña esté en hablar sobre cómo ha evolucionado España y en qué España queremos, claramente habrá una renovación del gobierno socialista”, ha señalado, por contra de que continúe “este ruido inmenso del antisanchismo”, una ideología que se manifiesta y se subraya en función de ir contra una persona. “No puedo entenderlo, se apela a la política de las emociones. Emoción, pero sobre todo razón, si no, ¿dónde vamos? Si nos desviamos de la razón y simplemente nos mueve la rabia y la ira”, ha manifestado. “Si algo ha demostrado Pedro Sánchez es su capacidad de resiliencia, y en este momento está con muchas ganas, fuerza y eso da esperanza”, ha agregado.

En un diálogo con las periodistas Ana Talens, Ana Matamales y Ana Garrido, Puig ha descrito el libro como “una carta de urgencia” para poner de manifiesto lo que ha sido su gobierno. “Me comprometo a una aproximación más profunda más adelante”, ha asegurado ante una audiencia formada por colaboradores, compañeros de partido y responsables institucionales.

El presidente ha agradecido la presencia en la presentación del libro de una representación de las víctimas del accidente del metro del 3 de julio de 2006 (del que se cumplen 17 años) que suponen la “base moral” del Botànic y la “recuperación de la gobernanza ética” que debería de ser “consustancial a cualquier gobierno, pero que no siempre ha sido así”, ha apostillado en referencia al trato que el PP dio a la asociación de víctimas y a que su primer gesto como presidente fue recibirlos en la sede del Gobierno valenciano.

El dirigente ha pedido al nuevo ejecutivo autonómico del PP y Vox que “gobierne para todos” porque la realidad electoral del 28-J arroja solo 20.000 votos de diferencia entre el bloque de la derecha y el de la izquierda. “El Consell ha de gobernar siempre para todos pero el resultado no debería dar pie a una enmienda a la totalidad de lo que ha hecho el Botànic en ocho años. Tengo esperanza en que la racionalidad se imponga y no se atienda a posiciones de contrapunto, aunque hay cuestiones en las que no hay ni un día de gracia como la violencia de género, la homofobia o la xenofobia”, ha defendido.

Puig ha reconocido que los días más duros de sus dos mandatos fueron en la pandemia, cuando la consejera de Sanidad le informaba cada día del número de ciudadanos ingresados en las UCI o los fallecidos. Entre las cuestiones pendientes de resolver está la infrafinanciación valenciana: “No lo hemos conseguido y me duele no haber avanzado suficientemente”. Sin embargo, Puig se queda con el fortalecimiento del diálogo social, que espera que se preserve: “Desde la oposición van a contar con nuestro respaldo porque no se puede dar ni un paso atrás”, ha subrayado.

El presidente ha reivindicado los 700.000 votos que ha recibido el PSPV en las últimas elecciones autonómicas “y no voy a desertar de esa responsabilidad”. Los socialistas han crecido en casi 10 puntos en apoyo electoral desde 2015 y está, según Puig, en buena posición para lanzar un proyecto de mayorías. “Tenemos que promover una alternativa potente y de largo alcance. Me voy a ocupar de construir esa alternativa y dentro de un tiempo veremos quienes son las personas que tienen que dirigirla. Me veo en la construcción de esa alternativa y en el debate de lo que debería ser España, del impulso federal”.

Puig, según cuenta, ha podido después del 28-M de pasear por las calles o ir a comprar al mercado “y me he encontrado un afecto extraordinario. Ni una mala palabra”.

Senador territorial y presidente de grupo

A su llegada al acto, y a preguntas de los periodistas, el presidente en funciones ha deslizado la posibilidad de convertirse en senador territorial por la Comunidad Valenciana, dado que él “siempre” ha defendido “la cuestión territorial” y considera que “ahora puede ser el momento de defenderla también desde el Senado”. “Quiero ser útil allá donde lo pueda ser. La cuestión territorial es una cuestión que, como ustedes saben, yo he defendido en todo momento, y ahora puede ser el momento de defenderla también desde el Senado”, ha manifestado.

Puig se mantendría como presidente del grupo socialista en el Parlamento autonómico, que no síndic, y ha recordado la reunión este miércoles de la ejecutiva nacional del partido, en la que, según ha avanzado, se decidirá “todos los miembros de la dirección del grupo y las diferentes áreas”. Los cargos se decidirán con el objetivo de ser una alternativa de gobierno: “Para que un país funcione ha de tener un buen gobierno y una buena oposición y ahora lo que nos toca al PSPV es hacer una buena oposición y clarificar cuál es realmente la alternativa, y la alternativa es el partido socialista”.